La desgarradora razón por la que Sinéad O’Connor llevaba el pelo rapado

Sinéad O’Connor, la cantante irlandesa con voz de ángel, ha fallecido a los 56 años. Siempre la recordaremos con sus enormes ojos verdes y la cabeza rapada cantando el single que la lanzó a la fama en 1990, Nothing Compares 2 U; una canción escrita por Prince que encabezó las listas de éxitos en Estados Unidos y Reino Unido. Un éxito que la cantante nunca deseó.

Era diferente a todos. Sus canciones eran canciones de denuncia, al igual que muchas de las decisiones que tomó durante su vida, como el drástico corte de pelo en respuesta a los ejecutivos discográficos que querían que tuviera un aspecto más femenino.

Tenía solo 19 años cuando le pidieron que se dejara melena y se pusiera minifalda, pero, animada por su representante, decidió raparse la cabeza. En una entrevista en 2021 para el Washington Post Live con motivo de la publicación de sus memorias, Rememberings, contó cómo tomó esa decisión.

«Mi representante de entonces me dijo: ‘Creo que deberías raparte’. Entonces yo llevaba cresta. Me gusta el capítulo del libro que habla de cuando me rapé la cabeza, es muy divertido. El peluquero griego que me rapó era un chico joven, un poco mayor que yo, y estaba flipando. Tanto que, al final, cuando terminó el corte, estaba como en el vídeo de Nothing Compares 2 U. Una lagrimita se deslizaba por su cara porque estaba horrorizado de lo que acababa de hacer».

Pero esta no era la única razón por la que Sinéad O’Connor ‒que se convirtió al Islam en 2018 y cambió su nombre a Shuhada‒ renunció a su melena. Otras razones mucho más desgarradoras llevaron a la cantante irlandesa a llevar el pelo corto. Ella misma las contaba en una entrevista que concedió al programa Dr. Phil, presentado por el estadounidense Phil McGraw, que recoge Metro.co.uk.

Sinead sufrió malos tratos por parte de su madre, que fue la causante de sus trastornos mentales: «Mi hermana tenía el pelo pelirrojo más bonito de la historia», contaba, comparando su cabello con el de Christina Hendricks. «Un pelo pelirrojo glorioso, de esos que dan envidia».

«Pero a mi madre se le metió en la cabeza que el pelo de mi hermana era horrible y asqueroso. Y cuando yo tenía el pelo largo nos presentaba como su hija guapa y su hija fea. Por eso me corté el pelo, no quería ser guapa».

Pero había otra razón más oscura detrás de este look radical que se convirtió en su seña de identidad. «Era peligroso ser guapa porque me violentaban y me acosaban allá donde iba», contaba en la misma entrevista. «No quería que me acosaran, no quería vestirme como una chica, no quería ser guapa. Hasta las chicas te pegaban por ser guapa».

La industria musical le dio su propio giro e influyó en su decisión de mantener su aspecto andrógino: «Si iba a tener éxito, quería que fuera porque era una buena música», contaba O’Connor.

Sinead Marie Bernadette O’Connor ‒nacida en Glenageary, en el condado de Dublín, en diciembre de 1966‒ tuvo una infancia difícil. De adolescente, la pillaron robando y la internaron en el Centro An Grianan de Dublín, una de las tristemente célebres Lavanderías de la Magdalena creadas para retener a las chicas consideradas promiscuas.

En ese horrible lugar, que ella describía como un sitio donde «las chicas lloran», una monja le compró una guitarra y la puso en contacto con un profesor de música. Así empezó su carrera musical. Sinéad O’Connor publicó en 1987 su primer álbum, The Lion And The Cobra, que fue aclamado por la crítica y entró en el top 40 del Reino Unido y Estados Unidos. Publicó diez álbumes en total, pero en 2022, tras intentar superar su dolor por el suicidio de su hijo de 17 años, decidió poner fin a la música cancelando todas sus actuaciones en directo.

Vía: Agencias