Tras la derrota en Leverkusen, el tcnico elogi la figura del francs y su compenetracin con Joao, al que sac del campo a 20 minutos del final
Diego Pablo Simeone caminaba pensativo por los impolutos pasillos del BayArena de Leverkusen. Apenas una semana despus del xtasis ante el Oporto, otra sonora bofetada en una ciudad, en un campo, que le ha amargado ms de la cuenta sus vuelos de regreso a Madrid (tres derrotas en cuatro visitas). Ese Bayer que ha arrancado el curso asfixiado por las dudas fue capaz de echar abajo su plan en tres minutos. Una pizarra que vive condicionada desde la pretemporada por esas cadenas que tienen maniatado a Antoine Griezmann (192 minutos) durante una hora. Quizs, en su pensativa travesa hacia el autobs, fantaseaba con cmo sera su Atltico si Joao Flix (497) y Antoine, dueos de un exclusivo don de la clarividencia en la plantilla, pudieran pasar ms de un rato juntos sobre la hierba. En Alemania, la soledad del portugus durante una hora slo encontr consuelo en esos poco ms de 10 minutos que ambos coincidieron. La frescura y el mpetu de uno coincide con el desgaste del otro. Vidas cruzadas, para desgracia del Atltico.
«Cuando Griezmann est en el campo, el equipo juega mejor. Se encuentra muy bien con ese juego asociativo con Joao», admita Simeone, que reclam a Joao Flix cuando su equipo jugaba a lo que dictaban sus dos genios. El Metropolitano ya respondi con bronca a la prematura marcha del luso ante el Oporto, minutos antes del inolvidable desenlace. En el BayArena, el cambio volvi a contrariar. La conexin entre ambos, como demostraron por ejemplo en Old Trafford, durante la pasada Liga de Campeones, es incuestionable. All garabatearon entre ambos las lneas maestras de un gol que vali un pase a cuartos de final. Tienen qumica dentro y fuera del campo, a pesar de la diferencia de edad (31 el francs y 22 el portugus). Sin embargo, hasta nueva orden, no pueden pasar mucho ms de media hora juntos.
Su vnculo en los siete partidos oficiales de la temporada se resume en poco ms de 130 minutos. 20 de ellos, en dos ratos de la Liga de Campeones. El ltimo, en Leverkusen, coincidi con los momentos ms imponentes del equipo. Son 20 minutos de los 60 que podran haber convivido en Europa porque Simeone nunca ha mantenido a Joao hasta el pitido final. Da igual, como ante el Bayer, que estuviera siendo uno de los ms destacados. En Liga, han sido 110 minutos de los 150 posibles. El portugus slo ha jugado un partido completo hasta la fecha: ante la Real Sociedad. De modo que la mano del tcnico argentino tambin ha condicionado el baile, bien por cansancio o por un asunto tctico.
La prueba en Cdiz
Hasta ahora, la velada que ms tiempo han convivido fue la del pasado sbado frente al Celta. Simeone opt porque ambos entraran juntos, a media hora del final, con el marcador 2-0. El equipo respondi con alegra y velocidad, y acab ejecutando al galope al conjunto celeste (4-1). Ambos, conectados, idearon el eplogo.
Cuando el verano se desperezaba, Simeone ya conoca de primera mano cul sera la realidad de Griezmann. Su nombre flot incluso en el mercado durante varios pasajes. Un peaje acatado sin rechistar por las partes implicadas. Aun as, durante el partido amistoso de preparacin ante el Cdiz, el tcnico argentino mostr lo que pasaba por su cabeza en circunstancias normales: un tridente con Morata, Joao Flix y Griezmann. Obviamente, dependiendo del rival y el escenario. Lo normal es que la estampa no se hubiera quedado en una ancdota, pero los epgrafes del contrato de Antoine, junto a las estrecheces econmicas del Atltico, han obligado a pactar un vodevil en el minuto 60 de cada partido. Una artimaa para sortear el pago de los 40 millones que acordaron con el Barcelona, hace poco ms de un ao, en el caso de que el francs jugara 45 minutos en el 50% de los partidos de su segunda temporada.
El martes amaneca con la informacin de ‘L’quipe’ sobre un acuerdo inminente con el Bara para rebajar el importe a 25 millones y evitar el show. A las puertas del hotel Radisson Blu de Colonia, cuartel general del Atltico en Alemania, nadie en el club rojiblanco aseguraba saber detalle alguno de esa posible negociacin. «Ni nos hemos reunido con ellos ni tenemos noticias de que nos vayamos a reunir», sostena Enrique Cerezo, presidente de la entidad. Ese acuerdo es la nica va para la liberacin del equipo sobre el csped.
La puesta a punto en Ibiza
«Antoine nos da cosas que otros no tienen, pero la situacin es complicada», insisten en los despachos del Metropolitano, donde se mantiene mximo sigilo respecto al asunto. El inminente parn de selecciones, a dos meses del Mundial, puede desembocar en un punto de encuentro que aclarara la mente de Simeone.
No es casualidad que, ms all de su calidad, tanto Joao como Griezmann sean dos de los futbolistas ms en forma del equipo. Los dos compaginaron sus vacaciones en Ibiza con una puesta a punto para la pretemporada ms exigente de sus carreras. El francs, que ya estaba advertido sobre la situacin que se encontrara en Madrid, recurri a las instalaciones de la UD Ibiza para subirse al inicio de la temporada en plenitud fsica. La puerta del hotel del portugus era aporreada cada maana, siempre a las nueve en punto, por un preparador fsico que le ha ayudado a pulir su cuerpo para sostener las ya habituales embestidas rivales. El resultado: Antoine, pese a las limitaciones, suma tres tantos y es el mximo goleador junto a Morata; Joao lleva tres asistencias (una a Antoine) y derrocha liderazgo.
Pero la felicidad no es completa. Ni para ellos ni, por extensin, para el Atltico. Al menos, no por ahora. No, mientras los caminos de ambos tengan que cruzarse. En Leverkusen, el precio fue caro y, tal vez, haya sido una leccin para el prximo derbi ante el Real Madrid. Quizs el martes por la noche, en los pasillos del BayArena, Simeone daba vueltas sobre la posibilidad de hacer una excepcin con Griezmann. De dar un paso al frente. La ocasin lo merece.
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Fuente de TenemosNoticias.com: www.elmundo.es
Publicado el: 2022-09-14 09:58:53
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