Italia llegó a Alemania como campeón defensor de la Eurocopa, con el objetivo de alzar por tercera vez este título y convertirse en el máximo ganador de la historia. Los de Luciano Spalletti son parte del grupo más complejo del torneo que tiene a España, Croacia y Albania como los otros integrantes. En los papeles, su debut en la Zona B era el más sencillo pero la realidad le dio un cachetazo de entrada.
En el Signal Iduna Park, la casa del Borussia Dortmund, Albania sorprendió antes del minuto al actual propietario de la corona. El saque del medio de los comandados por el brasileño Sylvinho –ex Barcelona y Manchester City– derivó en un pelotazo largo cruzado que no encontró compañeros y significó en un lateral en zona defensiva para los italianos.
Federico Dimarco se hizo cargo de reactivar el juego, pero tomó la decisión de lanzar con las manos el balón a su propia área buscando a Alessandro Bastoni. El marcador del Inter se sorprendió con el pase de su compañero, no logró reaccionar a tiempo y quien sí aprovechó la desatención fue Nedim Bajrami, quien controló y metió un derechazo alto al palo de Gianluigi Donnarumma, quien no llegó a reaccionar. Iban apenas 23 segundos de juego.
Según afirmó la empresa de estadísticas Opta, el centrocampista que milita en el Sassuolo italiano firmó de este modo el gol más rápido en la historia de la Eurocopa. Su registró superó por amplio margen al obtenido por el ruso Dmitri Kirichenko contra Grecia en el 2004 (1 minuto y 7 segundos), el del sueco Emil Forsber contra Polonia en 2021 (1 minuto y 22 segundos) y al del danés Yussuf Poulsen ante Bélgica en 2021 (1 minuto y 39 segundos).
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Publicado el: 2024-06-15 15:23:02
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