✅ Internacionales – Islandia dice que la caza comercial de ballenas puede reanudarse después de una prohibición temporal.

LONDRES (AP) — La caza comercial de ballenas fin puede reanudarse en Islandia, pero con requisitos más estrictos en los métodos de caza y mayor supervisión, anunció el gobierno de la nación insular del Atlántico Norte el jueves.

Grupos de defensa de los derechos de los animales respondieron a la decisión con consternación y la calificaron de «vergonzosa».

La prohibición temporal que las autoridades islandesas impusieron en junio por motivos de bienestar animal termina el jueves.

La Autoridad de Alimentación y Veterinaria de Islandia estimó en un informe de mayo que el 67% de las 58 ballenas capturadas por los barcos que monitoreaban murieron o perdieron el conocimiento rápidamente o de inmediato. Sin embargo, dijo que 14 ballenas fueron disparadas más de una vez y dos fueron disparadas cuatro veces antes de morir.

Tras la publicación del informe, un grupo de expertos oficiales evaluó formas de reducir las «irregularidades» durante la caza de ballenas. Según un comunicado del gobierno, concluyeron esta semana que «es posible mejorar los métodos utilizados para la caza de grandes ballenas» y mejorar el bienestar animal.

Las ballenas fin son la especie de ballenas más grandes del mundo después de las ballenas azules, según la Comisión Ballenera Internacional.

El Ministerio de Alimentación, Agricultura y Pesca dijo que las nuevas regulaciones incluirán requisitos más estrictos para el equipo y los métodos de caza. La Autoridad de Alimentación y Veterinaria y la Dirección de Pesca trabajarán juntas para supervisar la caza de ballenas, según dijo el ministerio.

Humane Society International, un grupo de defensa del bienestar animal, condenó la medida como un «rechazo devastador» a la oportunidad de «hacer lo correcto».

«Simplemente no hay forma de hacer que el arponeo de ballenas en el mar sea algo diferente a cruel y sangriento, y ninguna cantidad de modificaciones cambiará eso», dijo Ruud Tombrock, director ejecutivo del grupo.

La Comisión Ballenera Internacional impuso una prohibición de la caza comercial de ballenas en la década de 1980 debido a la disminución de las poblaciones. Islandia abandonó la IWC en 1992, pero regresó en 2002 con una reserva a la prohibición. Permitió que la caza comercial de ballenas se reanudara en 2006.

Junto con Noruega y Japón, Islandia es uno de los pocos países que aún practica la caza comercial de ballenas. El país tiene cuotas anuales para las ballenas fin y las ballenas minke que se permite a los pescadores cazar en sus aguas. Exporta la mayoría de su carne de ballena a Japón, pero la demanda allí ha disminuido desde que Japón abandonó la IWC.

«Casi nadie come (carne de ballena) aquí en Islandia … La gente no quiere esto, la gente no quiere la matanza de estos animales», dijo Micah Garen, activista del clima y director de un documental llamado «The Last Whaling Station».

Dijo que él y otros están considerando emprender acciones legales para bloquear la práctica. «Esto es malo para Islandia, es malo para el planeta», dijo.