BBVA ha colocado este miércoles 1.000 millones de euros de una nueva emisión de deuda Tier 2 a doce años y con la posibilidad de amortización a siete años. La deuda subordinada es un bono idéntico a los bonos simples, pero la diferencia está en su «prelación de cobro», ya que, en caso de liquidación, el cobro de esos bonos por parte de sus tenedores está «subordinado» a que el resto de los acreedores comunes haya cobrado su deuda. La amortización a siete años significa que los compradores de bonos podrían obtener su dinero antes de los doce años; en concreto, a los siete, si así lo decidiera la entidad.
El mercado ha recibido la noticia con una demanda que ha llegado a superar en algún momento los 3.000 millones, tres veces más que la cifra establecida. Por esta razón, el precio ha quedado fijado en ‘mid swap’ + 200 puntos básicos, por debajo del precio de salida, que estaba en ‘mid swap’ + 225 puntos básico. Es la séptima transacción mayorista del año. Dicha operación está detrás del plan financiero previsto por BBVA para este año, que culminaría con la nueva emisión de deuda con el fin de hacer más eficiente la estructura del capital. Los bancos colocadores designados para esta transacción han sido BBVA (B&D), ING, JP Morgan, UBS y UniCredit.
En lo que va de año, BBVA ha llevado a cabo seis emisiones de deuda más. Una de ellas fue sénior preferente estructurada en dos partes y con 1.750 millones de euros, la segunda fue una emisión doble deuda sénior preferente y no preferente en dólares con un volumen que llega a los 1.000 millones por cada una, la siguiente de deuda subordinada Tier 2 con un valor de 1.250 millones de euros, otro fue un bono verde sénior preferente con un volumen de 1.000 millones de euros y, en último lugar, el bono que emitió continente convertible -que también se conoce como CoCo o AT1- y que constaba de 750 millones de euros.
Fuente de TenemosNoticias.com: www.eleconomista.es
Publicado el: 2024-08-21 19:26:58
En la sección: elEconomista Mercados