desde los orígenes del universo hasta el interior de un agujero negro

La astrofísica y la cosmología, ese apasionante viaje por los rincones más remotos y asombrosos del universo, nos invitan a reflexionar sobre las maravillas y los misterios que habitan más allá de nuestra atmósfera. Estos campos del conocimiento, que explora las grandezas del cosmos en escalas de espacio, energía y tiempo que superan nuestra cotidianidad, nos brinda la posibilidad de entender el universo y, en cierta manera, nuestro propio lugar en él. Todo esto explora la última publicación de la editorial Pinolia con los Principios fundamentales de la Astrofísica, de Miguel Ángel Sabadell. El libro nos guía a través de uno de los viajes intelectuales más épicos posibles, llevándonos a descubrir los exóticos objetos que pueblan el universo y a entender cómo surgieron y las leyes más fundamentales que los gobiernan.

En ocasiones hay cierta confusión sobre qué significa cada uno de estos términos y sobre cuáles son sus diferencias. La astronomía se refiere en general a la rama de la ciencia que estudia el universo y los diferentes objetos que lo pueblan. También suele referirse a la observación de esos objetos, desde la Luna, el Sol o los planetas hasta asteroides, cometas o incluso nebulosas, galaxias, quásares o púlsares. La astrofísica por otro lado sería la parte de la física que explica el funcionamiento interno de dichos astros. La astrofísica por tanto nos ayudaría a comprender los procesos de formación planetaria, de evolución estelar o las propiedades de una estrella de neutrones o un agujero negro. La cosmología, por último, se encargaría de estudiar el universo como un todo, intentando entender su evolución en conjunto y no tanto como un compendio de entes individuales. La distinción entre estas disciplinas muchas veces se desdibuja y por supuesto entre ellas se complementan de muchas formas diferentes.

El Modelo Estándar de la Cosmología

Al estudiar el cosmos, nos enfrentamos a desafíos importantes. Desde la comprensión de la geometría y la evolución del universo hasta el desciframiento de las leyes de la física que lo gobiernan, cada paso que damos en la astrofísica nos acerca más a respuestas sobre quiénes somos y de dónde venimos. Es fascinante pensar que, a pesar de las complejidades y enigmas que presenta, hemos conseguido desentrañar algunos de los secretos del cosmos con una precisión casi inimaginable. Esta rama de la ciencia tiene la peculiaridad de no poder contar con un laboratorio. En general, no podemos reproducir las condiciones presentes en los astros en nuestros laboratorios. No podemos replicar el núcleo de una estrella, los campos magnéticos de una estrella de neutrones o la gravedad de un agujero negro. Por esto mismo es tan importante la observación en la astrofísica, porque es la única forma de recabar información sobre los sujetos de estudio.

Considérese, por ejemplo, el Modelo Estándar de la Cosmología, una síntesis de nuestros conocimientos actuales sobre el universo. Este modelo nos dice que el universo consta de materia atómica, materia oscura y energía oscura en proporciones específicas. Basado en la teoría de la gravedad de Einstein, nos ofrece un mapa de cómo ha evolucionado el universo desde los albores del tiempo. Es un triunfo de la observación y el razonamiento científico, demostrando que, a pesar de las enormes escalas de tiempo y distancia, podemos llegar a comprender los fenómenos cósmicos con gran detalle.

Preguntas aún por responder

Uno de los mayores logros en este campo es el estudio del Fondo Cósmico de Microondas (CMB), una radiación residual del nacimiento del universo. Este fenómeno, que nos proporciona pistas cruciales sobre los primeros momentos del cosmos, se caracteriza por minúsculas variaciones de temperatura que revelan muchísimo sobre la estructura y evolución del universo. Sin embargo, aún quedan muchas preguntas por responder. La naturaleza exacta de la materia oscura y la energía oscura, por ejemplo, sigue siendo un misterio. Estos desafíos impulsan la continua búsqueda de conocimientos y el avance tanto en teoría como en experimentación.

Al abordar este vasto tema, es importante recordar que las escalas de tiempo y distancia en la cosmología son difíciles de comprender. Pero al ponerlas en contexto, como al contar en «miles de millones», podemos empezar a apreciar la inmensidad y belleza de nuestro universo. La cosmología no es solo un campo de estudio; es una invitación a explorar, a cuestionar y a maravillarse ante la grandiosidad del cosmos y nuestro lugar en él.

‘Principios fundamentales de la Astrofísica’, de Miguel Ángel Sabadell

La editorial Pinolia publica este Principios fundamentales de la Astrofísica de Miguel Ángel Sabadell con el objetivo de guiarnos en esa exploración del universo. Para ello nos llevará a adentrarnos en nuestra propia galaxia, llegando hasta el descomunal agujero negro supermasivo que habita en su núcleo para más tarde conocer otras galaxias y cómo éstas acaban conformando el gran tapiz del universo. Pero las galaxias están compuestas de estrellas y de muchas cosas más, por lo que nos sumergimos rápidamente en la evolución estelar para entender cómo nacen y, sobretodo, cómo acaban muriendo los astros que literalmente iluminan el universo. Para concluir este viaje intelectual nos remontaremos a los mismísimos inicios del universo y a aquél Big Bang a partir del cual surgió todo lo demás llegando por último a la propia muerte del universo, un destino inevitable que acabará llegando, dentro de eones.

Y, en exclusiva en nuestra web, no te pierdas un extracto del primer capítulo de este libro.