Más de 145.000 venezolanos mayores de 65 años enfrentan el desafío de la demencia. Aunque el deterioro cognitivo es un proceso natural del envejecimiento, es importante reconocer los signos y buscar apoyo a tiempo. Si le preocupa experimentar olvidos frecuentes o dificultades para concentrarse, existen diversas estrategias y recursos que pueden ayudar a mantener su mente activa y saludable.
La buena noticia es que las investigaciones han demostrado que las personas pueden hacer cambios a lo largo de la edad adulta que pueden ayudar a prevenir o retrasar el deterioro cognitivo e incluso reducir el riesgo de demencia. Estos cambios incluyen dejar de fumar y controlar adecuadamente la presión arterial.
Además de estos cambios en el estilo de vida, muchas personas están recurriendo a juegos de entrenamiento cerebral, que afirman optimizar la eficiencia y la capacidad del cerebro a cualquier edad. Los creadores de aplicaciones y juegos de entrenamiento cerebral aseguran que sus productos pueden hacer de todo, desde evitar el deterioro cognitivo hasta mejorar el coeficiente intelectual. Sin embargo, hasta ahora, estas afirmaciones han encontrado pruebas contradictorias.
Seguir aprendiendo
Los neurocientíficos cognitivos estudian cómo funciona nuestro cerebro y cómo cambia a lo largo de la vida. Su objetivo es encontrar formas de mantener nuestro cerebro saludable y optimizar su funcionamiento, desde la juventud hasta la vejez. Aprender cosas nuevas es un ejercicio maravilloso para nuestro cerebro.
Los estudios científicos nos revelan cómo este proceso influye en nuestra salud cerebral y cómo los juegos de entrenamiento mental pueden potenciar nuestros resultados. Al transformar tareas cognitivas en experiencias lúdicas, estos juegos nos ofrecen una forma divertida y efectiva de mantener nuestra mente ágil y joven.
Los juegos de entrenamiento cerebral están diseñados para desafiar nuestra mente de manera personalizada. Por ejemplo, un juego podría pedir que se identifiquen rápidamente números pares e impares o letras consonantes y vocales, aumentando gradualmente la dificultad y el tiempo de respuesta. Estos desafíos ayudan a mejorar nuestra atención, velocidad de procesamiento y flexibilidad mental, habilidades esenciales para el día a día.
Sin embargo, las habilidades específicas que se aprenden en estos juegos a menudo no se traducen en aplicaciones más generales. Si los juegos cerebrales cumplen su objetivo final de mejora cognitiva duradera en varias áreas es aún un tema de debate entre los psicólogos.
Hacer tales afirmaciones requiere evidencia rigurosa de que jugar mejora el rendimiento cognitivo o cerebral. En 2016, la Comisión Federal de Comercio impuso una multa de 50 millones de dólares a uno de los juegos de entrenamiento mental más populares del momento, Lumosity, por hacer creer que podían alcanzar niveles más altos de rendimiento mental en el trabajo o en la escuela y prevenir o retrasar el deterioro cognitivo utilizando su producto.
Desafíos
En un estudio denominado Synapse Project, a un grupo de personas se les asignó una actividad con la que tenían poca experiencia, como fotografía digital o tejido. Aunque estas actividades no eran juegos, se suponía que debían ser atractivas y desafiantes y realizarse en un entorno social.
A otro grupo se le asignaron actividades que implicaban poco aprendizaje, como participar en actividades temáticas relacionadas con los viajes o la cocina, o actividades más solitarias, como resolver crucigramas, escuchar música o ver películas clásicas. Todos los participantes fueron evaluados al principio y al final del estudio sobre diversas capacidades cognitivas.
Aquellos asignados a las nuevas actividades desafiantes mostraron mejoras significativas en su memoria, velocidad de procesamiento y habilidades de razonamiento en comparación con los asignados a las actividades menos desafiantes. Ninguno de los participantes recibió entrenamiento en estas pruebas cognitivas, lo que significa que las actividades desafiantes mejoraron las habilidades, como recordar una lista de palabras o resolver problemas abstractos.
Los escáneres cerebrales de los participantes mostraron que, a lo largo del estudio, quienes se dedicaron a las actividades más desafiantes aumentaron su eficiencia neuronal.
El estudio también mostró que cuanto más tiempo dedicaron los participantes a sus proyectos, más grande se hizo su cerebro y mejoró su memoria. Una diferencia entre los tipos de actividades realizadas en el Proyecto Synapse y el entrenamiento cerebral tradicional es si las actividades se realizan en grupo o en solitario.
Aunque otros estudios han encontrado un beneficio en la interacción social, el Proyecto Synapse no encontró diferencias entre las actividades sociales y solitarias en el grupo de menor desafío. Por lo tanto, el desafío, más que los componentes sociales, parece ser el impulsor del mantenimiento de la salud cognitiva y cerebral.
Evitar “modo hábito”
Puede que esté pensando que es hora de hacer fotografía digital o tejer, pero al final no se trata de esas tareas específicas. Lo que más importa es desafiarse a uno mismo, lo que suele surgir de forma natural cuando se hace algo nuevo.
El nuevo aprendizaje, que suele ir acompañado de una sensación de esfuerzo (y a veces de frustración), requiere acceder a los recursos del lóbulo frontal, que gestiona el pensamiento y el juicio, y del lóbulo parietal, que procesa la atención y combina diferentes estímulos sensoriales. Estas regiones se comunican constantemente entre sí para mantener la mente adaptable a todo tipo de situaciones y evitar que el cerebro entre en el “modo hábito”.
¿Dónde nos deja esto? Por un lado, los juegos que se promocionan como “entrenadores del cerebro” pueden no ser la mejor solución en comparación con otras vías para mejorar la cognición. Irónicamente, es posible que ya esté entrenando su cerebro con juegos que requieren esfuerzo.
Por ejemplo, juegos como Tetris o los juegos de estrategia en tiempo real como Rise of Nations han demostrado mejoras en la cognición de los jugadores. Las investigaciones han demostrado incluso que jugar a Super Mario 64 puede aumentar el volumen cerebral en regiones como el hipocampo, el centro de la memoria del cerebro.
En conclusión, si bien los juegos de entrenamiento cerebral pueden ser divertidos, no son la única forma de mantener un cerebro saludable. La clave está en desafiar constantemente nuestra mente con nuevas actividades y experiencias. Al incorporar variedad y dificultad a nuestras vidas, podemos mejorar nuestra cognición y disfrutar de una mente más ágil y creativa durante más tiempo.
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Las opiniones expresadas en esta sección son de entera responsabilidad de sus autores.
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Fuente de TenemosNoticias.com: efectococuyo.com
Publicado el: 2024-12-04 05:30:00
En la sección: Efecto Cocuyo