Rusia conmemora el aniversario de la anexión de las cuatro regiones que solo controla parcialmente | elperiodico.com

Este sábado hace un año que Moscú incorporó a su territorio para engradecer aún más sus fronteras. La anexión, sobre el papel, es tan indiscutible que en todo tipo de mapas rusos, desde los meramente decorativos hechos de madera hasta los de Yandex, el Google ruso, o los de los libros de texto, incluyen las regiones ucranianas de Jersón, Zaporiyia, Donetsk y Lugansk. Sobre el papel, esas regiones son indiscutiblemente rusas, pero la realidad arroja un escenario de dudas y contradicciones que muestran que no es exactamente así.

El ejemplo más claro está en la región de Jersón. En este territorio, la capital homónima está bajo control ucraniano aunque, en los mapas, Rusia no duda en añadirlo como parte de su territorio. Escenas parecidas se repiten en las otras tres regiones. En un primer momento, Moscú buscó ganarse a la población local e hizo bandera del lema «Rusia estará aquí para siempre«, pero tras el avance de la contraofensiva ucraniana, el Kremlin se ha visto obligado a renunciar a algunas zonas de estas regiones. Lejos de optar por una desescalada bélica, Rusia prepara a más hombres que podrán ir a luchar en el futuro en Ucrania. El mismo presidente ruso Vladímir Putin firmó este viernes un decreto para movilizar nuevamente a 130.000 jóvenes para hacer el servicio militar, jóvenes entre los que también figuran los ciudadanos de estas regiones ucranianas bajo control administrativo ruso. Las Fuerzas Armadas rusas prometieron que estos reclutas no serán enviados al frente, cuyo rango de edad oscila entre los 18 y 27 años.

El 8 de marzo de 2022, el presidente ruso prometió a las mujeres que no enviaría a sus hijos, maridos, hermanos e hijos a luchar a Ucrania. Aún así, a finales de septiembre de ese mismo año, Rusia llamó a sus filas a miles de hombres que deberían luchar en el frente de Ucrania, mayoritariamente provenientes de Siberia y el Cáucaso.

Día para recordar

Para la celebración del aniversario de la anexión, desde el Kremlin se preparó un concierto-miting de exaltación patriótica en la Plaza Roja de Moscú, enarbolado bajo el lema de “un país, una familia, una Rusia”. El medio opositor Meduza – reconocido por las autoridades rusas como agente extranjero – señaló su parecido con el lema de la Alemania nazi, «un pueblo, un Reich, un Führer».

Desde el escenario, se recitaron poemas patrióticos y proclamas contra Ucrania, e incluso uno de los participantes leyó el siguiente texto ante la multitud presente: “Los renacuajos estaban saliendo del cascarón. La esvástica fue implantada en el cerebro de los animales más jóvenes. Haciendo sus hazañas a escondidas, ensalzando al demonio Bandera. Y los niños empezaron a querer bigotes bajo la nariz, y las niñas empezaron a usar bragas más finas ”

«Одна страна, одна семья, одна Россия» — под таким лозунгом проходит этим вечером концерт на Красной площади. Рядом с Кремлём отмечают годовщину аннексии украинских территорий. Со сцены звучат песни и «патриотические» стихи, в которых, в частности, говорится о неонацистах,… pic.twitter.com/xda010XwbR

— ЭХО (@echofm_online) 29 de septiembre de 2023

A pesar de la presencia de miles de personas, no se aplicó la ley que evita las aglomeraciones para luchar contra el covid-19 — que sí se aplica a las concentraciones opositoras– a pesar de que Rusia lleva cerca de 3 años sin implementar medidas parecidas en otros contextos como discotecas, estadios de fútbol o viajes dentro y fuera del país, entre otros. El sábado 30 de septiembre, conocido ahora como Día de la reunificación de Rusia con Donetsk, Lugansk, Zaporiyia y Jersón, está previsto que se celebren actos en todo el país euroasiático.

Reconocimiento internacional

Noticias relacionadas

Cuando Moscú decidió dar un volantazo y anexionarse estas regiones de Ucrania en unos referéndums condenados por la comunidad internacional, pocos países se tomaron en serio la medida. Únicamente dos estados, apoyos habituales de Rusia, reconocieron la anexión como válida. Corea del Norte, un país con el que Moscú ha estrechado vínculos recientemente y Siria, el mayor aliado del Kremlin en Oriente Medio, han sido los únicos que hicieron piña con Moscú. Otros aliados tradicionales de Rusia como China, India, Irán, Armenia, Kazajistán o Bielorrusia no se han posicionado en este aspecto, aunque han apoyado al Kremlin en otros temas de política internacional.

La medida fue fuertemente condenada en Occidente, que ya criticó la anexión de la península de Crimea en 2014 y respondió a ella con sanciones internacionales. Una de las respuestas más sonadas a las votaciones de 2022 fue el referéndum paródico que se hizo en República Checa para anexionarse el enclave ruso de Kaliningrado bajo el nombre de región de Kralovec.