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Las dificultades de la ofensiva de Ucrania quedan patentes en sus primeros compases | elperiodico.com

Las dificultades de la ofensiva de Ucrania quedan patentes en sus primeros compases

Ni guerra relámpago ni nada parecido a un rápido desmoronamiento de las fuerzas rusas similar al acaecido en septiembre en la región de Járkov. La contraofensiva ucraniana ha superado su primera semana con modestos avances de sus militares en varios puntos del frente, pero también algunos reveses, como la destrucción de una decena de blindados y tanques occidentales suministrados a Ucrania en las últimas semanas. «Es muy difícil avanzar», reconocía esta semana la viceministra de Defensa ucraniana, Hanna Maliar. A diferencia de lo que sucedió en la segunda mitad del año pasado, cuando Kiev logró recuperar vastas extensiones de territorio con sorprendente rapidez, ahora le espera un trago mucho más complicado, después de que los militares del Kremlin aprovecharan los últimos seis meses para levantar más de 1.000 kilómetros de líneas defensivas y fortificaciones en los territorios ocupados.

La información llega a cuentagotas desde el país eslavo, donde sus dirigentes han impuesto el silencio operativo para no dar pistas al Kremlin sobre la ofensiva con la que pretenden recuperar nuevamente territorio tras meses de escasos avances en el frente. Hasta este viernes, Kiev había reconquistado ocho pequeñas localidades, una extensión aproximada de unos 100 kilómetros cuadrados, según varias estimaciones. Todos en el sureste, donde se concentran estos primeros compases de tanteo. «Los ucranianos están tratando de destruir puestos de mando, centros logísticos de abastecimiento para la tropa y depósitos de munición con el fin de debilitar las capacidades militares rusas», asegura Anthony King, profesor de Estudios Bélicos de la Universidad de Warwick. «Si no lo consiguen, será difícil que puedan romper las líneas defensivas del Kremlin«. 

Por el momento, la contraofensiva avanza sobre tres ejes, dos en Donetsk y uno en Zaporiyia, la más fortificada de las cuatro regiones ocupadas parcialmente por los rusos. El primero parte desde Velika Novosilka (Donetsk) hacia el sur, en dirección Mariúpol. Es allí donde más terreno han ganado las tropas de Kiev, a pesar de que sus dirigentes acusaron esta semana a Moscú de tratar de frenar su avance en la región con la voladura de una pequeña presa en río Mokri Yali. Poco se sabe de sus consecuencias, aunque en cualquier caso serían menores que el desastre humanitario y medioambiental causado por la destrucción de la hidroeléctrica de Jersón hace poco más de una semana.

Bradleys y Leopards destruidos

Un segundo eje de la ofensiva se concentra en torno a Orikhiv, algo más al suroeste y ya en la provincia de Zaporiyia. Todo indica que la pretensión ucraniana sería avanzar desde allí hasta las ciudades de Tokmak y Melitopol, la ruta más rápida para tratar de romper el corredor territorial bajo control del Kremlin que comunica Crimea con el Donbás. Pero también se antoja una de las rutas más difíciles, franqueada como otros tramos del frente por tupidos campos de minas, fosos antitanque o barreras de dientes de dragón separadas entre sí, un sistema defensivo que los expertos han definido como el más extenso desde la Segunda Guerra Mundial. 

Fue en esta misma ruta, a unos 8 kilómetros de Orikhiv, donde aparecieron vapuleados en las cunetas una decena de tanques Leopard de fabricación alemana y blindados Bradley estadounidenses, parte de las últimas remesas de amamento pesado donado por Occidente. Un golpe de efecto celebrado después por Vladímir Putin, quien llegó a decir que Ucrania habría perdido 160 tanques desde el inicio de la contraofensiva, una cifra negada desde Kiev. «El oponente no ha tenido éxito en ninguna zona y han sufrido muchas perdidas», dijo el presidente ruso durante una reunión con blogueros militares.

El tercer eje bascula en torno a Bajmut, en el noroeste de Donetsk, la ciudad conquistada por las tropas rusas en mayo, ahora completamente en ruinas. Si bien los ucranianos han logrado recuperar algunos kilómetros en sus inmediaciones es probable que más que tratar de recuperarla busquen solo fijar al nutrido contingente ruso que defiende la región. «No creo que el gran ataque ucraniano acabe viniendo por alguno de estos ejes», dice King. «En esta primera fase lo que busca Ucrania es tantear las defensas rusas para desenmascarar sus vulnerabilidades y tratar de encontrar los puntos débiles por los que avanzar eventualmente».

Puntos débiles en las defensas rusas

Una forma de hacerlo, escribe el analista del Royal United Services Institute, Jack Waitling, consistiría en forzar a Rusia a desplazar a sus reservistas desde la retaguardia a la primera línea de su sistema defensivo. «Una vez se adelanten esas tropas, será más fácil identificar los puntos débiles en las líneas rusas, donde una ruptura no se topará con nuevas fuerzas reposicionadas», sostiene Waitling. Nada indica que las fuerzas ucranianas hayan entrado todavía en contacto con las primeras barreras defensivas rusas, aunque sus mandos militares han informado de que tratan de desminar algunas zonas para proceder al avance. Sin superioridad aérea para proteger a sus brigadas mecanizadas, los analistas predicen numerosas bajas por su aparente vulnerabilidad ante la artillería y la aviación rusa.

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En cualquier caso, Ucrania no ha puesto todavía sobre la mesa todas sus bazas. De la docena de brigadas mecanizadas entrenadas en los últimos meses por los países de la OTAN, solo tres estarían por el momento participando en la contraofensiva, según los expertos. Una brigada cuenta habitualmente con unos 3.500 o 4.000 efectivos. Lo que está claro es que la ofensiva será larga. Y pocos creen que pueda bastar para desocupar las regiones en manos rusas antes de final de año, a menos que se produzca un improbable colapso de las tropas del Kremlin.

«No hay duda de que esta operación llevará tiempo», escribía esta semana el profesor de Estudios Estratégicos de la Universidad de St Andrews, Phillips O’Brien. «Ucrania está tratando de hacer algo que no se ha hecho con éxito nunca antes. Están tratando de ejecutar una ofensiva a gran escala con vehículos acorazados, pero sin superioridad área y contra un enemigo que cuenta con un abundante arsenal de armas defensivas».

Fuente de TenemosNoticias.com: www.elperiodico.com

Publicado el: 2023-06-17 09:00:38
En la sección: El Periódico – internacional

Publicado en Internacionales