Estado de conmoción interior en Colombia
El presidente colombiano Gustavo Petro declaró el lunes el estado de conmoción interior ante los combates entre grupos armados en el noreste del país, especialmente en la zona fronteriza con Venezuela. Esta situación ha dejado en los últimos cuatro días al menos 80 muertos y 11.000 desplazados, según cifras oficiales. «Se declara el estado de conmoción interior y el estado de emergencia económica. Espero del poder judicial su apoyo», expresó Petro a través de su cuenta de X.
Medidas excepcionales ante la violencia
La conmoción interior permite al gobierno tomar medidas excepcionales a través de poderes especiales para enfrentar amenazas y elaborar decretos con fuerza de ley por un periodo no mayor a 90 días, prorrogables hasta por otros dos periodos iguales con la aprobación del Senado. Además, el presidente anunciará el estado de emergencia económica, que facilitará el uso rápido de recursos financieros para la región afectada.
Petro, además, había advertido a la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) que ordenará acciones ofensivas debido a la reciente ola de violencia. “El ELN ha escogido el camino de la guerra y guerra tendrá”, indicó.
Impacto en la población y diálogos de paz suspendidos
Al menos 80 personas han muerto en la región de Catatumbo, y 11.000 han sido desplazadas hacia ciudades como Cúcuta y Ocaña, según la Defensoría del Pueblo. Entre los fallecidos, se reportan al menos siete firmantes de paz del acuerdo con las FARC. La violencia ha sido impulsada principalmente por el ELN, que intenta tomar control del territorio y de economías ilegales como el narcotráfico. Debido a la escalada de violencia, Petro decidió suspender por segunda vez los diálogos de paz con el ELN desde que se reiniciaron en noviembre de 2022.
Demandas de paz en el Catatumbo
Mientras tanto, en el Catatumbo, decenas de personas se manifestaron pidiendo paz, sosteniendo globos y camisetas blancas. “¡El Catatumbo necesita la paz, La Gabarra necesita la paz!”, clamaban desde un corregimiento donde la comunidad ha estado en medio de la violencia. La Defensoría del Pueblo también ha indicado que hay riesgo de desplazamiento de comunidades indígenas en la zona, además de continuar los secuestros y el temor generalizado en la población civil. Más de 200 personas han sido evacuadas por el ejército y la policía, incluidos firmantes de paz que temen por su vida.
Fuente y créditos: www.vozdeamerica.com
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