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F1: El legado del Lotus 72: una radical obra de arte marcada por la tragedia | elmundo.es

F1: El legado del Lotus 72: una radical obra de arte marcada por la tragedia

El 9 de mayo de 1969, slo cinco das despus de sufrir un espeluznante accidente en Montjuic durante el GP de Espaa, Jochen Rindt escribi a Colin Chapman una carta desde Ginebra: «Sus coches son tan rpidos que tambin seramos competitivos con algunos kilos de ms que fortalecieran las partes dbiles. (…) Por favor, reflexione sobre mis sugerencias. Slo puedo conducir un monoplaza en el que tenga cierta confianza y creo que el punto de desconfianza est bastante cerca». Aunque no existe evidencia documental sobre respuesta alguna, lo cierto es que, durante el GP de Espaa de 1970, disputado entonces en el Jarama, Rindt se puso por vez primera al volante de la nueva creacin de Chapman. Se trataba del Lotus 72, uno de los Frmula 1 ms bellos jams construidos. El coche con el que Rindt ganara cinco carreras antes de convertirse en el nico campen del mundo a ttulo pstumo.

Cinco aos despus de la muerte de Rindt, acaecida durante los entrenamientos del GP de Italia de 1970, Chapman garabate en su cuaderno unas notas tan concisas como aterradoras: «Un coche de carreras slo tiene un objetivo: ganar carreras de motor. Si no lo logra, no es ms que una prdida de tiempo y dinero. No importa lo seguro que sea. Si no gana consistentemente, no es nada». La obsesin de Chapman por el xito fue ampliamente satisfecha gracias a su Lotus 72, que durante seis aos de asombrosa longevidad en la F1 conquist 20 victorias y cinco ttulos mundiales: tres de constructores (1970, 1972 y 1973) y dos de pilotos, con Rindt (1970) y Emerson Fittipaldi (1972). Sin embargo, slo tres de los 16 hombres que lo manejaron (Rindt, Fittipaldi y Ronnie Peterson) pudieron ganar con l. Ni Graham Hill ni Jackie Ickx, por citar dos ilustres, lograron domarlo.

La criatura de Lotus fue diseada por Maurice Philippe, con dibujos previos de Tony Rudd. A simple vista, el gran hallazgo de Philippe fue trazar un perfil que nos permite, de forma instantnea, reconocer a un F1. El Lotus 72 era la cua aerodinmica con la que an hoy identificamos a los monoplazas del Mundial. Pero es que, adems, montaba por primera vez radiadores en sus laterales (los clebres sidepods), e incorporaba otra toma de aire sellada a la admisin del motor para aumentar la presin (y con ella, la potencia). Entre 1970 y 1975 se convirti en el ms longevo de la F1, con cinco aos, cinco meses y 21 das de tumultuoso servicio.

«Simplifica y despus aligera»

Durante el proceso, Philippe tuvo que lidiar a diario con el gran empeo de Chapman. Una obsesin moldeada en una frase que debera acuarse en bronce: «Simplifica y despus aligera». Antes que nadie, Sir Colin tuvo claro el concepto: si aumentas la potencia del motor, un F1 ir ms rpido en las rectas; si reduces el peso, ir mejor en todas partes. Por tanto, Philippe hubo de ponerse creativo para redistribuir los pesos. Instal los frenos en el interior del monoplaza y no en las ruedas, con lo que mejor el centro de gravedad; elimin las viejas suspensiones de muelles helicoidales por otras de barra de torsin que mejoraban la maniobrabilidad; introdujo por primera vez un alern trasero con varios elementos y dio, en definitiva, un impulso sin el que hoy no se entendera el lpiz de Adrian Newey. El prototipo 72, propulsado por un motor Ford Cosworth, combinaba una baja resistencia aerodinmica (drag) con una elevada carga (downforce). Sus neumticos Firestone, por tanto, rendan mejor que los de la competencia.

