✅ Internacionales – Las mujeres tienen más probabilidades de perder trabajos debido a la inteligencia artificial

La revolución puede que no se televisada, pero será automatizada. Y según un nuevo informe, no llegará por igual a todos los empleos: las mujeres tienen más probabilidades de perder sus empleos frente a la inteligencia artificial que los hombres.

El informe, publicado esta semana por el Instituto Global McKinsey, proyecta que casi un tercio de las horas trabajadas en Estados Unidos podrían ser automatizadas para finales de la década. Gracias a la automatización y a la inteligencia artificial, 12 millones de personas necesitarán cambiar de empleo, y las mujeres serán 1.5 veces más propensas a tener que buscar nuevos roles.

Esto se debe a que las mujeres representan una mayor proporción de la fuerza laboral en sectores de baja remuneración, como trabajos de oficina y servicio al cliente, que el informe estima que disminuirán significativamente gracias a la automatización y a la inteligencia artificial. Según el informe, las personas en empleos de baja remuneración podrían tener hasta 14 veces más probabilidades de tener que cambiar de ocupación que aquellos que tienen los salarios más altos.

Entre aquellos que también corren el riesgo de tener que buscar nuevos empleos se encuentran los trabajadores afroamericanos e hispanos, que están «altamente concentrados» en algunos de esos empleos en disminución, junto con los trabajadores sin título universitario. Y lo más importante, es probable que esos trabajadores necesiten adquirir nuevas habilidades o capacitación antes de poder trasladarse a nuevas industrias.

La gente está cambiando de empleo a tasas exponenciales

Desde 2019, se han producido enormes aumentos en los cambios de empleo en el mercado laboral estadounidense (o cuando una persona cambia de una ocupación a otra). Según McKinsey, se han contabilizado aproximadamente 8.6 millones de cambios de carrera, un aumento del 50% con respecto al período anterior de tres años. La mitad de esos 8.6 millones de cambios de empleo, según el informe, fueron en industrias de baja remuneración, incluyendo servicios de alimentación, servicio al cliente, apoyo de oficina y producción.

«La demanda de trabajos de servicio de baja remuneración continúa, pero menos trabajadores aceptan estos roles», afirma el informe. Se han creado más empleos de alta remuneración, aproximadamente 3.5 millones de empleos que pagan $57,000 o más al año, pero no está claro si los empleados con salarios más bajos pudieron ascender a puestos mejor remunerados o si estos empleos fueron ocupados por trabajadores nuevos en el mercado laboral.

¿Quién se beneficia de la inteligencia artificial? Los trabajadores de cuello blanco, por supuesto

Mientras tanto, aunque las proyecciones indican que la IA y la automatización reducirán algunas industrias, McKinsey también sugiere que podría acelerar el crecimiento de otras, especialmente para los trabajadores del conocimiento. «Vemos que la IA generativa mejora la forma en que los profesionales de STEM, creativos, empresariales y legales trabajan en lugar de eliminar una cantidad significativa de empleos», escribe.

Comparado con otro informe publicado esta semana, esta vez por el Centro de Investigación Pew, se observa que los trabajadores de cuello blanco son optimistas sobre cómo la IA los ayudará. Aproximadamente una quinta parte de todos los trabajadores estadounidenses tienen una alta exposición o, en otros términos, realizan trabajos que pueden ser desempeñados por la tecnología de inteligencia artificial. Aquellos en trabajos más expuestos a la IA, generalmente los de mayor remuneración, suelen afirmar que la tecnología les ayudará más que perjudicarles.

Los defensores argumentan que la IA puede mejorar el trabajo en lugar de reemplazarlo, por lo que los equipos pueden dedicar más tiempo a pensar de forma creativa, estratégica o colaborativa. También hemos visto los errores de la IA cuando se utiliza en lugar de las personas, desde abogados que presentan casos inventados hasta medios de comunicación que publican artículos llenos de errores. La inteligencia artificial no está preparada para ser tu abogado, médico o arquitecto, al menos por ahora.

Entonces, ¿cómo podemos asegurarnos de que los trabajadores de menor remuneración no se queden rezagados?

Una pregunta apremiante es cómo podríamos extender algunos de esos beneficios a las personas cuyos empleos se proyecta que desaparezcan debido a la automatización. McKinsey ve cierto optimismo y urgencia al respecto. «La demanda creciente y la escasez de mano de obra obligaron a muchos empleadores a considerar a candidatos no tradicionales con potencial y capacitarlos si no tenían experiencia directa», dice el informe.

Pero en última instancia, los empleadores y el país en general deberán adoptar este enfoque equitativo y ofrecer más capacitación, desarrollo y oportunidades para que los empleados accedan a puestos bien remunerados. Solo así llegaremos a un futuro donde todos los trabajadores puedan disfrutar de las ventajas de la inteligencia artificial en lugar de ser eliminados por ella.