▷ #OPINIÓN Caraduras, secuaces, cómplices, coautores y encubridores… #2Nov

«De la elección de nuestros amigos,
depende nuestro buen nombre».
John Gay.

Deberían estar avergonzados, pero parasitariamente están enamorados de su jefe el coronel psicópata porque junto a él comparten negocios sucios e ilícitos intereses comunes, en ningún momento marcan distancia y por el contrario participan del mismo desprestigio y el mismo deshonor. No tienen amor propio y no cuidan su imagen.

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Dime con quién andas y te diré quién eres. Eres el promedio de las 5 personas que te rodean, es una de las frases más populares de Jim Rohn, empresario estadounidense, autor y orador motivacional, fuerte influencia de personalidades del desarrollo personal.

Evocando un pensamiento de Ralph Waldo Emerson, no podemos olvidar el caso de Escobar, porque “El destino de quienes han delinquido es inexorable. Ya no podrán nunca ocultar su pasado: Toda la tierra les es de vidrio.”

¡Toma por tanto conciencia y no te hagas el pendejo de quienes junto a ti integran tu entorno laboral en la institución que parasita el coronel psicópata! Tú tienes perfecta conciencia de donde cojea cada cual. En el sentido de que has adquirido pensamientos, estilos de vida, reacciones, visiones, acciones y todo lo que estas personas transmiten, heredan e intercambian contigo que también formas parte activa de dicho promedio. Esa es la genética institucional que ha aportado el coronel psicópata. Es como el enamoramiento por proximidad, donde entre más juntos permanecen más se gustan y más se parecen. Entonces te gusta tu equipo delincuencial y lo rata que es el coronel psicópata, porque tu caja axiológica está alterada, no tienes bien cimentados los principios y valores morales, sino que disfrutas morbosamente de todo el caos institucional, porque te deja ganancias sucias.

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Al menos que seas un investigador social, un psicólogo o sociólogo u otro profesional de las ciencias sociales encubierto; verbigracia para recopilar, analizar y divulgar información tendente a exponer entornos corruptos y aportar soluciones; o que seas un profesional haciendo un estudio para publicarlo para propender a la sana política social; ¿Entonces qué justifica que estés ahí?, en la mesa oval con el coronel psicópata, el doctor fraude, el camaleón de la corrupción, la bruja Theodora, el idiota moral, el felón narcisista, el militar nunca más ascendido, que es la corrupción en pasta, practicante del laxismo, el voyerista visual y auditivo, el licántropo satanista y sádico megalomaníaco, depredador social y sexual; que entre otras insanias, trastornos y síndromes, lo ponen en evidencia en su trastorno explosivo intermitente y su conducta intermitente, como sus conductas desadaptativas. Desde luego que si tu justificación para estar en el equipo del coronel psicópata haciendo mella del prestigio institucional y no para fortalecer la misión, la visión, los fines y los objetivos de la empresa; sino que mantienes un negocio ilícito con este militar nunca más ascendido, que te deja corromper y corromperte porque ambos y todos tienen sus intereses inconfesables, luego evidentemente eres el orín y la mierda de la misma fétida cloaca. Y aunque no lo entiendas porque tienes “la cabeza hueca y el espíritu altanero”, porque eres un o una analfabeta espiritual, tu alma también se ensucia estando allí y peor aún, rindiéndole pleitesía al tío negro, a la pestilencia que practica la nigromancia y concelebrante de misas negras.

Si tu entorno es inmoral, antiético, violador de las leyes, sádico, corrupto, déspota, pedante y jactancioso, sin honor, incoherente entre la misión de la institución y lo que realmente sale a la sociedad, incongruente entre lo que dicen ser sus integrantes y lo que son ciertamente, y tu permaneces atornillado ahí con “esa clase de gente”, indudablemente tú eres tan sucio y degradado como ellos. Si es un entorno deshonesto, extremadamente enviciado, corrompido al extremo y otros tantos disvalores o situaciones consideradas como «sumas de antivalores» a tu vida, a tu trabajo y a tu alma; sin lugar a equivocaciones tú eres una de esas personas, que se imitan entre sí en las depravaciones morales, éticas, legales; porque dime con quién andas y te diré quién eres. “Porque vergüenza y virginidad cuando se pierden es para la eternidad”.

Si la percepción de tu «entorno laboral» es negativa, llena de traiciones, celadas y emboscadas; que persigue siempre destruir a otros para consumar la corrupción, la maldad y los delitos simulados de procedimientos legales; además eres traficante de la hipocresía porque esa es tu naturaleza o la despliegas porque la copiaste del coronel psicópata; si en tu entorno laboral la práctica de las perversiones están a la orden del día y las concibes como “normales” y positivos para ti, porque tú tienes tus negocios y también extorsionas a los usuarios y eres connivente en la entrega de documentos ilegalmente ; entonces tú formas parte del problema , tú eres uno de ellos. Eres engranaje de las pestilencias que enlodan el prestigio de la institución y destruyen la imagen del “esprit de corp”.

La Psicología ha probado que el ser humano aprende por sociabilización, que la educación, la familia y los amigos, transfieren «modelos de pensamiento» que crean paradigmas y luego, utilizamos estos conceptos para tomar decisiones. De tal forma que si tú formas parte de un grupo corrompido y corrupto, de delincuentes antes agazapados o de bajo perfil que ahora ya no guardan ni siquiera las apariencias porque están en absoluta depravación; entonces tú eres un corrupto, delincuente y extorsionador al igual que el coronel psicópata, cometiendo un sui generis agavillamiento en contra de la institución y de sus usuarios, porque son una banda con objetivos delictivos y se han organizado voluntariamente con un fin en común, que es la comisión de hechos punibles en ocasión a los cargos que ostentan y en razón de la fachada de la institución, porque ustedes se han asociado para cometer delitos.

