María Natalia Cauca es la primera mujer de Colombia en convertirse en tirador élite

El Ejército Nacional de Colombia anunció la graduación de la teniente María Natalia Cauca Moreno, quien se convirtió en la primera mujer en obtener el título de tirador élite de plataforma aérea y móvil.

Su proceso de formación para capacitarse fue arduo y minucioso. Después de cuatro semanas de un exigente entrenamiento militar Moreno se consagró en la Escuela de Tiro.

Gracias a su esfuerzo y a las enseñanzas impartidas, ahora la teniente será capaz de alcanzar objetivos en movimiento desde un aeronave en vuelo para el desarrollo de operaciones militares.

El curso realizado por la mujer tiene el propósito de preparar al personal de oficiales, suboficiales y soldados profesionales de las Fuerzas Militares de Colombia.

Se busca tener la posibilidad de alcanzar blancos en cambios dinámicos desde un helicóptero en vuelo. Para ello son empleados fusiles medianos y pesados, con el fin de ser llegar a usarlos durante misiones reales.

Según las especificaciones del curso, un alumno adquiere un entrenamiento diferencial, para contar con la capacidad de realizar disparos dirigidos y precisos en cualquier condición climática a distancias superiores de 400 metros.

Diferencia con el tiro tradicional

El tiro convencional es una práctica de disparo en la que un tirador efectúa un disparo desde una posición estática o fija, como puede ser en el suelo o desde una plataforma estable.

Este tipo de tiro permite al tirador concentrarse únicamente en la puntería y control del arma, ya que la estabilidad del entorno facilita el cálculo preciso de la trayectoria y el impacto del proyectil. Es el tipo de tiro más común en entrenamiento militar, policial, y deportivo.

Por otro lado, el tiro desde aeronaves en movimiento es mucho más complejo debido a la dinámica del entorno. En este caso, el tirador dispara desde un vehículo aéreo en movimiento, lo que introduce múltiples variables adicionales.

Se debe tener en cuenta la velocidad del vehículo, la altitud, la dirección del vuelo, y las condiciones meteorológicas juegan un papel crucial en la precisión del disparo. A diferencia del tiro normal, aquí el tirador debe compensar por el movimiento propio y del objetivo, lo que requiere una gran habilidad y experiencia.

REDACCIÓN DE ÚLTIMAS NOTICIAS

IVY LARRARTE ALARCÓN

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