El mandatario viajó hasta la lejana Kazán con la meta de alcanzar la incorporación de Venezuela a los Brics. No lo logró, pero al menos amplió sus redes comerciales y regresará con nuevas promesas de Rusia.
Caracas. El foro político y económico de países emergentes, conocido como Brics, dio un portazo a Venezuela, que aspiraba a ingresar esta misma semana al bloque, aunque el mandatario Nicolás Maduro aspira volver de Rusia con las manos llenas.
De acuerdo con la prensa brasileña, el gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva, haciendo uso de su poder como fundador de los Brics, vetó el ingreso de la Venezuela de Maduro, a quien solía considerar un aliado en la escena latinoamericana.
El freno de Lula se produce en medio de las diferencias que surgieron entre ambos gobernantes después de las polémicas elecciones presidenciales del 28 de julio pasado, que la oposición tacha de “fraudulentas” y en las que Maduro se hizo con un nuevo mandato de seis años.
La tarde de este miércoles, 23 de octubre, en las redes se difundía la “foto oficial” de la cumbre, en la que se coló el líder iraní Masoud Pezeshkian después de que su país se convirtiera esta jornada en miembro pleno del grupo.
Maduro llegó el martes a Kazán, Rusia, donde se celebra la cumbre anual del bloque que durará hasta el jueves. El mandatario acudió con la invitación que le hizo su par ruso Vladimir Putin bajo el brazo. Este miércoles, pese a que se cumplieron sus peores escenarios, aprovechó la oportunidad para buscar inversiones para Venezuela.
“Estamos preparados para seguir recibiendo inversión rusa en Venezuela, para seguir fortaleciendo el comercio, la alianza entre sectores empresariales en todos los campos y para fortalecer en todos los campos de la política nuestra alianza con la gran Rusia”, dijo el líder socialista tras reunirse con Putin.
El financiamiento en los Brics
La negativa de los Brics a Venezuela estaba cantada desde que Brasil dejara clara su postura hace semanas y el propio gobierno ruso adelantara que el ingreso del país caribeño no estaba pautado para esta reunión.
Aún así, Maduro llegó a Kazán no solo recordando el deseo venezolano de formar parte del foro anti Estados Unidos más poderoso del planeta, sino también buscando inversiones, de acuerdo con el economista Leonardo Vera.
“La delegación de Venezuela en Rusia ha declarado que, entre otras intenciones, está la de tratar de captar inversiones internacionales de los Brics para desarrollar proyectos en Venezuela”, dijo Vera a Crónica Uno.
En este sentido, Maduro busca en Rusia “fortalecer sus redes de comercio” con los nueve países de los Brics y las decenas que buscan formar parte del grupo.
Además, Venezuela busca sumar a la propuesta de los Brics de crear su propia moneda para el comercio de los países del grupo con el mundo, algo que abona a la larga pretensión de Maduro de reducir la dependencia de su país del dólar estadounidense.
Por otro lado, las autoridades venezolanas persiguen desde hace meses la financiación del banco de desarrollo de los Brics, que se fundó en 2015 y que, por ahora, solo entrega financiamientos a los socios del bloque.
“De hecho, Venezuela hizo una gira hace varios meses a China porque el banco de desarrollo está en China y hubo algunos contactos con Dilma Rousseff, que es la presidenta del banco, intentando moverse por esa vía para tratar de promover la entrada de Venezuela al grupo”, recordó el experto.
Maduro, sin fuerza
El desplante del bloque también demuestra la poca fuerza de Maduro y la propia Venezuela en el concierto internacional, donde el mandatario enfrenta el duro cuestionamiento de los países democráticos.

Es por ello que el ingreso a los Brics, donde la fortaleza democrática no es una condición necesaria, forma parte de la estrategia internacional del chavismo.
“La visita de Maduro a Rusia se inscribe en la estrategia de resistencia de su Gobierno al aislamiento del mundo occidental, (es) una salida al extranjero que tiene características simbólicas importantes”, dijo a Crónica Uno el analista Ricardo Ríos.
Asimismo, el presidente de Poder & Estrategia apuntó que Maduro también persigue en Rusia lavarse la cara y presentarse ante el mundo como un mandatario aceptado.
Algunos pasos dio al reunirse con líderes como Putin o el bielorruso Alexander Lukashenko, aunque estos no sean los referentes que elegirían los ciudadanos del mundo democrático.
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Fuente de TenemosNoticias.com: cronica.uno
Publicado el: 2024-10-23 16:42:00
En la sección: Política