Athena y Lunar Trailblazer ya están rumbo a la Luna

Tras un lanzamiento conjunto al espacio, llevado a cabo el 26 de febrero de 2025 (o el 27, dependiendo de la zona horaria), las naves Athena y Lunar Trailblazer han iniciado ya la siguiente fase de su misión, la cual culminará con su llegada a la Luna.

El lanzamiento se realizó con un cohete Falcon 9 de SpaceX, desde el complejo de lanzamiento 39A (LC-39A) en el Centro Espacial Kennedy de Florida, Estados Unidos.

Athena es una nave diseñada para posarse sobre la Luna. Pertenece a la serie Nova-C de la empresa estadounidense Intuitive Machines.

Poco después del lanzamiento, Athena entabló comunicaciones por radio con el centro de control de vuelo de la misión que la Compañía tiene en la ciudad estadounidense de Houston. La nave se encuentra en perfectas condiciones. El 2 de marzo, se llevó a cabo con éxito una de las últimas maniobras de ajuste de trayectoria, cuya culminación es la entrada de la nave en órbita lunar el 3 de marzo. Si todo va bien, en unos pocos días Athena se posará en la Luna.

El punto previsto para el aterrizaje de Athena está en Mons Mouton, una meseta cercana al Polo Sur de la Luna. Este punto de aterrizaje se encuentra en la parte central de una de las posibles zonas de aterrizaje de la nave Artemis 3. Los cuatro astronautas de la misión Artemis 3 viajarán a la órbita lunar. Dos de ellos descenderán a la superficie y pasarán aproximadamente una semana realizando investigaciones científicas antes de regresar a la órbita lunar para reunirse con el resto de la tripulación y emprender todos juntos el viaje de regreso a la Tierra.

Athena ha fotografiado una parte de sí misma con la Tierra al fondo. (Foto: Intuitive Machines)

Athena transporta aparatos para experimentos, incluido un taladro destinado a explorar bajo la superficie lunar en busca de indicios de agua congelada. También lleva vehículos, como por ejemplo uno denominado Micro Nova Hopper. Una vez liberado en la superficie lunar, este vehículo saltará a un cráter cercano y enviará datos científicos a la Athena.

Por su parte, la nave Lunar Trailblazer, de la NASA, tiene como misión cartografiar, desde una órbita lunar, el agua de la superficie de nuestro satélite natural con un nivel de detalle sin precedentes, a fin de poder determinar su abundancia, su ubicación exacta, en qué forma está y cómo cambia con el paso del tiempo. Conocer a fondo en qué sitios de la Luna hay más hielo de agua concentrado es de vital importancia para poder aprovechar esa agua en futuras bases lunares sin tener que llevarla desde la Tierra.

Antes de comenzar a realizar a fondo su labor, la Lunar Trailblazer deberá pasarse varios meses realizando una serie de maniobras, a fin de poder situarse en una órbita idónea para el trabajo.

La Lunar Trailblazer pesa unos 200 kilogramos y mide 3,5 metros de extremo a extremo cuando sus paneles solares están completamente desplegados, La construcción de la nave fue encargada, en buena parte, a la empresa Lockheed Martin Space. (Fuente: NCYT de Amazings)