Folie à Deux» no despega. ¿Qué salió mal?

Para este momento es probable que hayas oído que a Joker: Folie à Deux no le está yendo bien. Aunque sigue primera en la lista del fin de semana, hasta ahora solo ha recaudado U$ 37,8 millones (menos de lo que inicialmente informaba el estudio, U$ 40 millones), para su absurdo presupuesto de U$ 200 millones. No siempre los musicales significan un espectáculo grandioso en la pantalla. 

CinemaScore de Las Vegas  calificó a la secuela con D – es la primera película basada en un libro de cómics que obtiene esa calificación. Hubo otras que también tuvieron ese puntaje: American Psycho, Ravenous, Splice, The Lie Aquatic With Steve Zissou y The Counsellor, todas películas que en un comienzo tuvieron malas reseñas pero que luego lograron algo más, como reevaluaciones de la crítica o novelizaciones boutique. 

¿Qué fue lo que salió mal? Bueno, como drama musical/de juicio centrado en un romance destinado a mal fin inspirado en un personaje de Batman: The Animated Series, la película Joker: Folie á Deux no es para nadie en particular. Sin embargo, se trata de una decisión creativa que refleja a un personaje principal que no es lo que nadie quiere que sea. La abogada de Arthur quiere que sea un tipo con trastorno disociativo (no lo es), su psicólogo el Dr. Liu quiere que lo declaren competente (no lo es), la personalidad de TV Paddy Meyers quiere que sea un despiadado asesino (no lo es), Lee quiere que sea un revolucionario (no lo es), su ex compañero Gary Puddles quiere que sea el hombre amable que recuerda (no lo es), Harvey Dent quiere que sea plenamente responsable de sus delitos (no lo es), su vecina Sophie Drummond quiere que sea un loco que ve visiones (no lo es), y Arthur quiere que sea un romántico (no lo es). 

Tampoco la audiencia

Parece que también la audiencia queda desilusionada porque el enfermo mental al que estuvieron siguiendo en dos películas no llega a ascender al nivel de héroe o genio criminal que se les prometió. Porque no se convirtió en el archienemigo de Batman sino que se revela como una persona enferma y poco importante a quien su familia y comunidad le fallaron durante casi cuatro horas de tiempo en la pantalla. ¿Y ahora canta sobre lo que siente? 

Quizá, la “locura de a dos” del título de la película no es la locura del Joker y Harley Quinn, sino la audiencia y las circunstancias culturales que llevan a esperar una secuela de un drama de prestigio ganador del Oscar basado en un personaje de libro de cómics para niños de la década de 1940. 

Sea como sea, esperemos que al menos una de las personas que fueron a ver la película haya salido creyendo que está bien cantar sobre lo que se siente. Es mejor eso que asesinar a seis personas.

Este artículo ha sido traducido de Gizmodo US por Lucas H. Aquí podrás encontrar la versión original.