Condenado a cadena perpetua el policía británico acusado de extorsión sexual a menores en las redes | elperiodico.com

El exoficial de policía británico Lewis Edwards ha sido condenado a cadena perpetua por el chantaje sexual a más de 200 menores a través de las redes sociales. El exagente chantajeó y amenazó a niñas menores de edad para que le enviaran fotos explícitas de ellas mismas en Snapchat cuando tenía 24 años y este miércoles ha sido condenado a cadena perpetua.

Cuando fue detenido, el acosador estaba en posesión de más de 4.500 imágenes indecentes de niñas y llegó a admitir un total de 160 cargos de abuso sexual infantil y chantaje.

Según se ha podido saber tras la investigación y las declaraciones de las víctimas, el oficial de policía de Gales del Sur envió mensajes a 210 niñas de entre 10 y 16 años desde noviembre de 2020 hasta febrero de 2023 y se encontraron imágenes de 207 de ellas en sus dispositivos.

BREAKING: Assistant Chief Constable Daniel Richards is «shocked and sickened» at the news that former police officer Lewis Edwards has admitted more than 100 sexual offences against children.

He adds Edward’s «vetting was clear» when he joined the force.https://t.co/g1lnNepPFR pic.twitter.com/GrGJNMUNHr

— Sky News (@SkyNews) 25 de octubre de 2023

Abuso de poder y crueldad

Edwards ha sido condenado a cadena perpetua con una pena mínima de 12 años por la jueza Tracey Lloyd-Clarke. Según aseguró la jueza, el acusado «no sólo obtuvo gratificación sexual de su delito, sino que también disfrutó del poder y control que tenía sobre estas jóvenes».

Durante la audiencia se describió su comportamiento como «cruel y sádico» y la jueza agregó que representaba un alto riesgo de peligro para los niños.

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Edwards usó una foto de perfil de un adolescente para engañar a sus víctimas para que enviaran imágenes explícitas, y una de ellas decía que durante las videollamadas Edwards se sentaba en la oscuridad, mostrando solo una parte de su rostro.

Edwards les dijo a las jóvenes que se tomaran fotografías desnudas, a veces vistiendo solo prendas de su uniforme escolar, y que cometieran actos sexuales. Cuando intentaron ignorar sus demandas, las amenazó y dijo que compartiría las imágenes o que haría daño a sus familias. Tales fueron las amenazas que llegó a decirle a una víctima de 12 años que iría a su casa «a dispararle a sus padres».