Críticas a Enrique Márquez por declaraciones sobre presidenciales

El presidente del CNE reclamó en un comunicado, en la página web del organismo electoral, que Enrique Márquez había expresado opiniones en forma pública que son “contrarias al compromiso” que los rectores adquirieron con la institución. Por su parte, Diosdado Cabello criticó al vicepresidente del ente comicial y lo calificó como “agente de la oposición”.

Caracas. El presidente del Consejo Nacional Electoral, Pedro Calzadilla, emitió un comunicado a través del ente comicial en el que criticó públicamente la postura del vicepresidente y rector principal Enrique Márquez por sus declaraciones a la prensa sobre la agenda política nacional.

En el comunicado, distribuido en el portal web, en las redes sociales y por el departamento de prensa del CNE, Calzadilla cuestionó las declaraciones de Márquez asegurando que estas ponen en peligro la tarea del órgano comicial de “garantizar las condiciones para que la sociedad venezolana pueda dirimir sus diferencias por la vía electoral”.

El texto indica que las declaraciones de Calzadilla se realizaron luego de una sesión del directorio del CNE en el que se “discutieron las implicaciones de las reiteradas intervenciones públicas de Márquez en la agenda político nacional”.

“El CNE fue el resultado genuino de la férrea voluntad de las fuerzas democráticas por lograr la estabilidad política que el país anhelaba a través de la conformación de un organismo electoral imparcial, confiable y transparente. Las opiniones públicas constantemente emitidas por el rector Márquez no solo son contrarias al compromiso que adquirimos con los principios de esta institución, sino que también ponen en riesgo la paz y el equilibrio alcanzado este año”, se lee en el comunicado.

El regaño público de Calzadilla a Márquez se produjo luego de que el vicepresidente del CNE declarara en el programa A Ocho Columnas que no se había estudiado la posibilidad de adelantar las elecciones presidenciales.

Antes de las declaraciones de Enrique Márquez, varios voceros del chavismo, incluyendo a Nicolás Maduro, habían asomado la posibilidad de que las elecciones presidenciales, previstas para finales del 2024, se podían llevar a cabo a mediados del año 2023, algo que complicaría los planes de la oposición venezolana de hacer primarias para definir un candidato unitario.

No se ha discutido hasta ahora. Eso no es agenda en el CNE, se tendrá que convocar en el momento que corresponde. El momento es el último trimestre de 2024, no es antes”, dijo Márquez en A Ocho Columnas.

El vicepresidente del CNE también aclaró que la excepción del año 2018, cuando las elecciones presidenciales se adelantaron para mayo, se hizo por mandato de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), un organismo supraconstitucional.

Además del comunicado de Pedro Calzadilla; Diosdado Cabello, vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela, también cargó contra Enrique Márquez al acusarlo de ser un “agente de la oposición”.

“Márquez salió a decir que las elecciones tienen que ser en el último trimestre del 2024, que las otras (2018) se hicieron en mayo por la ANC, pero ¿por qué no dijo nada cuando la oposición pidió que se adelantaran las elecciones?, ¿por qué no cuando la oposición pedía elecciones ya? Porque es un agente de la oposición”, dijo Cabello durante el programa Con El Mazo Dando.

Las elecciones serán cuando el CNE diga, el chavismo está preparado cuando sea, si el CNE dice que las elecciones son el 10 de enero de 2023, nosotros estamos listos. Yo no sé si ustedes (la oposición) están listos, quizás por eso tu lloradera. Te expones como lo que eres, un opositor haciendo ejercicio dentro del CNE”, soltó Cabello.

Esta no fue la primera vez en la que Diosdado Cabello usó su programa en VTV para atacar a Márquez. El 8 de junio de 2021, el rector del CNE había anunciado una investigación contra dicho programa por el uso de recursos públicos para promocionar las primarias del PSUV, algo a lo que Cabello respondió dos días después amenazándolo con el artículo 70 de la Ley contra la Corrupción, en la que se establece una pena de uno a tres años de cárcel para un funcionario que haciendo uso de sus funciones favorezca o perjudique a algún candidato o grupo.