¿Cuánto petróleo adicional puede producir Pdvsa con la suspensión temporal de sanciones?

La suspensión temporal de las sanciones otorgada por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (Ofac) del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos supone un impulso a la producción de Petróleos de Venezuela (Pdvsa). Sin embargo, los economistas dudan que se produzca un gran salto en la producción petrolera venezolana, en especial en el corto plazo.

“Pdvsa no cuenta con los recursos de financiamiento para recuperar los pozos petroleros que hace falta. Hay que ser cautos con las proyecciones de crecimiento petrolero”, aseguró el economista Luis Zambrano Sequín, durante la presentación del “Informe de Coyuntura Octubre 2023”, por parte del Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales de la Universidad Católica Andrés Bello (IIES – Ucab).

Por debajo del millón de barriles diarios

La proyección económica del IIES- Ucab, de hecho, es que la producción petrolera venezolana solo puede aumentar cerca de 200.000 barriles diarios adicionales en el corto plazo. Esto impulsado, sobre todo, por el regreso de la petrolera española Repsol, que pudiera sumar entre 100.000 y 150.000 barriles más con su empresa mixta ubicada en la Faja Petrolífera del Orinoco.  

El economista especializado en el análisis petrolero, Francisco Monaldi, también coincide en que Pdvsa de la mano de sus socios extranjeros puede impulsar su producción en otros 200.000 barriles diarios, como lo detalló en sus redes sociales.

Ahora Pdvsa produce algo más de 750.000 barriles diarios, de acuerdo con los reportes mensuales de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (Opep), y eso implica que el impulso de la nueva suspensión temporal de las sanciones estadounidenses ni siquiera le alcanzaría para volver a montarse en una producción de más de un millón de barriles diarios.

Desde la firma privada de Ecoanalítica, por ejemplo, no proyectan que esta barrera del millón de barriles diarios de producción petrolera pueda superarse antes de 2025, aun cuando se renueven estas licencias petroleras de la Ofac que, en principio, tienen vigencia hasta el próximo 18 de abril de 2024.

El cálculo más optimista proviene de “Petróleo por Venezuela”. Esta firma, dirigida por el economista Francisco Rodríguez, quien en el pasado fue asesor de la Asamblea Nacional durante el comienzo de la era chavista, tiene una proyección de 600.000 barriles diarios adicionales en la producción de Pdvsa en la primera fase de la desaparición de las sanciones estadounidenses.

Sin servicios, ni personal calificado

Pdvsa dejó de producir un millón de barriles en el año 2019 bajo la conducción del militar Manuel Quevedo. Justo en ese año llegaron también las sanciones petroleras estadounidenses, pero la explicación de por qué los economistas no esperan un rebote inmediato de producción tiene que ver con el estado actual de la infraestructura nacional y la larga desinversión en el sector petrolero.

“Para que el sector petrolero pueda crecer hacen falta inversiones en el sistema eléctrico nacional y mejoras en el tema de la seguridad alrededor de los pozos petroleros. Hay que recuperar los servicios a la industria petrolera y considerar también la escasez de capital humano formado, algo que con la migración se acentuó”, detalló el economista Zambrano Sequín desde la Ucab.

La falta del personal petrolero va más allá de los ingenieros petroleros que encontraron nuevos puestos de empleo con mejor remuneración en los Estados Unidos y Canadá, los países árabes o incluso en Colombia, Argentina y Perú. Se trata, además, de personas capacitadas en oficios más sencillos y claves para la industria petrolera nacional.

La petrolera estadounidense Chevron, por ejemplo, tuvo que organizar talleres de soldadores en el estado Zulia durante este año, debido a que no encontraban al personal venezolano necesario en medio de su regreso a la producción en Venezuela.

Todos los economistas coinciden, sin embargo, en que esta suspensión temporal de las sanciones estadounidenses es el primer paso necesario para atraer la inversión extranjera que se necesita para recuperar al sector y que Venezuela pueda aumentar su producción petrolera de forma sostenida.

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