Luego de 500 días, trabajadores universitarios aguardan una respuesta del TSJ

Los trabajadores del sector universitario continúan a la espera de una respuesta del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), vinculado a la administración de Nicolás Maduro, dado que desde hace más de 500 días interpusieron ante el organismo un recurso sobre el instructivo de la Oficina Nacional de Presupuesto (Onapre).

“Ya son 505 días”, así lo manifestó el presidente de la Federación Nacional de Sindicatos Obreros de la Educación Superior en Venezuela (Fenasoesv), Adrián Bolívar.

Las autoridades universitarias aseguran haber recibido un mensaje a través de la aplicación Telegram, el 3 de marzo de 2022, que informaba sobre un instrumento relacionado con el ajuste del sistema de remuneración de la administración pública.

De acuerdo al dictamen emitido por el TSJ en agosto de 2022, supuestamente este instructivo no existe.

El tribunal aseguró que se trató de una “matriz comunicacional que se ha venido creando en los últimos meses, pretendiendo imputar a la ONAPRE y, en fin, al Estado venezolano, un acto cuya existencia no ha sido demostrada y, por ende, mucho menos su autoría, con lo cual, a pesar de su inexistencia, se ha utilizado para generar malestar en ciertos sectores de la colectividad, crear conflicto social y atentar contra valores y principios cardinales previstos en nuestro orden constitucional”.

Y es que a través de esta sentencia, el magistrado Malaquías Gil declaró inadmisible el recurso contencioso administrativo de nulidad y amparo cautela, todo ello por la inaxistencia del acto administrativo como un documento fundamental de la demanda, destaca Crónica Uno.

Sin embargo, Bolívar indicó que los trabajadores aseguran que ese instructivo se continúa aplicando, y sostienen que es más destructivo que nunca.

De la misma manera manifestó que las autoridades manifiestan una cosa a la opinión pública, sin embargo, en la realidad hacen otra cosa.

“Dicen que el instructivo es inexistente, pero por la vía de los hechos lo están ejecutando. A las universidades les tienen un filtro, no pueden incluir ni las horas extra de los trabajadores”, destacó.