Mark Zuckerberg lleva montado en una montaña rusa desde 2021. El magnate y cofundador de Facebook tocó el cielo en septiembre de ese año, llegando a amasar la friolera de 142.000 millones de dólares. Eran otros tiempos: su firma se codeaba con las más grandes, superando el billón de dólares de capitalización bursátil. Sin embargo, sus 13 meses posteriores significaron un antes y un después en el estadounidense: se dejó por el camino 100.000 millones en una de las caídas más bestias que se recuerdan en el mundo empresarial.
Ese crochet le vino dado por los resultados trimestrales, en los que el empresario vio caer la valoración de mercado de Meta (anteriormente Facebook) en más de un 20%. A este motivo se le sumó la apuesta fallida por el metaverso, unos 10.000 millones de dólares. En aquel momento, Zuckerberg señaló que la compañía seguiría perdiendo «cantidades significativas» de dinero entre tres y cinco años más, antes de que el proyecto comience a ser rentable.
Se acercaba 2023, un año clave en el devenir de Meta y, por consiguiente, de Zuckerberg, que llegó a afirmar que ese sería «el año de la eficiencia», al reconocer que el beneficio acumulado hasta entonces se hundía un 36% con respecto al mismo período del año 2021. La frase del magnate no tenía otra intención que calmar el nerviosismo de los inversores. «Entiendo que muchos puedan estar en desacuerdo con esta inversión», llegó a afirmar.
El 2023 fue, sin duda, un año de éxitos para Zuckerberg y Meta. Aunque sus inicios no fueron los esperados, ya que tuvo que anunciar recortes de plantilla a gran escala. En concreto, el CEO de Meta tuvo que hacer frente a dos rondas de despidos al desplomarse la inversión en publicidad digital, principal fuente de ingresas de la compañía. Poco a poco fueron ganando peso y el valor de la compañía pasó en un año de 270.000 a 919.000 millones de dólares. En noviembre, Zuckerberg retiró unos 190 millones en acciones de la empresa, con lo que volvió a situarse entre los 10 grandes millonarios, según el Índice de Multimillonarios de Bloomberg.
Un 2024 histórico
Una de las grandes sorpresas que se han llevado los inversores de Meta es el dividendo que la compañía confirmó el 1 de febrero. El negocio de la publicidad fue el que impulsó los beneficios de Meta, obteniendo ingresos de 40.100 millones, frente a los 39.180 esperados, lo que supuso una subida interanual del 25%.
El precio de sus anuncios solo subió un 2%, pero las ventas aumentaron un 25%, lo que apuntó a un fuerte crecimiento de la demanda por aparecer en sus redes. Este crecimiento vino apoyado en unos fuertes recortes de gastos: un 8% en el trimestre, haciendo buenos los despidos del último año y el giro hacia la IA, dando la vuelta a la división de Reality Labs, donde la empresa registraba las mayores pérdidas desde el giro al metaverso.
En este 2024, Meta, que cumplió 20 años el 4 de febrero, lleva subidas que rondan el 160% interanual, tras pasar página de las ideas originales del metaverso y concentrarse en las redes sociales, con el lanzamiento de Threads, rival de Twitter (ahora conocida como X). Su mayor apuesta por la realidad virtual, la gran idea de Zuckerberg, se limita ahora a las gafas de realidad virtual Quest 3, con las que compite con las Vision Pro de Apple.
Con todo esto, el inicio de 2024 para Zuckerberg en lo económico no ha podido arrancar mejor. Según datos de Bloomberg, el empresario de tan solo 39 años lleva acumulados 4.550 millones de dólares, siendo la segunda persona con mayor riqueza ganada en este año, tan solo superado por el magnate del agua, el chino Chanpeng Zhao, el CEO de Binance.
Fuente de TenemosNoticias.com: www.eleconomista.es
Publicado el: 2024-02-15 12:32:30
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