El clima que reina en el mercado financiero en los últimos pasos del 2024 no terminará con la última campanada del 31 de diciembre. El banco de inversión Bank of America (BofA) descuenta que el 2025 traerá mayor volatilidad al mercado por la incertidumbre global y a raíz del resultado electoral en Estados Unidos y con la victoria de Donald Trump. Y, si bien la economía estadounidense seguirá mostrando su fortaleza, la política comercial estadounidense condicionará al crecimiento en los próximos meses.
El economista jefe para Europa de BofA, Rubén Segura-Cayuela, adelanta que la economía de Estados Unidos seguirá al frente del crecimiento de las economías desarrolladas en 2025. «La economía estadounidense parte de una situación extremadamente resiliente«, comentó Segura-Cayuela, quien añadió que las dudas vendrán de cómo implemente Trump sus políticas arancelarias.
Con unos indicadores macroeconómicos que mostrarán el año que viene una economía fuerte impulsada por una fiscalidad más laxa, la inflación podría situarse en 2025 por encima de lo previsto por la Reserva Federal de Estados. «La inflación podría estancarse por encima de los niveles objetivos de la Fed en el 2% más allá de 2026, lo que obligará a recalibrar la política monetaria con menos recortes», comentó el responsable de Bank of America. Desde el banco de inversión estiman que solo vendrían tres recortes más de tipos que dejaría la tasa de referencia en el entorno del 3,5% al 4%.
Este entorno mantendrá al dólar en una posición dominante frente a otras divisas como el euro, que podría caer hasta verse un cruce entre ambas divisas en los 1,03 dólares al cambio antes de estabilizarse en los 1,1 dólares.
Del mismo modo, los índices de Wall Street encontrarían en este panorama la posibilidad de anotar nuevos máximos históricos. «La bolsa de Estados Unidos debería seguir fuerte con volatilidad hasta que se despejen las dudas de las próximas políticas estadounidenses en materia de aranceles», comentaron desde BofA. Las presiones del banco de inversión sitúan al S&P 500 en los 6.666 puntos al cierre del 2025 que implicarían un potencial alcista del 10% desde los niveles actuales.
La situación de la economía europea difiere del caso estadounidense. El banco de inversión considera que los países del centro de la eurozona permanecerán en una situación de debilidad superior a la de los países de la periferia en los próximos meses, principalmente en el caso de Alemania y Francia. Por ello, consideran que el Stoxx 600 podría enfrentarse a caídas de hasta el 9% en el próximo ejercicio.
Desde el banco de inversión se sienten más predispuestos por los valores defensivos de la bolsa europea como son los sectores enfocados a la alimentación o las farmacéuticas. Del mismo modo, desde Bank of America descuentan que las compañías cíclicas, aquellas que mejor desempeño tienen cuando la economía está en fase expansiva, tendrán las de perder en el 2025. BofA también infrapondera al sector de las aerolíneas, seguros y al sector bancario, en los que prevén caídas y que pasarán factura a índices como el Ibex 35, con una ponderación elevada en compañías financieras.
No obstante, y a pesar de que varios índices bursátiles a ambos lados del Atlántico coticen en máximos del año e incluso máximos históricos, no se puede hablar de burbuja financiera, según la firma. «Faltan años antes de encontrar un punto de gran ajuste en los mercados», comentó el responsable de estrategias en materias primas y derivados de Bank of America, Francisco Blanch.
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