Cory Booker, el senador que lleva más de 15 horas dando un discurso de protesta contra Trump (y seguirá mientras el cuerpo se lo permita)

«Me alzo aquí con la intención de alterar el funcionamiento normal del Senado de Estados Unidos tanto tiempo como pueda físicamente», dijo al comienzo de su intervención.

Para las 2 pm del martes, él seguía hablando mientras había más de 50.000 personas viéndolo en directo por su canal en YouTube.

Su maratoniano discurso parece ser una de las acciones adoptadas por los demócratas, a los que parte de sus bases reporchan una supuesta docilidad con las acciones de Trump en los primeros meses de su gobierno.

Booker ha estado hablando, a veces con voz atronadora, sobre los planes de recortar los programas de asistencia sanitaria de Medicare y Medicaid, y de la Seguridad Social, que atribuye al gobierno de Trump.

Booker dijo que «en solo 71 días, el presidente de Estados Unidos ha infligido tanto daño a la seguridad de los estadounidenses» y a los «fundamentos de nuestra democracia», que no cabe sino concluir que «estos no son tiempos normales y no deben ser tratados como tales».

Cuando llegó el amanecer, el senador reafirmó su intención de no callar. «Estoy bien despierto. Voy a estar aquí en pie tantas horas como pueda». El discurso del legislador ha obligado a prolongar los turnos de trabajo de los policías y otros trabajadores de la Cámara.

La acción de Booker ha puesto los focos en él y refleja los movimientos que se están produciendo en el Partido Demócrata.

Los demócratas llevan sumidos en la conmoción desde que su candidata, Kamala Harris, perdió la elección presidencial de noviembre ante Trump.

Después de un agitado debate interno, su líder en el Senado, Chuck Schummer, decidió no bloquear el aumento del gasto federal que necesitaba el gobierno, lo que provocó las críticas de los sectores más a la izquierda, que demandaban a sus dirigentes en el Congreso una oposición más firme frente a los planes de Trump.

Desde entonces, figuras destacadas demócratas o aliadas de ese partido han ido alzando la voz y captando la atención de los medios. El veterano senador independiente por Vermont, Bernie Sanders, organizó mítines en varios lugares del país para reactivar a las bases en los que estuvo acompañado por la joven representante por Nueva York, Alexandria Ocasio-Cortez.

Booker, que ya impulsó sin éxito, una candidatura presidencial en 2019, parece el último que quiere recordarles a los votantes que él si está dispuesto a dar la batalla. Aunque tenga que estar un día entero hablando para hacerse oír.

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