Menú Cerrar

Por qué el pan se pone duro pasados unos días y cómo evitarlo

Por qué el pan se pone duro pasados unos días y cómo evitarlo

Nos encanta el pan. El mundo, y España también, está lleno de «paneros», ese tipo de persona que lo come todo con pan. Todo. Sí, la Organización Mundial de la Salud recomienda el consumo diario de pan, pero sin pasarse. Hay que comer pan, no mucho, pero bueno.

De la pandemia, de su cuarentena, salimos mejores consumidores de pan. Tras tanta levadura y tanto pan casero seguro que va a ser más difícil que nos vendan pan falso; ese pan de mentira que durante décadas ha llenado tiendas, supermercados y, lo que es peor, panaderías y restaurantes del país.

Algo pasó en la transición política de este país que perdimos el gusto por el buen pan. Así, hemos sufrido años de pan industrial que, muchas veces, de pan sólo tenía el nombre. Ignorado, reemplazado por versiones industriales y hasta eliminado de las mesas, el pan vivió una crisis que contagió incluso a los restaurantes.

Por qué el pan se pone duro

Todo lo dicho sirva como contexto para entender por qué una barra de pan se pone dura pasados unos días. El pan malo de hoy en día se endurece antes (después de pasar por su fase chiclosa) porque pasa poco tiempo en el horno… algunas barras apenas lo ven de lejos. El pan de antes pasaba más tiempo en el horno, no todo era la ley del beneficio económico inmediato, y luego aguantaba más tiempo tierno.

«Al estar menos cocida queda un exceso de humedad en la barra que ayuda a que esta pese más, por lo que se obtienen unas barras que están dentro del peso establecido pero utilizando algo menos de harina», explica Alfred López en Ya está el listo que todo lo sabe, su blog para 20 minutos.

Precisamente, ese exceso de humedad que hace que se endurezca y se seque más rápidamente es también la causa de que si ponemos una barra, integral o no, un rato dentro del horno y la calentamos obtendremos pan como si estuviera recién hecho (por eso en ciudades como Madrid los «chinos» de alimentación pueden poner aquel cartel de «pan de horno caliente»). El efecto, claro, dura sólo unos minutos.

Cómo alargar la vida del pan

Para para evitar que el pan se ponga duro pasados unos días, o sea, para alargar la vida del pan, hay pautas. Lo fundamental es mantener su nivel de humedad.

De entrada, debemos cuidar la temperatura. Lo que mejor le va es mantenerlo siempre a temperatura ambiente. Y nada de sol; de sol y de luz. Ambos factores pueden resecarlo. Así que el pan, tapadito y a la temperatura ambiente.

Pero, ¿dónde lo guardamos? Para mantener su humedad importa dónde lo dejamos. Y aquí el pan, producto natural, se entiende mejor con lo natural. Una panera sí, pero no de metal ni plástico o cosa parecida.

Lo mejor es una panera de madera. Y si no tenemos panera natural, lo mejor es meter la barra en una bolsa de papel y ésta en una de tela. Sí, hay que evitar el plástico… salvo que nos guste el pan como chicle.

Cómo resucitar el pan

¿Y meterlo en la nevera? Es verdad que conseguiremos que aguante más, pero a cambio destrozaremos la textura del pan. Otra cosa es que queramos conservar pan porque tenemos mucho y, efectivamente, la comida no se tira. En ese caso lo mejor es cortarlo en rebanadas y ya iremos sacando a demanda.

Para recuperar el pan congelado cabe la posibilidad de utilizar el horno, el microondas y hasta se ha usado un cazo con agua en ebullición. Pero hoy tenemos en casa, ya en la mayoría, un electrodoméstico estupendo para este menester: la freidora de aire. Es lo mejor y más rápido para resucitar unas rebanadas de pan y que parezcan recién salidas de la panadería.

Apúntate a nuestra newsletter y recibe en tu correo las mejores novedades para disfrutar al máximo del placer de comer.

Fuente de TenemosNoticias.com: www.20minutos.es

Publicado el: 2024-03-27 02:00:00
En la sección: 20MINUTOS.ES – Gastronomía

Publicado en Gastronomía

Deja un comentario