Un gol de Abde en la prrroga dio al equipo de Arrasate el pase a semifinales tras un partido igualado, intenso e imprevisible (2-1).
El Sevilla es un cuadro de Pollock. Un puado de brochazos nerviosos que conforman una desconcertante belleza. Un desorden con alma. Lo de Osasuna es otra cosa. Una economa cromtica. Una gravedad con fugas de luz. La primera mitad fue de los nervionenses. Osasuna no pudo contener el ataque visitante. Acua y Montiel surtan de balones a los atacantes, Rakitic se paseaba por el rea de Sergio Herrera y Lucas Ocampos la peda con hambre en sus botas. Los locales esperaban sobrios los embates. Con el pulso parado. Sin temblor de rodillas. Lamela dispar cerca del palo diestro del portero en una de las pocas ocasiones claras. Rafa Mir, en otra, finaliz mal cuando ya haba logrado controlar el baln en el rea ajena. El ftbol era intenso pero opaco. Sin espacios apenas. Sin oxgeno en la medular. [Narracin y estadsticas (2-1)]
Con Moi Gmez y Aimar Oroz desaparecidos, los de Joseba Arrasate se colgaban en la espalda de Kike Garca, que se haca hueco como poda entre los defensas. Los porteros, pese al bullicio, vean el partido con los guantes inmaculados. Como en una moderna pelcula de autor, sucedan cosas, pero ninguna resultaba lo suficientemente interesante. En el 45 exacto pit De Burgos Bengoetxea el final del primer asalto. El Sevilla envalentonado, Osasuna afinando an el instrumento. La entropa de Sampaoli frente a la disciplina de Arrasate. Empate a vehemencia.
Bono sustituy a Dmitrovic, lesionado, a la vuelta de vestuarios. Los andaluces arrancaron de forma idntica: verticales y vivos en la recuperacin. La grada de El Sadar intentaba sacar a los suyos del breve letargo. Kike Barja no lograba diablear en su costado, Chimy vila revivi, tras muchos minutos ausente, en el minuto 52. Dispar en el rea pequea tras centro de Moi, pero Bono se agigant y con la manopla derecha salv milagrosamente un gol que pareca hecho. Con la ocasin crecieron los anfitriones, recuperando la posesin de la pelota y asocindose en la parcela del rival. El Sevilla no le perdi la cara al partido y, pese a su esperada bajada de ritmo tras el furioso comienzo, supo mantener la compostura. liver Torres sustituy a Ocampos, buscando cementar el centro del campo y frenar el impulso rojillo.
Clemencia y castigo
Un disparo envenenado de Lamela oblig a Herrera a lucirse en el 66. Ahora eran los de blanco los que hostigaban la meta contraria. Rafa Mir, demasiado escorado, no terminaba de finalizar las oportunidades que sus compaeros le brindaban. Un centro vibrante de Acua, por ejemplo, que no logr rematar pese a quitarse de encima a su marcador. Tanta clemencia tuvo castigo. En el 70 lanz Osasuna un directo que noque a los nervionenses. Chimy dom un baln en el rea y con un latigazo, a la media vuelta, bati a Bono.
Navas y En-Nesyri saltaron al campo. Quince minutos para la tragedia nervionense. Los navarros hicieron lo esperado: solidificarse. Menear la pelota de banda a banda. Dormir un partido que en la boca ya tena el sabor de las semifinales. Los de Sampaoli se dieron un atracn de balones a la olla, pero la retaguardia no tena piedad. Frente al desorden, cohesin. Frente a la algaraba, severidad. Cuando ya se celebraba el pase en los fondos, En-Nesyri rompi el muro. Centro de Suso al rea pequea y gol. Empate y prrroga.
El cansancio empap el ftbol. Ninguno de los dos equipos fue decididamente a por el segundo gol. Desdibujados por los cambios, lo fiaron todo a los que estaban ms frescos. Y ah apareci Abde. En el minuto 9 del extra, el marroqu recibi un baln a espaldas de la defensa, con un frenado en seco descoloc a Bad, y bati a Bono. No pudo levantarse el Sevilla de la lona por segunda vez. El club navarro se gan el derecho a seguir soando con la Copa.
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Fuente de TenemosNoticias.com: www.elmundo.es
Publicado el: 2023-01-25 19:42:18
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