El entrenador mantiene a River Plate en el primer plano del fútbol suramericano y además ha cerrado ventas fabulosas.
Marcelo Gallardo y Ramón Rodríguez Verdejo, Monchi, son dos hombres que viven del fútbol, que conocen el medio en el que se mueven y que, además, comparten un elemento en común a la hora de gestionar un equipo: consignar ventas millonarias, impulsar clubes a alcanzar su máximo nivel y, en especial, dejar huella en su labor, sea como entrenador o como directivo.
El Muñeco es más que un técnico para River Plate, donde ha conquistado 14 títulos en los más de ocho años que lleva al frente; Monchi es más que un director deportivo: ayudó a la creación de un proceso exitoso con el Sevilla y ganó la Europa League con el cuadro hispalense.
La pandemia, la inflación y la inestabilidad a la que se enfrenta la economía argentina no le han impedido a River Plate recaudar millonarias sumas de dinero en transferencias. Aunque la directiva tiene una responsabilidad enorme en la gestión, el rol de Gallardo ha sido fundamental.
De Funes Mori a Julián Álvarez
Todo el dinero es una cuestión de creencia, decía Adam Smith. En sí, River es un club que aplica de forma constante la premisa anterior y a base de la fe ciega en la figura de Gallardo, los gallinas han logrado cerca de 260 millones de euros en ventas de jugadores en esos últimos ocho años, repitiendo de algún modo el modelo que comanda Monchi en el Sánchez Pizjuán.
River Plate es uno de los equipos a los que apuntan los directivos del fútbol europeo en cada mercado. Lucas Alario (traspasado al Bayer Leverkusen por 22 millones de euros), Lucas Martínez Quarta (traspasado a la Fiorentina por 15) o Ramiro Funes Mori (traspasado al Everton por 14) son algunos de los nombres que se han movido de El Monumental al viejo continente.
Julián Álvarez es la última transferencia importante para Suramérica. Pieza fundamental para el sistema ofensivo, con 22 años aportó 54 goles y 31 asistencias. Ahora, el extremo jugará en el Manchester City y compartirá el ataque con Erling Haaland y Riyad Mahrez.
«Un diamante en bruto»
En las últimas jornadas del torneo local, River no ha obtenido los resultados que la afición esperaba. Sin embargo, una de las características que ha construido Gallardo es la capacidad para renovar la plantilla y encontrar soluciones ante las constantes bajas durante cada ventana de fichajes.
«Es difícil porque hay un equipo que hizo una gran inversión. Se llevan un diamante en bruto. Nosotros somos países exportadores. Se nos han ido muchos jugadores a lo largo de este tiempo y hemos intentado sobrevivir a todas esas partidas», aseguró hace sólo unas semanas.
La salida de Álvarez al City, a cambio de 25 millones de euros, es la venta más cara de River en la era Gallardo. Aunque la intención de River Plate es cerrar nombres que le den un aire a la plantilla, la compleja realidad de la economía argentina ha modificado la hoja de ruta. En ese contexto, el cuerpo técnico deberá hacer malabares para encontrar una nueva figura dentro de la cantera.
Cifras envidiables
El mercado de fichajes es sinónimo de recaudación para River, que ha cerrado seis de las diez ventas más caras en su historia de la mano de su actual técnico. Esto ocurre, en parte, porque Gallardo ha mantenido con firmeza el sistema de juego.
River no ha cambiado la presión alta, la creación de opciones en el arco rival y el juego «atractivo a la vista» que llamó la atención de Florentino Pérez. El presidente del Real Madrid «elogió» el nivel de River en aquella final de Libertadores en el Bernabéu e incluso dejó algunos elogios para Juan Fernando Quintero, autor del gol que inclinó la balanza en favor de los de Gallardo.
En definitiva, El Muñeco es «más que un técnico» en Núñez, el barrio que ejerce un especial magnetismo sobre él y que le ha hecho rehusar, alguna vez, el banquillo de la selección. Nada menos.
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Fuente de TenemosNoticias.com: www.elmundo.es
Publicado el: 2022-07-23 07:22:49
En la sección: Deportes // elmundo