El hermano mayor de Ozempic podría frenar el Alzheimer

Un hermano mayor del popular medicamento para la diabetes y la pérdida de peso semaglutida podría ayudar a frenar la progresión de la enfermedad de Alzheimer. En datos de ensayos clínicos publicados esta semana, científicos del Reino Unido han encontrado evidencia de que el liraglutida puede reducir la atrofia cerebral y el deterioro cognitivo en pacientes con Alzheimer. La semaglutida ya se está probando en ensayos de Fase III más grandes para esta condición neurodegenerativa.

El liraglutida y medicamentos similares imitan la hormona GLP-1, que ayuda a regular el azúcar en la sangre y el apetito. Fue aprobado en 2010 para tratar la diabetes tipo 2; en 2014, fue aprobado para tratar la obesidad. Se sabe que las personas con diabetes mal controlada tienen un mayor riesgo de desarrollar Alzheimer y otras formas de demencia, mientras que algunos estudios en animales han sugerido que el liraglutida puede prevenir los cambios cerebrales dañinos que ocurren en el Alzheimer. Por ello, científicos del Imperial College London decidieron llevar a cabo un ensayo doble ciego, aleatorizado y controlado con placebo del liraglutida para el Alzheimer.

Detalles sobre el ensayo practicado

El ensayo involucró a 204 pacientes diagnosticados con Alzheimer temprano, la mitad de los cuales recibieron liraglutida. El medicamento no pareció cambiar significativamente el metabolismo de la glucosa en el cerebro, que era la medida principal del estudio. Pero los investigadores encontraron que las personas que tomaban liraglutida experimentaron una disminución en la pérdida de volumen cerebral casi un 50% más lenta que las personas que tomaban placebo durante el siguiente año. Aquellos que tomaron el medicamento también experimentaron una disminución del 18% más lenta en la función cognitiva medida durante ese tiempo. Los hallazgos del equipo fueron presentados esta semana en la Conferencia Internacional de la Asociación de Alzheimer.

Esta investigación es preliminar; aún no ha pasado por el proceso de revisión por pares. Y suponiendo que los resultados sean válidos, todavía no está claro exactamente cómo el liraglutida podría estar mejorando los cerebros de las personas. Pero los investigadores tienen varias posibles explicaciones.

“Creemos que el liraglutida está protegiendo el cerebro posiblemente al reducir la inflamación, disminuir la resistencia a la insulina y los efectos tóxicos de los biomarcadores del Alzheimer o mejorar la comunicación entre las células nerviosas del cerebro”, dijo el investigador del estudio Paul Edison, profesor de neurociencia en el Departamento de Ciencias del Cerebro de Imperial, en un comunicado de la universidad.

Quizás la parte más emocionante de esta investigación es que han surgido medicamentos GLP-1 más potentes desde que comenzó este estudio, como la semaglutida. La semaglutida (vendida bajo los nombres de Ozempic y Wegovy) y el aún más nuevo tirzepatida (Mounjaro y Zepbound) han demostrado ser sustancialmente más efectivos para tratar la diabetes y la obesidad que los medicamentos GLP-1 más antiguos como el liraglutida. Y un estudio publicado el mes pasado ya encontró evidencia de que la semaglutida puede mejorar la salud cerebral en personas con diabetes tipo 2.

Los fabricantes tanto del liraglutida como de la semaglutida, Novo Nordisk, están llevando a cabo dos ensayos controlados con placebo a gran escala para ver si la semaglutida puede mejorar la trayectoria de las personas diagnosticadas con Alzheimer temprano. Si estos resultados, que se esperan para los próximos años, son positivos, deberían llevar a la semaglutida y otros medicamentos GLP-1 a convertirse en la última herramienta en un creciente arsenal de medicamentos anti-Alzheimer.