Pese a que la infraestructura para transportar y mover el petróleo es todavía escasa y las operaciones de exploración y búsqueda de petróleo están en plena ebullición, Vaca Muerta no para de batir nuevos récords. Esta formación de shale oil (petróleo de esquisto) se ha convertido en una de las esperanzas de la economía de Argentina. Hasta el día de hoy, con una inversión a la que todavía le queda mucho recorrido, está produciendo importantes cantidades de crudo y gas. Los grandes proyectos (oleoductos, gasoductos e infraestructura) están todavía por llegar. Pese a todo, la creciente producción de crudo y gas de este yacimiento ya ha permitido a Argentina registrar los primeros superávits energéticos en Argentina en mucho tiempo.
Poco a poco, la región de Neuquén se está aupando y consolidando como la mayor provincia productora de hidrocarburos de Argentina, gracias al permanente crecimiento de los yacimientos de Vaca Muerta, la pieza central del emporio petrolero que se está generando en esta provincia. De este modo, en octubre, la producción de crudo alcanzó un nuevo récord histórico con 447.460 barriles por día, lo que representa un incremento del 0,13% en comparación con el mes anterior y un notable aumento del 26,35% respecto al mismo mes de 2023.
Este aumento de la producción tiene más valor si cabe al analizar el contexto en el que se encuentra el mercado de petróleo, con unos precios extremadamente volátiles y que se están situando en el entorno de los 73 dólares por barriles, un nivel relativamente bajo para los precios que han dominado el mercado desde que terminó la pandemia del covid. Cuanto más bajos son los precios del crudo, menor es el incentivo a la producción de nuevo petróleo. Sin embargo, los costes de producción en Vaca Muerta (el breakeven se estima en unos 36 dólares el barril) son relativamente bajos, lo que permite que los frackers y productores de la zona, como YPF o Pampa Energía sigan trabajando para producir más petróleo, incluso a los precios actuales.
Así, según los últimos datos publicados este mismo jueves por el Ministerio de Energía y Recursos Naturales de Neuquén, el incremento del crudo se debe en gran medida al buen rendimiento de las grandes áreas como son Bajada del Palo Oeste, Coirón Amargo Suroeste, Lindero Atravesado, La Amarga Chica y Loma La Lata, que impulsaron el incremento en la producción de octubre. En términos acumulados, entre enero y octubre de 2024, la producción de petróleo fue un 24,15% superior a la registrada en el mismo período de 2023.
Los geólogos calculan que este yacimiento podría presentar unas reservas de crudo a los 16.000 millones de barriles de petróleo de esquisto (shale oil), lo que lo convierte en la mayor reserva de crudo no convencional de América Latina y en una de las mayores reservas de hidrocarburos no convencionales de todo el mundo. Con frecuencia se compara a Vaca Muerta con el prolífico yacimiento de esquisto Eagle Ford en Texas, un campo que bombea alrededor de 1,2 millones de barriles de petróleo. La Administración de Información de la Energía de Estados Unidos (EIA) confirmó en 2019 que Vaca Muerta y Eagle Ford comparten profundidades, espesores, presiones y composiciones minerales similares.
Cabe recordar, que el crudo que se extrae en Vaca Muerta es shale oil o petróleo de esquisto, por lo que es necesario utilizar el fracking o fracturación hidráulica para su extracción. Esta es una técnica de extracción conocida desde los años 50 y practicada en el mundo desde hace varias décadas, pero que no ha terminado de explotar hasta hace algo más de una década, con la Cuenca Pérmica de EEUU como gran representante. La Cuenca Pérmica de EEUU ya produce más de 6 millones de barriles de crudo cada. El fracking consiste en la inyección de un fluido compuesto por un 95% de agua; 4,5% de arena y 0,5% de aditivos para crear las vías necesarias por las cuales los hidrocarburos fluyan de manera natural. Esta operación se realiza en etapas y por solo 1 a 2 días. Una vez finalizada, el pozo queda en producción por los próximos 20 a 40 años, aseguran desde YPF. Vaca Muerta es el yacimiento más rico en shale oil de Sudamérica.
Todo ello ha llevado a que la inversión de la industria se concentra en este ‘pedazo de tierra’. Desde el Gobierno de Argentina explicaban en una nota publicada en septiembre que la producción de hidrocarburos no convencionales en la Argentina continúa desplegando un crecimiento sostenido. Por ejemplo, la petrolera YPF, controlada por el Estado argentino ha recibido la autorización para hacer una nueva campaña de exploración en un área al norte de la enorme formación de hidrocarburos no convencionales de Vaca Muerta y bajo jurisdicción de la provincia argentina de Mendoza (oeste), según han revelado fuentes oficiales. Según informó el Gobierno de Mendoza en un comunicado, el Ejecutivo provincial concedió el permiso para que YPF inicie el segundo período exploratorio en el área CN VII A.
La gran esperanza de Argentina
Desde la propia YPF explican que se podría duplicar la producción de crudo del país (Argentina produce en estos momentos poco más de 700.00 barriles de crudo por día) en los próximos años para superar el millón de barriles diarios, lo que generaría exportaciones por 18.000 millones de dólares anuales en 2026, con un superávit en la balanza energética de unos 12.500 millones de dólares. Esto supondría la entrada de un ‘chorro’ de dólares que permitiría a Argentina afrontar con mayor seguridad el fin del cepo cambiario y el pago de la deuda externa del país. Incluso esas estimaciones podrían quedarse cortas. Hay cálculos que aseguran que Argentina podría lograr en 2030 un superávit energético de 30.000 millones de dólares, según un informe difundido la semana pasada por la firma PwC.
De acuerdo a proyecciones de la firma de consultoría, Argentina lograría para 2030 una producción de un millón de barriles de petróleo y más de 250 millones de metros cúbicos de gas por día. «Vaca Muerta tiene la capacidad geológica de llevar al país a niveles de producción nunca vistos. En este nuevo escenario, el interés de las empresas locales e internacionales en invertir en petróleo y gas no convencional es muy significativo dado el alto potencial que tiene Vaca Muerta», Ezequiel Mirazón, socio de PwC Argentina y experto en energía y minería.
Aunque este milagro de Vaca Muerta no esté directamente relacionado con el Gobierno de Javier Milei (sí lo está indirectamente porque Milei está facilitando la inversión y dando certidumbre jurídica) podría convertirse en una pata importante para ayudar a Argentina a evitar el default y recuperarse de la crisis económica en la que el país lleva inmerso desde el año pasado.
«En lo que respecta a gas, la Argentina podría autoabastecerse y constituir un recurso estratégico como parte de las transiciones energéticas para contribuir a descarbonizar las economías del mundo. Nuestro país podría convertirse rápidamente en un exportador de gas en firme a la región, especialmente a Chile y Brasil y en un paso posterior, en exportador al mundo con una planta de GNL», aseguran desde YPF.
Fuente de TenemosNoticias.com: www.eleconomista.es
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