Así está cambiando el mundo la tecnología háptica de bHaptics

Entre los productos más comentados de la última edición del CES 2025, los trajes hápticos de bHaptics llamaron poderosamente la atención por su capacidad de traducir contenido digital en sensaciones físicas envolventes. Esta notoriedad en la feria tecnológica más influyente del mundo fue el punto de partida para buscar una conversación directa con sus responsables.

En esta entrevista exclusiva, el Dr. Kiuk Gwak, director ejecutivo de la compañía, detalla los desafíos técnicos, las aplicaciones emergentes y la visión a futuro detrás del TactSuit Pro y TactSuit Air, dos dispositivos que no solo expanden los límites de la realidad virtual, sino que plantean una nueva relación entre cuerpo y tecnología.

Un algoritmo para engañar al cerebro: el principio detrás del TactSuit

Lo que diferencia a los dispositivos de bHaptics de otras tecnologías hápticas del mercado no es solo la cantidad de motores de vibración (32 en total), sino cómo se utilizan. “Desarrollamos una tecnología que permite al cerebro ser engañado en el proceso de reconocer el tacto”, explica el Dr. Gwak. Esta ilusión háptica se logra mediante un algoritmo patentado que simula una sensación continua entre motores, abarcando áreas más amplias del cuerpo con un número limitado de actuadores, sin incrementar el peso o el costo.

Pero no todo es software: también hubo importantes desafíos físicos. “Puede parecer insignificante, pero una de las cosas más importantes fue lograr que el usuario pudiera llevar cómodamente el dispositivo”, revela el CEO. La calidad del feedback cambia significativamente según cómo y dónde se monta cada motor en el tejido del traje.

Además, la sincronización precisa entre estímulos visuales, auditivos y táctiles fue crucial. La solución: utilizar el protocolo Bluetooth estándar minimizando la latencia mediante software propietario, SDKs personalizados y firmware optimizado.

Más allá del videojuego: entrenamiento militar, educación y salud

Aunque el ecosistema gaming —especialmente el de la realidad virtual— ha sido el primer en adoptar esta tecnología, el alcance del TactSuit va mucho más allá. “Nuestros dispositivos no fueron desarrollados exclusivamente para VR o gaming, pero ahí es donde se utilizan más actualmente”, aclara Gwak. La compañía ha expandido la compatibilidad a plataformas como PC, consolas y simuladores de carreras, incluyendo soporte para títulos populares como Fortnite a través de Overwolf y SimHub.

Sin embargo, el impacto más transformador podría llegar en otros sectores. “TactSuit se utiliza ampliamente en entrenamientos militares y policiales con visores VR, así como en la formación de trabajadores industriales y en el área de salud”, añade. Aunque estas aplicaciones aún se encuentran en fase experimental o de escala reducida, bHaptics anticipa un crecimiento exponencial conforme se adopten tecnologías AR/MR.

Una alianza con Meta que refuerza la integración

En junio de 2025, bHaptics recibió una nueva distinción que refuerza su papel en el ecosistema de la realidad extendida: sus modelos TactSuit Pro y TactSuit Air fueron oficialmente reconocidos con la etiqueta “Made for Meta”. Se trata de un programa de Meta que certifica dispositivos de terceros que cumplen con estándares de rendimiento y compatibilidad dentro de sus plataformas, como Meta Quest.

No es la primera vez que bHaptics obtiene esta aprobación: ya había sido la primera compañía de trajes hápticos en lograrlo. La nueva certificación llega justo cuando la empresa celebra su décimo aniversario, y marca otro paso hacia la consolidación de estos dispositivos como parte integral de la experiencia inmersiva.

Actualmente, ambos modelos son compatibles con más de 130 juegos en Quest, y hasta 200 a través de SteamVR mediante Air Link. Además, incorporan funciones como el modo Audio-to-Haptic, que convierte cualquier sonido en vibración sincronizada.

