«Galicia se ha convertido en la referencia global del blockchain gracias a la comunidad de desarrolladores que alberga el territorio». El conselleiro de Hacienda y Administración Pública, Miguel Corgos, ha resumido con estas palabras la apuesta de su comunidad por un fenómeno que algunos ya definen como el oro digital. Todo lo anterior ha encontrado este viernes su respaldo con la celebración en A Coruña del II Congreso Internacional de Blockchain, con 800 profesionales participantes, entre visionarios, inversores e innovadores. En su opinión, el blockchain va más allá que las criptomonedas porque «será algo trascendental en nuestra vida, de gran impacto transversal y en una de las tecnologías de mayor demanda de profesionales en el sector TIC».
A su vez, Juan Ignacio Borrego, Concelleiro de Educación, Formación e Innovación Tecnolóxica do Concello de A Coruña, ha remarcado que esta tecnología «va de confianza», en línea con la opinión compartida por los organizadores del evento Coettga/AGGETT (Colegio Oficial y Asociacion Galega de Graduados e Enxeñeiros Técnicos de Telecomunicacions), representados por José Manuel Martínez y Antonio Rodas, respectivamente.
Los ponentes del foro han coincidido en que el blockchain, concepto que podría entenderse en apenas un minuto, «ha pasado de ser una red de frikis a convertirse en una tecnología que definirá la nueva era de la innovación, así como en un sector tan reconocido como cualquier otro», debido a sus prestaciones para garantizar seguridad, transparencia, identidad, inmutabilidad, privacidad, trazabilidad y otras muchas fortalezas. «Ni toda la capacidad de cómputo de Google sería capaz de hackear este sistema descentralizado«, explica Antonino Comesaña, presidente de la Asociación Gallega de Blockchain e IoT (Agalbit), en la jornada de apertura.
Esta tecnología de cadenas de bloques entrelazados, que ni se pueden modificar ni borrar, encuentra pleno sentido en sectores como retail, finanzas, comercio, formación, derecho o comunicación. Pero no todo es un camino de rosas en una tecnología que desde su inicio aprende a convivir con la regulación, la fiscalidad y hasta la controvertida imagen del universo de las criptografías. «Esto va a quedar porque es una evolución de la propia Internet, capaz de transferir valor», recalca Comesaña.
En el mismo sentido ha contribuido Pablo López, fundador de CreatiBlock y Blockchain Venture Builder, quien considera que las finanzas descentralizadas abren un paradigma en la evolución de medio de pago hacia una reserva de valor, capaz de luchar contra la inflación. Hasta el propio Donald Trump, candidato a la presidencia de los EEUU, ha lanzado su colección de NFT para captar fondos para su campaña electoral «y nos hace replantear si esta tecnología sirve para algo que no sea para especular», sin apremiar a los reguladores para intervenir en contra del sentido que dio origen al blockchain y que provoca una crisis de identidad. «Ahora no te asocian con los amigos del mal sino con Blackrock«, uno de los mayores fondos de inversión del mundo.
En opinión de López, lamentó que las criptomonedas o el bitcoin se asemejan más al juego que a los patrones de un nuevo mercado capaz de entender las relaciones financieras, tanto a nivel personal, como institucional o corporativa, incluida la revolución de los contratos inteligentes. Según explica, «es un activo sobre el cual se puede generar valor, con el que se pueden pedir préstamos respaldados por el bitcoin o representar digitalmente el activo, así como ponerlo en el mercado y luego recuperarlo… es decir, el bitcoin se ha convertido en un activo de valor, en el nuevo oro digital». El mismo experto también ha dejado claro que él no reparte consejos de inversión, pero sí ha recomendado a los titulares de bitcoin que «no los vendan, ya que la escasez del propio activo va a permitir que sea el propio dueño de estos activos digitales a prestar recursos hasta a las propias entidades financieras».
Fuente de TenemosNoticias.com: www.eleconomista.es
Publicado el: 2024-09-13 07:55:41
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