De tal manera que si tu entorno es corrupto, tus acciones y tu reputación por ósmosis son un charco de desprestigio y deshora. Es mentira que tú te mantienes allí con el coronel psicópata por amor al arte. No, tú te mantienes allí porque también eres corrupto y estás haciendo corrupción y te vales de esa posición circunstancial como fachada para aparentar corrección, pero tú principal finalidad es depredar en cayapa de la institución, porque los burros del mismo pelo cuando se ven se saludan. Y si estás entre ellos eres como ellos, eres de ellos. Son la misma podredumbre, el mismo tejido cancerígeno.

A veces son doce, a veces son más contándote a ti y a otros sodomizados que se sientan en la mesa oval a rendirle pleitesía al coronel psicópata y a escuchar sus discursos amañados, disfrazados de honestos, desgastados porque no tienen nada que aportar que no sean su planes repetitivos medularmente corruptos con imagen de inofensivos, insanos y siniestros conocidos por todos para engañar pendejos, llenos de la misma intención tóxica, donde el coronel narcisista y satanista se auto exalta y tiende la red donde se enriquece con dólares provenientes de delitos porque el equipo coadyuva la corrupción y la extorsión , se lo permite y lo protege.

Son ustedes cómplices, coautores y encubridores de los delitos que día a día se cometen en la institución y luego no se excusen diciendo que fueron engañados, porque no se engaña a quien se sabe engañado. Si andas con el coronel psicópata, entonces eres un parásito, delincuente, corrupto y extorsionador igual que él. Porque siendo vox populi y conocido por todos en la institución que él extorsiona a los usuarios con la complicidad absoluta de algunos jefes, entre ellos Lesbia Carlota y Abacaxi el gozón, Martínez y González, la Calderona, el Putativo, Sussana, entre otros discípulos de maldad.

Cuando te preguntas acerca de quienes están rodeándote en este momento en tu vida y específicamente en tu vida laboral, antes de empezar con la lista y nombrar uno por uno a los integrantes de tu entorno, sugiero evaluar aspectos importantes sobre la consecuencia de tus elecciones, rutinas, acercamientos y resultados de la sociabilización que practicas. ¿Te gusta la imagen que observas de ti?

Aunque caracterizar a cada uno de los monos voladores, coautores, cómplices y encubridores del coronel psicópata, será objeto de otro epígrafe; preliminarmente empecemos con Lesbia Carlota la que recoge el dinero y amenaza a los usuarios de no lograr sus metas sino “se bajan de la mula” con el peaje en dólares que impone el narcisista cada mañana, según los caprichos y las necesidades creadas y groseras suyas y de su barragana Isabel. ¿Además de enamorar y hacerse novia de las usuarias, cuál es el papel digno de emular que desempeña la gordita Lesbia Carlota en la institución si sabemos que recoge las extorsiones para el coronel? Ella es parte del equipo de los monos voladores del psicópata. ¿Te gusta su estilo y la reputación que tiene y la imagen de la que te embadurna como integrante que eres del equipo del coronel y que por ende transfiere a todos ustedes? ¿Cuándo vas a marcar distancia con ella?

Y si la gente es el promedio de las cinco personas que la rodean, entendemos la razón por la cual el coronel se hace rodear y le gusta la cercanía de Abacaxi el gozón y sus catarinas Martínez y González, así como al narcotraficante Escobar le placía la droga. Un asunto con el impulso depredador del coronel psicópata, su bisexualidad y su erotopatía se aborda en otra epístola. ¿Te gusta la reputación de estos últimos y que te confundan con ellos y la imagen que transmiten al equipo?

Y sabías que Alejandro, junto a su mujer se roba la comida de la cocina y por eso se mantiene en la mesa oval por distraer con su uniforme y su falsa honestidad, un ceremonial donde se exalta la persona de un coronel corrupto y sin dignidad. Alejandro, un hombre mayor formado en una institución en otrora por todos admirada, pero que ahora este gendarme se arrodilla al psicópata y se sienta al lado de Abacaxi el gozón. Causa extrañeza que un hombre de la reciedumbre de Alejandro y de quien tenía las mejores opiniones, enlode sus años dorados y su prestigio por ser connivente en los delitos del coronel psicópata en vez de ponerle los ganchos y hacerlo preso; pero eso es explicable sólo en un escenario depravado en el que Alejandro le da oxígeno al narcisista. ¿Cuándo vas a marcar distancia del coronel psicópata Alejandro? Porque tú no eres su esencia, tú eres distinto, pero te has quedado tanto tiempo al lado del coronel psicópata que ya nadie ve con buenos ojos tú estampa. Cada vez te pareces más por imitación al desalmado militar. Recuerda que eres el promedio de las 5 personas que te rodean y ustedes son una docena sucia por lo menos. Has pasado tantos años conviviendo con el psicópata delincuente que has olvidado que es el enemigo.

Caraduras, secuaces, cómplices, coautores y encubridores, todos saben de sus negocios ilícitos, vuestra permanencia respaldando al psicópata dice muy mal de ustedes.

Si algo de dignidad les queda, renunciarían en conjunto y dejarían al coronel psicópata, expuesto y en evidencia.

«Si en algo tienes tu reputación,
procura que tus compañeros sean personas decentes,
pues vale más estar solo que mal acompañado».
George Washington.

Crisanto Gregorio León

[email protected]

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