LONDRES (AP) – El principal oficial de policía de Irlanda del Norte renunció el lunes después de una serie de controversias que afectaron a la fuerza policial, incluido lo que él describió como una violación de datos a gran escala. violación de datos.
La Junta de Policía de Irlanda del Norte confirmó que Simon Byrne ha renunciado como jefe de policía, con efecto inmediato.
Byrne enfrentó crecientes presiones para renunciar desde que los datos personales de todos los miembros activos de la fuerza policial se publicaron por error el mes pasado en respuesta a una solicitud de información pública.
Los detalles incluían los apellidos, iniciales, ubicación y departamentos de aproximadamente 10,000 oficiales y otros miembros del personal. La policía dijo que los republicanos irlandeses disidentes afirmaban tener información sobre los oficiales de policía después del incidente.
La violación fue especialmente sensible debido a la delicada situación de seguridad en Irlanda del Norte, que todavía está tratando de superar décadas de violencia sectaria conocida como «Los Problemas». Veinticinco años después de un acuerdo de paz que puso fin en gran medida a la violencia, muchos oficiales de policía continúan protegiendo sus identidades debido a las amenazas continuas de miembros disidentes de las comunidades republicana y unionista.
Byrne enfrentó más escrutinio la semana pasada cuando un juez del Tribunal Superior dictaminó que se disciplinó ilegalmente a dos oficiales de menor rango por un arresto realizado en un evento conmemorativo de «Los Problemas» en 2021.
El juez dijo que los oficiales fueron disciplinados para aplacar cualquier amenaza de que Sinn Féin pudiera retirar su apoyo a la policía en Irlanda del Norte. Sinn Féin ha insistido en que no hubo tal amenaza.
Byrne había dicho que no renunciaría y que estaba considerando apelar el fallo del tribunal.
Pero en un comunicado emitido el lunes, Byrne dijo que era «tiempo de que alguien nuevo» liderara la fuerza.
«Los últimos días han sido muy difíciles para todos los involucrados», dijo. «Independientemente de lo correcto o incorrecto, ahora es el momento de que alguien nuevo lidere esta organización orgullosa y resuelta».
El líder del Partido Unionista Democrático, Jeffrey Donaldson, dijo que la renuncia de Byrne proporcionaba una oportunidad para que las autoridades reconstruyeran la confianza perdida con el público y dentro de la fuerza policial.
«La policía justa e imparcial es tan fundamental para el progreso en Irlanda del Norte como las instituciones políticas plenamente funcionales que operan de manera transcomunitaria», dijo Donaldson.
La Federación de la Policía de Irlanda del Norte, que representa a los oficiales de rango y archivo, dijo el mes pasado que había recibido numerosas llamadas de oficiales preocupados después de la violación de datos. Liam Kelly, presidente de la federación, dijo que la moral en la fuerza nunca había sido tan baja.
«Quienquiera que suceda al Sr. Byrne tiene una montaña que escalar para abordar las deficiencias culturales, reconstruir la confianza y restaurar la credibilidad», dijo Kelly.