El genio visionario del fundador de Lotus descansaba en su rigurosa formacin como ingeniero aeronutico. Su pasin por los aviones, que le hizo alistarse en la Real Fuerza Area (RAF), marc su vnculo con la F1 en un momento donde florecan los garajistas britnicos. Los equipos privados de Jack Brahbam, Bruce McLaren o Rob Walker que osaron desafiar a Enzo Ferrari. Desde 1958, ao de su aterrizaje en el Gran Circo, Chapman desafi a las convenciones con el chasis monocasco o la fibra de carbono y revirti conceptos que se consideraban sagrados, como el de la posicin delantera del motor, que retrasara al centro del vehculo.

Slo un adelantado a su poca como l supo transformar la F1 en el gran negocio que hoy conocemos, atrayendo a los patrocinadores para que colocasen sus pegatinas a cambio de grandes sumas. Hasta entonces, los monoplazas reservaban su espacio para artculos vinculados con la propia industria del motor. Pero l ampli el foco. Renunciando a los tonos verde con los que haba conducido tantas veces a la gloria a Jim Clark, por el rojo y dorado de la marca de cigarrillos Gold Leaf. Y cerrando, en 1972, su acuerdo con otra tabaquera, John Player Special, que dio pie a una las combinaciones ms memorables en la historia del automovilismo. La elegancia del negro y dorado para JPS, obra de Barry Foley y Johnny Tipler, sigue fascinando hoy como icono publicitario.

Rindt, pocas horas antes de su muerte en Monza.GETTY

Chapman tambin haba hecho sus pinitos como piloto, foguendose incluso con Mike Hawthorn en Vanwall. Quiso disputar el GP de Francia de 1956, aunque un accidente durante la clasificacin ech todo por tierra. Ya nunca llegara a debutar en la F1, pero aquella experiencia sera muy provechosa para el futuro. A partir de entonces, siempre sabra qu teclas pulsar para convencer a quienes se iban a jugar la vida con sus coches. Y eso result crucial en el Lotus 72, un proyecto nacido con frceps.

Cmo sera de crtico el asunto que el valeroso Rindt se mostraba reacio a probarlo hasta no verlo totalmente desarrollado. Su debut en el GP de Espaa de 1970 se vio marcado por el fiasco clasificatorio de John Miles y la retirada del austriaco, vctima de una avera en el encendido. Los problemas se agudizaron tres semanas ms tarde en Mnaco, cuando Rindt opt por el modelo 49C para sellar un fantstico triunfo ante Brabham, que en la ltima vuelta se estrell contra las barreras de la horquilla Antony Noghes. Un mes despus, durante el GP de Blgica, tampoco hubo modo de meter al 72 en cintura. El espaol Alex Soler-Roig ni siquiera obtuvo billete para la carrera y Miles abandon por una avera en el cambio. «Este maldito coche me matar algn da», confes Rindt aquel fin de semana a Bernie Ecclestone.

El horizonte empezara a despejarse durante el GP de Holanda, con un 72 muy modificado y desprovisto de sus insidiosas suspensiones. En Zandvoort, Rindt marc la pole con 43 centsimas de ventaja sobre Ickx y barri a la competencia con un ritmo infernal durante 80 giros. Su medio minuto de ventaja en la meta sobre Jackie Stewart supona el primer indicio del potencial de aquel coche. Rindt no pudo festejarlo por culpa del trgico accidente de su amigo Piers Courage, pero a partir de entonces tampoco encontrara oposicin en Clermont-Ferrand, Silverstone y Hockenheim. Tras su pica batalla con Ickx en Alemania, Rindt incluso pudo bromear: «No tengo ningn mrito. El coche es tan bueno que incluso un mono amaestrado ganara con l».

