Explotó Francisco Maturana – Diario del Sur

Hablar de Francisco Maturana es hablar de la historia del fútbol colombiano. Es el único técnico colombiano que se da el lujo de haber ganado una Copa Libertadores y una Copa América.

En la década de los años 90s partió en dos la historia del fútbol colombiano en los mundiales de Italia 1990 y USA 94.

Fueron años gloriosos en los que Colombia mostró a su mejor selección de todos los tiempos.

La base de aquellos equipos era Atlético Nacional que deslumbró al mundo en 1989 con su título de Copa Libertadores.

Pacho también tuvo la oportunidad de dirigir en Colombia al Once Caldas, América y Millonarios.

Igualmente dirigió las Selecciones Nacionales de Colombia, Ecuador, Costa Rica y Perú, entre otros.

Su hoja de vida es muy extensa y sin duda es el técnico más exitoso del país.

Reflexiones

“Yo creo que en la vida hay que tener sueños y no hay que tener miedo de decirlos. Si no se consiguen, mala suerte, pero hay que ser fiel a ellos”, señaló Pacho.

“La única constante en el universo, es el cambio, es un hecho que ha cambiado. El fútbol no es una cuestión de maniquíes, es de seres humanos y todos los seres humanos son diferentes, cambiamos todos los días”.

“Todo pasa por el tema formativo, no creo que haya una fábrica para hacer jugadores, lo tengo clarito, porque estarían llenas. Al jugador hay que descubrirlo y después marcarle, en su etapa formativa, el camino que lo haga mejor. Pero el fútbol nace con él”, agregó el estratega.

“Los seres humanos de ahora son diferentes, antes jugábamos un partido el domingo y teníamos susto de ir el martes al entrenamiento, porque había que ver el video y lo pillaban a uno. Ahora eso no existe, los jugadores no se ven como jugadores, ahora se sienten jugadores por todo lo que les dice la prensa”, puntualizó.

Caso James

“Con el mayor respeto, James no ha tenido una lesión importante, no ha sido operado de ligamento cruzado ni nada de esas cosas. Y le decía que hay momentos en la vida en los que uno debe desaparecer; te vas, desaparecés, te preparás físicamente, después volvés y la rompés. Pero si está todo el día en las redes, termina siendo uno muy familiar y cualquiera tiene licencia de decirle cualquier cosa a uno”.

“James, con 32 años, si él quiere, para bien de toda la gente que lo respetamos y lo queremos, tiene con qué meterse en la cabeza y tener un buen final”, puntualizó.