Si la pregunta es «cuánta cafeína tiene cada taza de café o de té», este gráfico ofrece respuestas reveladoras

Cada día, el mundo consume unos 2.250 millones de tazas de café. Bebemos por sus efectos sobre la salud, pero también por su sabor y por la cafeína. Esta sustancia rodeada de mitos es el psicoactivo más consumido y está presente en un montón de productos al margen del café como el té, los refrescos o las bebidas energéticas. Ahora bien, no todas las bebidas con cafeína tienen la misma cantidad, y en este gráfico podemos ver cuánta cafeína tiene tu café o infusión favorita, con un ganador incontestable: el espresso.

Pero hay muchos matices.

Las cifras. Hay muchas formas de preparar el café. En la clásica italiana, con filtro, percolación, infusión y hasta con suplementos impensables hasta hace no tanto como la proteína o los hongos. Y la cantidad de cafeína de cada elaboración depende tanto de la cafeína de los granos de cada variedad de café, su proceso de tostado y de la forma de cocinarlo.

Como expone el gráfico elaborado por Visual Capitalist con datos de estudios de Health Canada y Consumer Reports, el café con una mayor concentración de cafeína es el espresso. Por mucho, además: en 30 mililitros de bebida, tiene casi cuatro veces más cafeína que la siguiente elaboración, y doce veces más que un té negro. El resto de elaboraciones de café se encuentran bastante parejas, pero seguimos viendo una mayor concentración de cafeína que en el té matcha tan popular últimamente, en el mate o en resto de infusiones de té.

Si ya lo sabían los italianos… Que el espresso tenga la mayor concentración no es una sorpresa y, de hecho, es parte esencial de esta elaboración. En ella, por el propio método de extracción, se intensifica tanto el sabor como la intensidad, aumentando esa concentración de cafeína. Y es algo con una función práctica.

En la tradición italiana, el espresso nació para ser rápido. Había que extraer el café en el menor tiempo posible, tomarlo de pie en la barra del bar y continuar con la jornada. Tradicionalmente, se toma sin leche, como si fuera un chupito de café que se sorbe rápidamente, implicando un descanso en la jornada de los trabajadores, pero también ese ‘chute’ de energía gracias a la cafeína. Es una bebida más práctica que otra cosa, o lo era.

El ‘engaño’. Pero claro, hay que tener en cuenta que hay un factor muy importante en estos datos: el tamaño de la taza. 30 mililitros es escaso, y es la cantidad de un espresso. El tamaño de café que se suele tomar es mucho mayor, por lo que se termina compensando la menor concentración de cafeína en otras elaboraciones.

Un ejemplo es el cold brew, que es una infusión perfecta para el verano que tomamos en un vaso largo de más de 300 mililitros. Sumando la cantidad y los largos tiempos de extracción, la cafeína se va a los 200-280 mg por taza. El café filtrado también se toma en volúmenes altos, aportando entre 95 y 150 mg por taza, y algo similar ocurre con la prensa francesa y su aporte de entre 80 y 100 mg de cafeína.

Si hablamos por litro, la Universidad de Newcastle halló que el espresso es la reina absoluta, pero en la cantidad de bebida que podemos tomar, lo más fácil es que haya muchas elaboraciones que superen a ese aporte del espresso.

Cuánta cafeína es mucha cafeína. Y aunque cada vez hay más estudios que apuntan a que la cafeína no es un problema ni es causa de ataques cardíacos, una pregunta que sigue estando sobre la mesa es cuánto café es demasiado café. Un estudio de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria reveló que las dosis únicas de 200 mg no suponen problema alguno y que un máximo de 400 mg para un adulto está bien.

En mujeres embarazadas y lactantes, la cosa cambia y las cifras se reducen, pero la medida general es de unos 5,7 mg/kg de peso de la persona para hablar de cantidades seguras. Pero, como decíamos, es algo que depende mucho porque no sólo entra en juego la elaboración, sino el origen, variedad y tostado del café, ya que es algo que hace variar la cantidad de cafeína en la elaboración final.

Y que sea buena o no tan saludable depende mucho de la situación, como si falta sueño o si vamos a realizar algún deporte.

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