Con un local en Marbella y otro en Madrid, se podría decir que a estas alturas Roostiq es una marca más que consagrada: los espacios, los platos y sus ingredientes de producción propia son algunos de los factores que crean la identidad de la marca, aunque desde hace menos de dos meses abrió sus puertas Roostiq Bar, un espacio que guarda toda la esencia y que está llamado a convertirse en uno de los sitios de moda de la capital.
Cruzar el umbral de la puerta de este nuevo local ubicado en el número 40 de la calle Barquillo es descubrir un espacio lleno de posibilidades: desde la barra donde tomar unos cócteles y acompañarlo con sus clásicos torreznos, la sala, donde sentarnos con calma a disfrutar de las delicias de su carta, hasta el reservado ubicado en la planta de abajo donde celebrar una experiencia más íntima.
Misma esencia, distinto concepto
Tal y como explican desde este restaurante, en Roostiq Bar se mantiene la la filosofía de su propuesta gastronómica en cuanto al autoabastecimiento. De sus dos fincas de Ávila donde tienen huerto y ganadería, salen productos que utilizan en los restaurantes como el pollo, el cerdo, o algunos vegetales como el tomate, una de las señas de identidad de Roostiq.
En cuanto a la carta de comida, hay platos clásicos de la marca que no podían faltar tampoco en Roostiq Bar, como es el caso de sus clásicos torreznos ahumados o la tarta de queso, aunque la propuesta de este nuevo local centra su oferta en lo que sería la carta de un bar elevado a la máxima expresión con platos para compartir y hasta para comer con las manos si nos sentimos más cómodos.
Mientras que en Roostiq sus pizzas cocinadas en su horno de leña son uno de sus imprescindibles, en Roostiq Bar la ensaladilla templada con gamba blanca de Huelva, el sando de solomillo de vaca al fuego, el sandwich de pollo rebozado, la burger o cualquiera de sus carnes a la brasa, como la chuleta de vaca o el entrecot o la picaña de Wagyu son algunos de esos platos con los que vas a poder saborear este nuevo concepto.

700 referencias de vino y mucho más
Zoilo Álvarez, el creador de Roostiq, asegura que con este nuevo espacio buscan crear lo que ellos entienden como concepto de bar. «Un espacio para todos, donde comer y beber en cualquier momento del día. Un sitio donde disfrutar de la materia prima de calidad de nuestras fincas, manteniendo la forma de hacer que nos caracteriza en Roostiq pero centrado en la parte líquida – vinos como los de Borgoña, amplia variedad de champanes, y coctelería centrada en nuestros whiskies y tequilas». Y dicho y hecho.
Sin duda uno de los puntos fuertes de Roostiq Bar es su selecta carta líquida, donde encontramos una selección de más de 700 referencias enológicas que han escogido entre Zoilo y Pablo Sánchez, el responsable de sumillería.

El champán es uno de los productos estrella del local ya que, tal y como asegura el fundador de Roostiq Bar, es el maridaje perfecto para cualquier comida, por lo que podemos encontrar referencias como Dom Pérignon, Krug o Moët & Chandon.
En cuanto a los vinos, Zoilo Álvarez tiene una predilección especial por los borgoñas, aunque podemos encontrar una exquisita selección de vinos nacionales e internacionales donde los amantes del buen beber pueden deleitarse con todos los sentidos.
Mixología, la tercera pata de Roostiq Bar
En su objetivo de hacer de este local un lugar más distendido y con infinitas posibilidades, Roostiq Bar ofrece también un espacio dedicado a la mixología donde ponen en valor tequilas, mezcales y whiskies, con más de 300 referencias de estos destilados.
«La coctelería en Roostiq se entiende como una forma de arte que combina creatividad, técnica y pasión en cada sorbo. Desde los clásicos que nunca pasan de moda, como el Dry Martini o el Negroni, hasta las creaciones más innovadoras con espumas, infusiones y destilados exóticos como el Laidy Petite, el Tomate Basil Smash o el ETT, algunos elaborados con ingredientes de la huerta de Roostiq o varios tipos de destilados de agave», aseguran desde este local.

Este nuevo local en el barrio de Justicia tiene un horario ininterrumpido de 13:15h a 00:00h -y en barra hasta la 02:00h- donde acudir a pegarnos un homenaje o sencillamente a tomar un picoteo en barra de alguno de sus platillos con un buen champán o una copa de nuestro vino favorito, por lo que el ticket medio de la experiencia puede variar en una amplia horquilla.
En cualquier caso, Roostiq Bar es el local donde ir a comerte una buena carne a la brasa, donde acudir a tomar una cerveza, sus croquetas y su burger, o donde pasar por la barra a brindar con una copa de un buen espumoso mientras nos comemos unos torreznos. ¡Todo planazos!
Fuente de TenemosNoticias.com: www.20minutos.es
Publicado el: 2025-02-02 13:00:00
En la sección: 20MINUTOS.ES – Gastronomía