Expulsión de Luis Fernando Figari del Sodalicio de Vida Cristiana
El Vaticano expulsó el miércoles al fundador laico del influyente movimiento religioso peruano, el Sodalicio de Vida Cristiana, tras más de una década de minimizar las acusaciones de abusos sexuales, psicológicos y corrupción financiera. Esta medida se produce después de que el papa Francisco ordenara en 2023 una investigación de alto nivel sobre el Sodalicio por parte de expertos en abusos sexuales del Vaticano.
Investigaciones Previas y Comportamiento de Figari
Según el decreto publicado por la Conferencia Episcopal Peruana, Francisco autorizó expresamente la expulsión de Luis Fernando Figari, a pesar de que el derecho canónico no abordaba su conducta presunta de manera clara. El decreto destaca que el comportamiento de Figari era “incompatible y por lo tanto inaceptable” en un miembro de la Iglesia, ocasionando escándalo y grave daño al bien de la Iglesia y sus fieles.
Figari fundó el Sodalicio en 1971, buscando reclutar “soldados para Dios”, y ha enfrentado denuncias desde el año 2000. Sin embargo, las acciones concretas de la Santa Sede para abordar estas acusaciones no comenzaron hasta el libro «Mitad monjes, mitad soldados» de 2015, escrito por Pedro Salinas y Paola Ugaz, donde se detallan las infamantes prácticas del grupo.
Impacto de la Investigación Externa
Una investigación externa de 2017 concluyó que Figari tenía un comportamiento abusivo y manipulador, lo que llevó a que el Sodalicio le ordenara vivir apartado en Roma, aunque la Santa Sede no lo expulsó en ese momento. Salinas comentó que la expulsión representa un paso positivo hacia la justicia y la posible disolución del Sodalicio.
Reacción del Sodalicio y Comparación con Otras Órdenes Religiosas
El Sodalicio se ha distanciado de Figari, afirmando que está en un proceso de «renovación”. El comunicado del superior general, José David Correa González, enfatiza que Figari no es un referente espiritual para la comunidad. Se pueden observar similitudes con casos anteriores, como el de los Legionarios de Cristo, quienes enfrentaron un proceso de reforma en lugar de ser suprimidos tras la revelación de abusos por parte de su fundador, Marcial Maciel.
La expulsión de Figari se da en un contexto más amplio de cambios dentro del Sodalicio, que controla importantes intereses económicos, lo que añade un nivel de complejidad a la situación. La periodista Paola Ugaz destacó que esta decisión debe ser una lección para organizaciones eclesiásticas que se beneficiaron del estatus de la Iglesia en Perú y que deben escuchar a las víctimas que han denunciado por años.
Fuente y créditos: www.vozdeamerica.com
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