Exrectora que facilitó abuso de niños en Santander fue condenada a 20 años de prisión – Otras Ciudades – Colombia

Luego de más de siete años de investigaciones, la Fiscalía General de la Nación logró conseguir las pruebas necesarias para condenar a la exrectora del colegio de Nuestra Señora del Rosario, en Charalá, Santander, Lucila Inés Gutiérrez de Moreno, quien habría entregado a varios menores de edad a los paramilitares, estos hechos ocurrieron entre el 2001 y 2003.

Se sabe que entre esos años, varios cabecillas de las Autodefensas Unidas de Colombia financiaron bazares y reinados en los que participaban las niñas del colegio, para que el comandante escogiera las que iban a ser víctimas de sus abusos; además, los niños eran usados para sus fines delictivos.

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En las últimas horas, un fiscal de la Dirección Especializada contra la Corrupción de la Fiscalía General de la Nación aseguró en un juicio que la exdirectora del plantel educativo y que ha sido identificada como Lucila Inés Gutiérrez de Moreno, permitió que varias menores del colegio que dirigía fueran abusadas sexualmente por cabecillas del frente Cacique Guanentá de las Autodefensas Unidas de Colombia.

“Engañó a 23 adolescentes y los entregó al grupo armado ilegal. Uno de los jóvenes fue abusado sexualmente y en múltiples oportunidades por los cabecillas paramilitares”, indicó el director Especializado contra la Corrupción, Eduar Alirio Calderón.

De igual forma se sabe que la mujer no habría actuado sola, sino bajo el acompañamiento del señor José William Parra Arroyave, quien trabajó con ella entre 2001 y 2003 y como auxiliar y orientador político del frente Cacique Guanentá.

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Durante los años de investigaciones, los fiscales de la Fiscalía General de la Nación encargados del proceso lograron identificar a varias de las víctimas de abuso, quienes aseguraron haber permanecido encerradas durante largos periodos de tiempo soportando abusos por parte de jefes paramilitares identificados como alias ‘Víctor’, ‘Carlos’, ‘Nariz’, ‘Chirrete’, ‘Silvestre’ y ‘Shuster’.

La mujer fue detenida en 2017 y a las pocas semanas quedó en libertad, debido a la falta de pruebas, sin embargo, ahora un juez penal especializado de Bucaramanga, en Santander, emitió la condena a 20 años y 9 meses de prisión por los delitos de “secuestro simple agravado, acceso carnal violento en persona protegida, esclavitud sexual y desplazamiento forzado”.

Así mismo, su cómplice, identificado como José William Parra Arroyave fue condenado a 24 años y 2 meses de prisión por “los delitos de entrenamiento para actividades ilícitas, acceso carnal violento en persona protegida y reclutamiento forzado”.

“El fallo dispuso la captura inmediata de la sentenciada para que cumpla la pena en establecimiento carcelario”, agregó la Fiscalía General de la Nación.

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