Los traidores más grandes de la historia

La historia está llena de acuerdos que no se cumplen, engaños entre quienes se consideraban aliados y, literalmente, puñaladas por la espalda. Hay traiciones que han pasado a la historia por la trascendencia que tuvieron en su momento y permanecen en el imaginario colectivo como uno de los indicativos más evidentes para desconfiar de la gente. Tanto es así que hoy día empleamos expresiones para hablar de una traición que nos vienen heredadas del pasado. A la ya mencionada “puñalada por la espalda” podemos unir una de las más conocidas en la cultura cristiana: “el beso de Judas”. Junto a estas expresiones, hay personajes históricos que también son sinónimo de traidor en la actualidad y, otros muchos personajes legendarios se suman a la lista, pues es común que todas las culturas tengan a un traidor entre sus leyendas y mitos fundacionales. Repasamos algunas de las traiciones más conocidas de la historia.

Efialtes de Tesalia

Es posible que a muchos os suene por la famosa película 300, basada en el cómic de Frank Miller. Efialtes es conocido por traicionar al rey de Esparta, Leónidas, pues se encargó de mostrar a los persas una ruta con la que rodear el paso de las Termópilas, donde los espartanos y sus aliados estaban logrando contener el avance del ejército de Jerjes I. Desde este momento, con las guerras médicas entre griegos y persas (siglo V a. C.), y durante el resto de la Antigüedad, Efialtes fue utilizado por los autores clásicos como ejemplo de traición.

Caín

Hablamos de un personaje mítico en este caso, bíblico para más concreción, pero su presencia en esta lista se antoja necesaria, pues Caín es el traidor, pecador y el fratricida por excelencia del mito fundacional del cristianismo y, por tanto, de la cultura Occidental que configura nuestro mundo actual. Según la Biblia, Caín fue el primogénito de Adán y Eva, y en un arrebato de celos mató a su hermano Abel. Su mito nos ha dejado términos como “cainita” o “cainismo”, que hace referencia al odio contra los allegados.

Bruto y el asesinato de Julio César

En los Idus de marzo, es decir, el 15 de marzo, del año 44 a. C. tuvo lugar el asesinato de Julio César en la curia del Teatro de Pompeyo. Marco Junio Bruto ha pasado a la historia como uno de los protagonistas más famosos del complot organizado para acabar con César, quien estaba acaparando cada vez más poder y se temía que acabara proclamándose rey o emperador de Roma. Junto a Bruto, más de sesenta senadores fueron cómplices del asesinato. La fama de Bruto por encima del resto puede venir de una famosa frase atribuida a César justo antes de morir por las cuchilladas recibidas: “Et tu, Brute?” (¿Tú también, Bruto?), aunque en realidad se trata de una oración escrita por William Shakespeare en su obra Julio César.

Judas

Otro personaje bíblico, aún más relacionado con la traición. Según los evangelios, uno de los pasajes de la Pasión de Jesús tiene a Judas Iscariote como vil protagonista. Judas fue uno de los doce apóstoles, discípulo de Jesús, pero traicionó a su maestro en el Huerto de Getsemaní, donde le dio un beso para indicar a los captores quién era el objetivo a prender. Judas delató a Jesús a cambio de treinta monedas de plata según la Biblia en un relato con un instante, el beso, recreado infinidad de veces en el arte como uno de los ejemplos de traición más conocidos de la historia.

Malinche

Fue la nativa mesoamericana que sirvió como intérprete a Hernán Cortés durante la Conquista de México en el siglo XVI. Es por ello que, posteriormente, el indigenismo y diversas posturas políticas han mostrado a Malinche como la gran traidora que hizo posible la caída el imperio mexica a manos de los castellanos. De esta interpretación nace un término actual como es “malinchismo” que el diccionario de la RAE define como la “actitud de quien muestra apego a lo extranjero con menosprecio de lo propio”.

Robert Ford

La conquista y colonización del Oeste americano es, sin duda, el período histórico más reciente que más leyendas ha generado. A fin de cuentas, volvemos a esos mitos fundacionales que necesita toda cultura y nación, y en este caso asistimos al caso de los Estados Unidos. Robert Ford formó parte de la banda de pistoleros y ladrones del famoso Jesse James, uno de los criminales más buscados por la justicia. Ambos llegaron a tener una relación muy cercana, sin embargo, el 3 de abril de 1882, Ford mató a Jesse James por la espalda y acudió a la justicia para reclamar la recompensa anunciada por acabar con James.