la receta definitiva para que nadie note la diferencia

Aunque la de tomate sea, probablemente, la salsa que más se consume en el mundo, en España somos los inventores, si los gastrónomos franceses lo permiten, de otro de los grandes clásicos y favorito de muchos. La mayonesa es una de las preparaciones que realzan algunas de nuestras recetas y que se han convertido en un indispensable en las mesas. 

Prepararla en casa es sencillo, barato (¡solo se necesitan cuatro ingredientes!), rápido y la opción favorita para conseguir el sabor más rico. Sin embargo, pese a su facilidad, esta elaboración no está exenta de complicaciones. Por un lado, debemos poner en práctica todos los trucos para evitar que la mayonesa se corte. Este percance, más habitual de lo que parece, al exceso de aceite o por no mezclarse en el orden correcto.

Cómo hacer mayonesa casera

Este contratiempo es fácil de detectar y solventar si sabemos cómo arreglar una mayonesa cortada. Sin embargo, nos preocupa más el hecho de que uno de los ingredientes principales de esta receta es el huevo crudo, uno de los alérgenos principales que, además, puede suponer un riesgo para la salud si no se conservan el mejor estado. Esto incluye evitar los cambios bruscos de temperatura a la hora de conservarlos y verificar la fecha de caducidad. De lo contrario, podemos estar expuestos a afecciones como la salmonela.

Claro que, apostar por la salsa de bote y renunciar al sabor casero y acompañamiento que esta típica salsa ofrece para nuestros platos no es una opción. Así, si queremos evitar este ingrediente crudo en esta elaboración, ya sea por alergia o por seguridad alimenticia, la lactonesa es el mejor sustitutivo, puesto que es la forma de elaborar una mayonesa sin huevo para evitar riesgos. Sabor y aspecto similar, pero evitando uno de los ingredientes más problemáticos en esta preparación.

Receta de lactonesa: ingredientes

Cómo preparar lactonesa

Hay que tener en cuenta que, igual que la receta clásica de la mayonesa casera, esta elaboración se puede realizar en solo 5 minutos. Eso sí, es importante saber cuánto tiempo podemos conservarla en la nevera porque, aunque no lleva huevo, hay que prestar atención especial al almacenamiento de las salsas.

¿Cómo es correcto decir mayonesa o mahonesa?

Los debates culinarios dividen España: tortilla con o sin cebolla, desterrar o no el pepino del gazpacho o incluso si la leche se echa antes o después de los cereales. Algo similar ocurre entre quienes dicen mahonesa o eligen la mayonesa como ortografía correcta, pero, ¿cuál de las dos palabras deberíamos utilizar?

Pero la Real Academia de la Lengua Española ya se ha encargado de zanjar este debate. Puede que ya lo supieras, pero las dos formas son válidas para designar la salsa que, según su definición, «se hace batiendo aceite y huevo», por lo que lo ideal sería denominar así la receta que se encuentra sobre estas líneas lactonesa. No obstante, la RAE también especifica que una de las fórmulas es más frecuente que la otra en el lenguaje coloquial y esa es mayonesa, aunque su nombre lo recibiera de Mahón, municipio de la isla de Menorca donde nació en el siglo XVIII.

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