La incertidumbre, preocupación y la zozobra entre otros sentimientos y emociones embargan la mente de mamás, primas, tías y demás parientes de 16 jóvenes colombianos que cruzaron la frontera con Venezuela y no volvieron a salir de ese país.
Por El Tiempo
Según sus relatos angustiantes, fueron retenidos por parte de la guardia venezolana sin alguna razón. Cuatro, cinco, ocho meses e incluso, un año han estado privados de la libertad sin conocer las verdaderas causas.
Varios de los familiares indican que en los canales televisivos de Venezuela los han tildado de ‘mercenarios’, ‘criminales’ y ‘delincuentes’ y por ese canal se han enterado de que están en cárceles del vecino país.
Uno de los casos es el de Brayan Zahir Navarro Cáceres, un joven de 28 años originario de Pueblo Bello, César, quien fue detenido el 6 de enero de 2025 en Puerto Cabello, Estado Carabobo, cuando intentaba regresar a su lugar de trabajo en Valencia.
Según relata su tía, Yarileinis Navarro Páez, Brayan había trabajado en Venezuela por tres meses y retornó a Colombia el 30 de diciembre para pasar las festividades de fin de año con su familia.
El 5 de enero, tras despedirse de sus seres queridos, emprendió viaje de regreso a Venezuela, pero en un retén de Puerto Cabello fue bajado del autobús por la Guardia Nacional, quien le exigió sus documentos.
A pesar de haber ingresado legalmente con su pasaporte sellado, la comunicación con su familia se cortó el 6 de enero, a las 11:20 de la mañana, sin más noticias de su paradero durante cuatro meses.
Sin explicaciones, pero con acusaciones
El 15 de mayo, Brayan logró comunicarse con sus familiares a través de WhatsApp, confirmando que estaba vivo y retenido por la Guardia Venezolana. En su mensaje, les pidió que hicieran todo lo posible por la vía diplomática para su liberación y la de otros colombianos detenidos.
Las familias denuncian que no han recibido una notificación formal sobre los motivos de las detenciones, aunque han escuchado acusaciones contra sus seres queridos por traición a la patria, incitación al odio y mercenarismo, cargos que califican de infundados y falsos.
«Brayan no es un delincuente, no es mercenario, no es un terrorista. Es un joven trabajador y padre de familia, querido en su comunidad», afirma su tía.
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Fuente de TenemosNoticias.com: albertonews.com
Publicado el: 2025-06-01 15:15:00
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