A su llegada al GP de Italia, lideraba holgadamente el Mundial: con slo cuatro carreras por delante, contaba con 20 puntos de ventaja sobre Brabham y 25 sobre David Hulme. Apenas restaban 36 en juego. Aquel 5 de septiembre, Chapman mont en Monza una configuracin aerodinmica extraordinariamente agresiva para su prximo campen, quien, fiel a su costumbre, no llevaba atado el arns de la entrepierna. Pero lo que realmente fall mientras trazaba la Parablica fue el eje del freno delantero derecho. Miles, quiz el ms insignificante piloto de Lotus y el ms osado ante los micrfonos, jams tuvo miedo de hablar sobre ello. «Cada vez que me suba al Lotus 72, algo se rompa. (…) Era una temeridad tctica. Si no hubiramos hecho experimentos estpidos como quitar las alas (…) y si los mecnicos no hubieran pasado la noche en vela, quiz Jochen seguira vivo», escribi el britnico para la cadena ITV.

«Empec en el equipo un lunes por la maana. Cuando llegu por primera vez a mi apartamento ya era mircoles por la tarde»

Herbie Blash

Porque Chapman siempre alarde de la inquebrantable adhesin de su garaje, liderado entre 1970 y 1975 por Gordon Huckle, Keith Leighton y Eddie Dennis. Sin embargo, aquellos currantes no slo se dedicaban a la F1, sino que doblaban turnos en otras cuatro categoras: F2, F3, Indycar y Sport. Herbie Blash, leyenda del paddock durante dcadas, apenas aguant tres aos a las rdenes de Chunky, el apodo con el que trataban al jefe. Su pecado fue liderar un plante por la insufrible carga de trabajo. «Empec en el equipo un lunes por la maana. Cuando llegu por primera vez a mi apartamento ya era mircoles por la tarde», relat el mecnico en 2010.

«Quiero vivir lo mximo posible»

La otra gran afrenta para Chapman fue el informe de 37 pginas donde se investigaba su responsabilidad civil en la muerte de Rindt. Finalmente qued exonerado por las autoridades italianas. Slo as pudo seguir desarrollando su fabulosa creatividad. Pese a las reiteradas protestas de los rivales, que intentaban frenar en los despachos lo que no conseguan sobre el asfalto, Lotus pudo iniciar el Mundial de 1977 con el prototipo 78. El pionero del efecto suelo. Un concepto revolucionario, basado en la dinmica de fluidos y en el proceso inverso al que siguen los aviones. Mediante una diferencia en presiones se provoca un vaco que aplasta al monoplaza contra el asfalto y le permite un paso ms rpido por curva.

Peterson, con el Lotus 72, en Nurburgring, en 1975.

Peterson, con el Lotus 72, en Nurburgring, en 1975.

En 1978, Mario Andretti se alz con el ttulo de campen al volante del 78, en dura competencia con su compaero Ronnie Peterson. El estadounidense ha referido en numerosas ocasiones su primer encuentro con Chapman. «Colin me dijo: ‘Mario, siempre quiero fabricar el coche ms ligero posible’. Y yo contest: ‘Pues yo quiero vivir el mximo tiempo posible. Supongo que deberamos hablar de ello». El sueco, por su parte, haba arrancado aquel ao triunfal con otra cita para el recuerdo: «No tengo la intencin de ser otro hroe muerto para Lotus». Pero llegado el GP de Italia, cuando contaba con slo 12 puntos menos que Andretti (con 27 en disputa), un fatal accidente, nada ms apagarse el semforo, segara su vida para siempre.

La tragedia fue consustancial a la leyenda de Chapman, un atildado gentleman londinense indispensable para entender la actual F1. Puede que nunca fuese un hroe. Ni un egosta temerario. O quiz fuese todo eso a la vez. Porque jms pudo superar la muerte de su gran amigo Clark -fallecido en 1968 en Hockenheim en extraas circunstancias-, y porque tambin guard luto por Mike Spence, Alan Stacey y Ricardo Rodrguez. l mismo iba a apurar sus das a la velocidad de un disparo. Cuando falleci a los 54 aos, vctima de un ataque cardiaco, ya era una leyenda. Y su identificacin con Lotus, tan ntima, que el equipo jams se recuper de su prdida: nicamente nueve victorias en 296 carreras, seis de ellas para Ayrton Senna.

Fuente de TenemosNoticias.com: www.elmundo.es

Publicado el: 2024-03-13 16:40:11
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