La brecha de longevidad entre hombres y mujeres se reduce en todo el mundo

El aumento de la longevidad es una tendencia global que se observa en casi todos los países del mundo. Sin embargo, la tradicional brecha en la esperanza de vida entre hombres y mujeres se está estrechando, y aunque las diferencias persisten, se ha observado un leve progreso.

Son las conclusiones de un estudio publicado recientemente por la revista Plos One y realizado por un equipo de economistas y demógrafos españoles, donde han participado investigadores de la Universidad de Alcalá, la Universidad de Barcelona, la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres, y la Universidad de Oxford.

Antes de llegar a estos resultados, los investigadores analizaron si la tendencia es convergente o divergente entre las cifras de mortalidad y longevidad en todo el mundo. “Realizamos un examen exhaustivo a nivel mundial teniendo en cuenta nueve indicadores de mortalidad diferentes en un periodo comprendido entre 1990 y 2030”, explican.

Así, los expertos detectaron una tendencia generalizada ascendente tanto en las cifras de longevidad como en la brecha en la esperanza de vida entre hombres y mujeres. “Se observa una tendencia común al alza constante de en los indicadores de longevidad, así como una reducción progresiva de las disparidades entre sexos y entre grupos de países”, en sus palabras.

Además, este trabajo analiza la evolución histórica que han experimentado todos los países del mundo desde 1999 hasta 2020. Asimismo, también incluyen una proyección de cómo seguiría la tendencia hasta el próximo 2030.

Los científicos distribuyeron a los países en función de esa longevidad. Los lugares con mayor índice de longevidad coinciden con los más desarrollados (países de Europa, Norteamérica, Japón, Australia y Nueva Zelanda) mientras que en segundo lugar se engloban otros en vías de desarrollo (como Rusia, China y algunos de América Latina o el norte de África).

A continuación, le siguen países de Latinoamérica, Siria y el sudeste asiático, mientras que un cuarto grupo comprende a la mayoría de los países africanos. En último lugar se colocaron los países con más baja longevidad entre los que se encuentra Ruanda, Guinea-Bisáu, República Centroafricana, Uganda o Lesoto.

No obstante, también descubrieron que algunos países cambiaron de grupo a lo largo del período estudiado debido a diferentes factores como guerras, el empeoramiento de condiciones socioeconómicas o políticas perjudiciales.

Al mismo tiempo, encontraron un estrechamiento en la brecha de esperanza de vida entre hombres y mujeres. Un cambio incipiente que se debe, según los expertos, a la entrada de las mujeres al mercado laboral y a los cambios en algunos hábitos.

El estudio señala que la brecha entre la esperanza de vida de hombres y mujeres se reduce en los distintos grupos de países, pero se espera que persistan algunas diferencias por factores biológicos. El trabajo menciona que la diferencia entre sexos podría determinarse sobre todo por los estilos de vida perjudiciales de los hombres de clase trabajadora.

Asimismo, se hace referencia a investigaciones que sugieren que el cromosoma Y, asociado con un mayor riesgo de mortalidad y enfermedades relacionadas con la edad, se pierde durante el proceso de envejecimiento en los hombres, mientras que las mujeres lo retienen. Algo que podría explicar por qué persisten las diferencias entre los sexos en longevidad.

Prospección de la esperanza de vida en 2030

Ahora bien, se prevé que la esperanza de vida de los países desarrollados en 2030 sea de 83 años en los hombres y de 86 años para las mujeres. Mientras que, en los países con baja longevidad, proyectaron que, en 2030, los hombres vivirán en promedio 61 años y las mujeres 62 años.

Por tanto, aunque las proyecciones indican una mejora continua en la longevidad, el hecho de que se produzcan eventos inesperados o catastróficos, como guerras, desastres naturales o pandemias, podrían alterar de forma notable estas tendencias.

Con todo, el equipo incide en que los datos sobre la proyección de aquí a 2030, deben tomarse con cautela. Además, aunque los científicos hayan demostrado que la brecha entre hombres y mujeres en esperanza de vida se reduce, es poco probable que se iguale debido a las diferencias fisiológicas y de salud entre los distintos géneros.

Esperanza de vida en España

Según los datos disponibles del Instituto Nacional de Estadística (INE), en 2021, la esperanza de vida en España se situaba en 83,1 años. Se produjo una leve subida de 0,7 años respecto al año anterior.

Por ámbito geográfico, a nivel de comunidad autónoma, los valores más altos correspondieron a la Comunidad de Madrid (84,6 años), la Comunidad Foral de Navarra (84,3 años) y Castilla y León (83,9 años). Según el sexo, la esperanza de vida al nacer es más alta en las mujeres españolas que en los hombres. Las cifras de 2021 revelaron que la esperanza de vida es de 85,8 años para las mujeres y de 80,3 años para los hombres.

Referencias: