A pesar de perder un brazo en un accidente, su fortaleza mental y pasión por el deporte la llevaron a cumplir de ser una leyenda en Estados Unidos.
Sufrir un accidente grave puede ser un golpe devastador tanto para la persona como para su entorno. En Estados Unidos, varios deportistas demostraronque, con fortaleza mental y determinación, es posible superar estos traumas y continuar hacia sus sueños. Ejemplos como Bethany Hamilton, la surfista que no dejó que una tragedia la detuviera, muestran la importancia de la resiliencia en la vida y el deporte.
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A nivel mundial, hay múltiples casos de atletas que sufrieron desafíos físicos, desde Lionel Messi con su tratamiento para la hormona de crecimiento, hasta paraolímpicos que alcanzaron sus metas superando grandes obstáculos. Hamilton se suma a esta lista como una inspiración para todos, demostrando que no importa la magnitud de la adversidad, siempre se puede seguir adelante.
La historia de Bethany Hamilton, la surfista que emprendió carrera luego de perder un brazo
La joven promesa del deporte estadounidense nació en Hawái en 1990 y fue criada en el corazón del surf por sus padres, quienes compartían su amor por disciplina. Desde pequeña, el océano fue su hogar, aprendiendo a surfear incluso antes de dominar el caminar. Con tan solo 8 años, ya competía profesionalmente y ganaba competiciones locales, mostrando un talento que la destacaría como una de las futuras estrellas del surf.
El talento innato de Bethany rápidamente la colocó en el radar de grandes marcas como Rip Curl, que la patrocinó desde temprana edad. A los 10 años, ya acumulaba victorias en torneos en distintas categorías, reafirmando su estatus como una niña prodigio sobre la tabla. Todo indicaba que su carrera estaba destinada a ser una de las más brillantes.
Sin embargo, el 31 de octubre de 2003, su vida cambió para siempre. Mientras surfeaba con amigos en la playa de Kauai, un tiburón la atacó, arrancándole el brazo izquierdo. Pese a la gravedad de la situación, sus amigos lograron llevarla a la orilla, donde fue trasladada de inmediato al hospital. Perdió el 60% de su sangre, pero gracias a la rápida intervención médica, logró sobrevivir.
A pesar del trauma físico y emocional, la joven nunca pensó en abandonar el surf. A pesar de tener un lógico miedo tras el accidente, pero llena de voluntad, Bethany volvió a las olas solo 10 semanas después del ataque. Adaptó su tabla para facilitarle el manejo con un solo brazo, y, con el apoyo de su familia, aprendió nuevas técnicas que le permitieran seguir practicando el deporte como antes.
La historia dela deportista claramente no terminaría ahí. Al año siguiente, fue galardonada con el premio ESPY al «Mejor Regreso de un Deportista», y continuó compitiendo a nivel nacional e internacional. Su increíble historia inspiró a millones, y en 2004 escribió su autobiografía Soul Surfer, que se convirtió en un éxito de ventas. Más tarde, en 2011, su vida fue llevada al cine con la película basada en su libro, protagonizada por Anna Sophia Robb, que recaudó más de 10 millones de dólares en su primer fin de semana.
Fuente de TenemosNoticias.com: www.ambito.com
Publicado el: 2024-10-05 17:00:00
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