La Unión Europea (UE) sigue tratando de aumentar la presión sobre el Kremlin, ante la falta de avances en las negociaciones con Ucrania, y propondrá rebajar sustancialmente el precio por barril de petroleo ruso, desde los 60 a los 45 dólares, por debajo del precio de mercado, de cara a la reunión del G7 que se celebra la próxima semana en Canadá.
«Al rebajar el tope, nos adaptamos a las condiciones cambiantes del mercado, y el límite mantiene su eficacia», ha dicho la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en una rueda de prensa este martes. «Las exportaciones de petróleo siguen representando un tercio de los ingresos públicos de Rusia«, ha añadido. «Tenemos que recortar esta fuente de ingresos».
El grupo de países del que forman parte además de Alemania, Francia e Italia, Estados Unidos, Reino Unido, Canadá y Japón, impulsó la medida al inicio de la guerra, con el objetivo de lastrar la economía rusa. Los líderes del G7 se reúnen en Kananaskis, Alberta, el próximo 15 de junio, y Von der Leyen espera contar con su respaldo para aumentar la presión sobre Rusia.
«Asumo que lo haremos juntos como G7«, ha dicho Von der Leyen sobre si la UE seguirá adelante con la medida, con o sin el apoyo de Estados Unidos. La presidenta de la Comisión ha explicado que su equipo está en contacto con representantes de todos los países, incluida la Casa Blanca. «Estamos alineados en nuestro objetivo de apremiar a Rusia con sanciones masivas a que se siente a la mesa de negociaciones y a tomarse en serio esas negociaciones que lleven a una paz justa y duradera», ha dicho la alemana.
Fin al gas
Otra de las novedades en este paquete de sanciones tienen que ver con el gas, la gran fuente de financiación de la guerra del presidente ruso, Vladímir Putin. La Comisión ha propuesto este martes prohibir las transacciones a través de los gasoductos Nord Stream 1 y 2. «Ningún operador de la UE podrá participar directa o indirectamente en ninguna transacción relacionada con los gasoductos Nord Stream. No hay vuelta atrás«, ha dicho Von der Leyen.
Aunque ambos están inutilizados, el objetivo es prevenir que vuelvan a usarse para suministrar gas, y avanzar así hacia el fin de la dependencia de Rusia en materia de energía, tal y como se ha propuesto Bruselas para 2027. Según la presidenta, desde que comenzara la guerra, los ingresos por venta de combustibles fósiles a países europeos han caído de 12.000 millones a 1.800. El objetivo es dejarlos en cero. Bruselas ha propuesto además imponer un embargo a los productos refinados.
Además, Bruselas ha propuesto ampliar la lista de barcos sometidos a sanciones, en el marco de los esfuerzos para luchar contra la denominada ‘flota fantasma’. Estos barcos transportan crudo ruso bajo la bandera de un tercer país con el objetivo de evadir las sanciones impuestas por Occidente. Con la nueva lista presentada por Bruselas, llegarían hasta 419.
Sector bancario
Las sanciones que ha propuesto este martes la Comisión incluyen también importantes restricciones en el sector bancario. Bruselas plantea tranformar la prohibición del uso del sistema SWIFT en una prohibición total de todas las transacciones con bancos rusos, «limitando su capacidad de financiación». Además, amplía con 22 nuevas entidades la lista de bancos afectados.
El Ejecutivo también ha propuesto ampliar las sanciones que afectan a terceros países añadiendo 22 nuevas empresas que prestan apoyo directo o indirecto al complejo militar e industrial de Rusia. «La capacidad de Putin para mantener la guerra depende en gran medida del apoyo que reciba de terceros países», ha dicho Von der Leyen.
Al paquete de sanciones deberán todavía darle el visto bueno los Veintisiete. Este mismo martes, los embajadores de los países de la UE analizarán el borrador. El objetivo es poder alcanzar un acuerdo en las próximas semanas y aprobar las nuevas medidas durante la próxima reunión de ministros de Exteriores del próximo 23 de junio.
«Hacemos esto porque las sanciones funcionan», ha dicho al jefa de la diplomacia europea, Kaja Kallas, que ha comparecido junto a Von der Leyen este martes. «Juntos, con Estados Unidos, podemos obligar a Putin a negociar en serio», ha añadido. «Estamos aumentando la presión porque el único lenguaje que Rusia entiende es el de la fuerza«, ha reiterado por su parte Von der Leyen.
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Fuente de TenemosNoticias.com: www.elperiodico.com
Publicado el: 2025-06-10 09:54:00
En la sección: El Periódico – internacional