El reto de la compatibilidad: un mercado sin estándares

Uno de los principales obstáculos para la masificación del TactSuit es la falta de estándares para la señal háptica en dispositivos vestibles. “Actualmente no hay un estándar establecido, lo que significa que debemos convencer a los desarrolladores de integrar nuestro SDK”, explica Gwak. Esto representa un cuello de botella en la adopción, aunque la compañía confía en que la creciente base de usuarios y la integración nativa con más títulos acelerarán la compatibilidad.

Por ahora, el dispositivo se conecta por Bluetooth y también puede usar Wi-Fi a través de móviles, lo que permite enlazarlo con plataformas más cerradas como PS VR2.

Haptics + IA: hacia un contenido que se siente solo

La inteligencia artificial juega un papel creciente en el desarrollo del feedback háptico de próxima generación. “Desde 2015 venimos investigando cómo generar automáticamente sensaciones táctiles. Con la IA generativa, estamos experimentando con nuevas aproximaciones”, señala el CEO. La meta: que un sistema analice videos y genere en tiempo real el feedback adecuado para cada escena. “Si logramos esto, el abanico de contenidos compatibles crecerá exponencialmente”.

¿Y la privacidad? Un enfoque proactivo

Aunque algunos puedan preocuparse por la recolección de datos, bHaptics aclara que sus trajes no incorporan sensores. “Nuestros dispositivos solo generan retroalimentación háptica. No detectan datos. Y si en algún momento vemos que algún tipo de sensor puede mejorar la experiencia, garantizaremos la protección de datos adecuada”, asegura Gwak.

Qué hace único al TactSuit: precisión, fiabilidad y comunidad

Además del algoritmo de ilusión háptica, bHaptics se diferencia por su catálogo de juegos nativamente compatibles —uno de los más amplios del mercado— y por la robustez de sus dispositivos. “Cuando comenzamos en 2015 no había productos similares. Todo lo aprendimos a través de ensayo y error. Nuestros dispositivos han sido testeados durante años en arcades de VR antes de salir al mercado”, comenta.

La compañía también destaca el papel de su equipo de soporte, al que describe como empático y resolutivo. “Nuestra atención al cliente es parte esencial de la experiencia bHaptics”, afirma el CEO.

El futuro del feedback táctil: conciertos, películas y experiencias sociales

Preguntado por el futuro de la tecnología háptica, Gwak no duda: “El mundo es nuestra ostra”. Actualmente, muy pocos usuarios poseen trajes hápticos, pero eso cambiará. La clave estará en el entretenimiento, con aplicaciones en música, cine y eventos en vivo. “Vemos un futuro donde todas las formas de entretenimiento se verán mejoradas por la tecnología háptica”, dice.

El CEO prevé que con el avance de los entornos de realidad aumentada y mixta, la necesidad de guantes como el TactGlove aumentará. Sobre TactSuit, su rol será clave si el contenido social y los avatares virtuales ganan popularidad o si se expande el consumo multimedia en pantallas planas dentro de entornos AR.

Trajes modulares y versiones ligeras: la adaptabilidad como hoja de ruta

El desarrollo de versiones más ligeras o modulares está en marcha. “Cada industria tiene necesidades distintas. Cuando hablamos con nuestros socios, incorporamos esas necesidades en nuestro ciclo de desarrollo”, indica Gwak. La compañía trabaja en paralelo en versiones más complejas y potentes, con el objetivo de llegar a nuevos sectores y usuarios.

De los errores se aprende: lecciones tecnológicas en el camino

El aprendizaje más importante, según Gwak, fue comprender que “lograr sensaciones táctiles realistas con la tecnología actual es imposible”. Por eso, la clave es la congruencia entre estímulo táctil, visual y sonoro.

Una de las innovaciones que no llegó al mercado fue un sistema de háptica térmica que podía generar frío o calor. Aunque el prototipo funcionaba perfectamente, su alto coste y la falta de contenido que lo justificara llevaron a posponer su comercialización. “Si en el futuro aparece una aplicación que realmente lo necesite, podríamos retomarlo”, concluye.