En su más reciente análisis de la economía del país, el Observatorio Fiscal de la Universidad Javeriana se pronunció respecto a uno de los temas que más polémica ha generado en el país desde que el Gobierno anunció el Marco Fiscal de Mediano Plazo 2025 – 20236: el manejo de la deuda y su estrategia de gasto.
Según estos analistas, la decisión del Gobierno Nacional de suspender la regla fiscal por tres años, a través de la activación de la cláusula de escape, podría tener consecuencias mucho más profundas de lo que aparenta en el corto plazo. Así mismo, dejan claro que esta medida, aunque legal, no cuenta con un sustento técnico suficiente y pone en riesgo la estabilidad macroeconómica del país.
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En este informe también se advierte que Colombia no está atravesando una calamidad pública o un evento extraordinario, como una pandemia o una guerra, que justifique el uso de la cláusula de escape y que por el contrario, se trata de un deterioro estructural acumulado en el tiempo, en el que el Estado ha gastado más de lo que recauda y ha incumplido sus propias proyecciones tributarias.
«La regla fiscal, en su versión actual, permite un margen de flexibilidad en contextos de crisis, pero no fue diseñada para enfrentar problemas estructurales de planeación y ejecución fiscal como los que enfrenta hoy Colombia», indicaron al respecto.
El diagnóstico del Observatorio es contundente y dice que la situación fiscal del país es frágil, no por una coyuntura aislada, sino por una combinación persistente de un déficit alto, deuda creciente e ingresos estancados, por lo que suspender la regla fiscal en ese contexto no resuelve el problema, solo lo aplaza, y podría debilitar la credibilidad fiscal de Colombia ante los inversionistas, los mercados y las calificadoras.
Riesgos fiscales – Economía.
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Descuadre estructural
Uno de los hallazgos más preocupantes que destaca el informe es el recorte en las proyecciones de ingresos, ya que el Marco Fiscal de Mediano Plazo (MFMP) de junio de 2025 ajustó a la baja los ingresos esperados para 2026 y de $321,6 billones (estimados en diciembre de 2024) pasó a $281,4 billones; al tiempo que resalta que esta diferencia de $40 billones no se explica por una catástrofe externa, sino por fallas en la planeación y sobreestimación del recaudo tributario.
«La disminución en la meta de ingresos revela una tendencia que ya se ha observado en varios gobiernos: se proyecta un recaudo que luego no se materializa», señala el informe, que recuerda casos similares en las administraciones anteriores.
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Esto, según los expertos de la Javeriana, genera un problema recurrente y es que los gastos se comprometen sobre proyecciones optimistas y, al no llegar los ingresos esperados, el endeudamiento se convierte en la salida por defecto; generando una bola de nieve que no soluciona el problema, sino que lo hace más grande.
“Este patrón se repite en el nuevo Marco Fiscal de Mediano Plazo, ya que si no se aprueba la reforma tributaria que el Gobierno propone, el déficit en 2026 podría ser aún mayor. Incluso con la reforma, que busca recaudar $19 billones, el déficit pasaría del 5,1% al 7,1% del PIB en un solo año”, manifestaron.
Economía y subsidios en Colombia.
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Dependencia del crédito
Por otra parte, el Observatorio indicó que a todo lo anterior se debe sumar que el Gobierno plantea solicitar un nuevo cupo de endeudamiento por $38 billones ante el Congreso de la República y cuenta que esta estrategia, aunque legal, preocupa por su sostenibilidad, ya que aunque la deuda neta se proyecta con una leve reducción del 61% al 60% del PIB en los próximos cinco años, esta mejora es marginal y no responde a una estrategia estructural de consolidación fiscal.
“La estrategia es postergar el ajuste fiscal para después de 2026, en un nuevo gobierno, mientras se espera que el crecimiento económico y el precio del petróleo ayuden”, se advierte en el documento.
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Esa apuesta es considerada riesgosa, especialmente porque no se acompaña de una reforma estructural del gasto, ni de una mejora sustancial en la calidad del recaudo tributario y “sin cambios de fondo, el margen de maniobra fiscal se seguirá estrechando”, según añade el informe.
Uno de los principales riesgos de suspender la regla fiscal es el daño a la reputación del país ante los mercados internacionales y acá el Observatorio recuerda que la calificadora Fitch Ratings ya emitió una advertencia oficial señalando que el deterioro fiscal de Colombia y la suspensión de la regla aumentan la percepción de riesgo, lo que podría encarecer el costo de financiamiento y dificultar la colocación de deuda pública.
Dicho esto, respaldan esa preocupación, argumentando que a juicio de sus analistas, el uso discrecional de la cláusula de escape, sin una justificación extraordinaria, desvirtúa la función misma de la regla fiscal y compromete su efectividad futura y olvida que “no se puede normalizar que cada vez que el gasto supera las proyecciones se suspenda la regla”.
Crisis fiscal y riesgos económicos.
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Reforma al gasto
Respecto a los caminos que se pueden tomar, el análisis dice que la salida no está en aplazar el problema, sino en enfrentarlo y para ello, propone una reforma tributaria estructural que revise tarifas, bases gravables y exenciones, con criterios técnicos y de progresividad, ya que no se trata de una reforma recaudatoria de corto plazo, sino de una transformación profunda del sistema tributario.
“Adicionalmente, se insiste en la necesidad de una reforma del gasto, que incluya una revisión funcional del Estado, elimine duplicidades, mejore la eficiencia en la inversión pública y asegure la coherencia entre el nuevo Sistema General de Participaciones y la futura Ley de Competencias”, acotaron.
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Solo con estas reformas estructurales, sostiene el informe, Colombia podrá recuperar el control de sus finanzas públicas, fortalecer su credibilidad y garantizar un crecimiento económico sostenido; teniendo presente que la factura llegará tarde o temprano y es necesario actuar antes de que el problema sea más grande.
Así las cosas, el Observatorio Fiscal concluye que la estrategia actual de suspender la regla fiscal, aumentar el endeudamiento y confiar en variables externas no es sostenible ni responsable,ya que aplazar las reformas solo traslada la carga a futuras administraciones y deja a la economía colombiana en una situación vulnerable frente a posibles shocks.
Fuente de TenemosNoticias.com: www.portafolio.co
Publicado el: 2025-06-26 19:11:00
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