El evento poltico del ao cierra con un reforzado Xi Jinping al frente de un tercer mandato
«La democracia de alta calidad en China ha permitido al pas lograr un rpido desarrollo econmico y una estabilidad social a largo plazo a pesar del impacto de la pandemia. No existe un modelo nico de democracia para todos, ni existe una sola forma correcta para que otros la emulen. La democracia no debe ser privatizada, etiquetada o politizada. La democracia socialista de China rebosa de vitalidad ya que refleja la voluntad del pueblo chino».
As arranca Xinhua, la agencia oficial de noticias de China, un editorial para vender que la «democracia» de su rgimen es la que mejor funciona. Como ejemplo pone la sesin legislativa anual que concluy el lunes con un reforzado Xi Jinping al frente de un tercer mandato inaudito, un baile de sillas en el Ejecutivo al antojo del lder, y la aprobacin de varias reformas, como una enmienda a la normativa que rige cmo se promulgan las leyes. El mximo rgano del Parlamento ahora tendr poderes especiales para aprobar las leyes despus de una sola sesin de revisin, saltndose el precepto anterior de varias reuniones que alargaban todo el proceso.
«A diferencia de algunos pases occidentales donde el caos y las tensiones causadas por las disputas entre partidos polticos, la polarizacin o los problemas raciales son comunes, el gran evento poltico de China es una reunin pacfica y unificada donde se escuchan y respetan diversas voces», contina el informe de Xinhua. Esas voces son las de casi 3.000 diputados de todas partes del pas que participan en un gran teatro donde votan lo que la lite del omnipresente Partido Comunista ha decidido de antemano.
La democracia china es que Xi Jinping, el lder que suprimi los lmites de mandato sin oposicin, sea reelegido presidente con 2.952 votos de 2.952 posibles. O que, para simular que en el hemiciclo de Tiananmen hay espacio para la discrepancia, haya tres votos en contra y ocho abstenciones durante el nombramiento del primer ministro.
La democracia china es aquella en la que la agencia de propaganda del Partido Comunista necesita una VPN ilegal en su pas para saltar el Gran Cortafuegos y colgar en el censurado Twitter la versin en ingls de su carta alardeando de un imaginario -ms all de la colorida foto de todos los aos- pluralismo y consenso legislativo.
La democracia china es que al terminar la clausura de la Asamblea Popular Nacional (APN), el nuevo premier celebre una rueda de prensa donde han sido pactadas y filtradas previamente las pocas preguntas que se permiten. Y que, en las sesiones abiertas para la prensa durante toda la semana de reuniones en el Gran Palacio del Pueblo, solo se hayan acreditado a un nmero reducido de corresponsales extranjeros.
Alegaban «restricciones pandmicas» y pocas plazas porque el Gobierno haba invitado a Pekn a un amplio grupo de periodistas de pases en vas de desarrollo que saben que luego tienen que escribir sobre las bondades y generosidades del gigante asitico. Han sido varios los medios internacionales con oficina en Pekn vetados en el Parlamento chino. Un cerrojo sin precedentes.
La asamblea de este ao, adems de la confirmacin oficial de Xi como presidente y jefe de las fuerzas armadas, as como una gran reorganizacin en los puestos claves del Gobierno, ha marcado la agenda para la bsqueda de la autosuficiencia tecnolgica y la modernizacin del ejrcito. Este ltimo punto, sobre todo, fue en el que incidi Xi el lunes durante su discurso de clausura. El lder exigi esfuerzos para avanzar en la «modernizacin de la defensa nacional» y en la necesidad de convertir a las fuerzas armadas en una «Gran Muralla de acero para proteger la soberana y los intereses nacionales de China».
En los 15 minutos que dedic para la arenga final, Xi tambin se acord de Taiwan, la isla autogobernada que Pekn considera una provincia separatista. «Deberamos oponernos activamente a las fuerzas externas y las actividades secesionistas de la independencia de Taiwan. Debemos avanzar inquebrantablemente en la causa del rejuvenecimiento y la reunificacin nacional», proclam. A diferencia de otros discursos, donde sola aadir la coletilla de que la reunificacin con Taiwan se ejecutara a la fuerza si fuera necesario, esta vez el presidente enfatiz en «promover el desarrollo pacfico de las relaciones a travs del Estrecho».
Xi Jinping, por las seales que ha ido mandando durante el evento poltico, se aventura como el lder supremo de una China cada vez ms cerrada y autoritaria dentro de casa, mientras que fuera busca estirar sus alianzas y afianzarse para muchos pases como el referente a seguir en contraposicin al orden liderado por Estados Unidos. El ltimo golpe sobre la mesa de Pekn fue convertirse en el mediador que el viernes logr que Irn y Arabia Saud restablecieran los lazos diplomticos.
La siguiente parada puede ser presionar a Rusia para que se adhiera al plan de paz promulgado por el rgimen chino para el alto al fuego en Ucrania. Segn Reuters, Xi Jinping estara plantendose viajar a Mosc la prxima semana para reunirse con su socio Vladimir Putin.
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Fuente de TenemosNoticias.com: www.elmundo.es
Publicado el: 2023-03-13 08:37:04
En la sección: Internacional // elmundo