En lo más oscuro y profundo de una cueva de la provincia china de Guizhou vive una especie de pez que no tiene escamas ni color; sí unos ojos diminutos y rudimentarios con los que probablemente no pueden ver nada y un cuerno inusualmente grande que sobresale de la frente, lo que ha hecho inevitable la comparación con la mítica criatura equina.
El pez pertenece al género Sinocyclocheilus del que hay 76 especies conocidas de Sinocyclocheilus y los investigadores descubrieron al pez nadando en una pequeña piscina natural que medía 1,8 metros de ancho y 0,8 metros de profundidad, dentro de una cueva en la provincia montañosa de Guizhou.
Los unicornios sí existen y viven en China
«El género de peces línea dorada Sinocyclocheilus es endémico de China y se distribuye principalmente en las zonas kársticas del suroeste de China, incluidas las provincias de Guangxi, Guizhou, Yunnan y Hubei», explicó Jiang Zhou de la Universidad Normal de Guizhou.
El equipo recogió varios especímenes para llevarlos al laboratorio y examinarlos y, tras analizar su ADN, descubrieron que se trataba de una especie desconocida para la ciencia. Fue bautizado como Sinocyclocheilus longicornus y pertenece a un género de peces que solo se encuentran en China. Algunas especies de este género han evolucionado hasta perder los ojos por completo. Este proceso se llama evolución regresiva, donde una especie perderá características inútiles a lo largo de generaciones. «Estas especies con cuernos se distribuyen en las cuencas de los ríos Nanpanjiang, Beipanjiang y Hongshuihe en la parte superior del río Perla», apuntan los expertos.
Este pez cavernario tiene entre 10 y 14 centímetros y usa lo que parecen pequeños bigotes para orientarse en la oscuridad. Aunque los científicos no están seguros de para qué podrían utilizar estos peces el apéndice en forma de cuerno, creen que podría tener algo que ver con la navegación en su entorno oscuro y lúgubre, ya que las especies que viven en lugares más soleados no tienen estas estructuras en la parte superior de sus cabezas.
«La estrecha distribución, las similitudes morfológicas y las adaptaciones morfológicas a los ambientes de las cuevas, como la degeneración o pérdida de los ojos y las escamas del cuerpo, han hecho que la clasificación del género sea difícil y, a menudo, controvertida. Las especies de Sinocyclocheilus han desarrollado ojos y estructuras parecidas a cuernos en la parte posterior de la cabeza de forma variable», agregaron los investigadores en su estudio publicado en la revista ZooKeys.
Sinocyclocheilus longicornus
El equipo descubrió que la nueva especie no estaba estrechamente relacionada con otras especies de cuernos largos del mismo género y sugiere que comparar las condiciones ambientales con estas otras especies podría revelar para qué se utiliza el cuerno. La mayoría de las especies de Sinocyclocheilus (incluida S. longicornus) también tienen un órgano llamado línea lateral que está formado por células sensibles que recorren su cuerpo. Este órgano puede detectar cambios en la salinidad, temperatura y presión del agua, por lo que no sería necesaria un cuerno para detectar esos factores ambientales.
Mitología
Los orígenes del mito del unicornio se remontan a las antiguas civilizaciones del valle del Indo y Mesopotamia, alrededor del año 3000 a.C. En estas culturas, los unicornios aparecían representados en sellos y esculturas, a menudo asociados con la divinidad y la realeza. Los antiguos griegos también contribuyeron a la mitología del unicornio. Cuando llegó la época medieval, el unicornio adquirió un significado religioso, especialmente en la iconografía cristiana. Solía presentarse como un símbolo de pureza y gracia, y se creía que el cuerno tenía el poder de curar enfermedades.
En las culturas orientales, particularmente en China y la India, el unicornio (Qilin en China y Karkadann en Persia) era visto como una criatura de buen augurio. El Qilin chino, aunque diferente en apariencia del unicornio occidental, se consideraba una criatura divina que aparecía durante el reinado de un gobernante benevolente o tras el nacimiento de un futuro sabio.
Referencias:
- C. Xu et al. 2023. Sinocyclocheilus longicornus (Cypriniformes, Cyprinidae), a new species of microphthalmic hypogean fish from Guizhou, Southwest China. ZooKeys 1141: 1-28; doi: 10.3897/zookeys.1141.91501
- Li, P., & Yang, J. (2019). Complete mitochondrial genome and phylogenetic analysis of Sinocyclocheilus microphthalmus (Cypriniformes: Cyprinidae). Mitochondrial DNA. Part B, Resources, 4, 3094 – 3095. https://doi.org/10.1080/23802359.2019.1667274.
- Luo, F., Huang, J., Shi, G., Luo, T., Liu, J., & Wen, Y. (2019). Complete mitochondrial genome of Sinocyclocheilus yishanensis (Cypriniformes: Cyprinidae) and phylogenetic position. Mitochondrial DNA Part B, 4, 1259 – 1260. https://doi.org/10.1080/23802359.2019.1591223.
- Wen, H., Luo, T., Wang, Y., Wang, S., Liu, T., Xiao, N., & Zhou, J. (2021). Molecular phylogeny and historical biogeography of the cave fish genus Sinocyclocheilus (Cypriniformes: Cyprinidae) in southwest China.. Integrative zoology. https://doi.org/10.1111/1749-4877.12624.
Fuente de TenemosNoticias.com: www.muyinteresante.es
Publicado el: 2023-11-04 09:00:00
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