Te cuento Carabobo/ Cristóbal Ruiz el Pintor de la Luna

Relatos ingeniosos de hechos y personajes

Caminando por las calles
de mi querida Valencia,
me llegué hasta un bulevar
lleno de muchas vivencias

Biblioteca Feo la Cruz,
y la antigua Facultad,
o Escuela de Derecho
de nuestra Universidad

Hoy es Sistema de Orquesta,
y el vetusto bulevar,
es un patio a buen resguardo
del Teatro Municipal

Lo cierto es que en ese punto
recordé a un buen amigo,
un pintor, también cronista,
y con certeza lo digo

Hablo de Cristóbal Ruiz
el gran pintor de La Luna,
de la Luna, un pueblito,
en Urama, luz y cuna

Allí nació el personaje
del que hoy le conversamos,
fue hijo de Salomé
y del señor don Graciano

(Salomé Ruiz, y Graciano Lugo)

Sería un mes de febrero
el día seis exactamente,
cuando llegó a este mundo
en un muy modesto ambiente

(06 de febrero de 1950, caserío La Luna municipio Juan José Mora estado Carabobo)

Una casa muy humilde
hecha de zinc, bahareque,
de lata una perinola,
sería su primer juguete

Iba y jugaba en el río,
agarraba pececitos,
hacia pocas travesuras
era un niño tranquilito

Escuela Nacional de Urama,
el sitio donde estudió
él y sus doce hermanos.
¡Y de Verdad lo disfrutó!

(Contaba que muchas veces iba en burro a la escuela)

Allí descubrió Cristóbal,
el prodigio de sus manos,
y unas cuantas carteleras
sus dibujos adornaron

Así que muchas maestras,
consentido lo tenían,
mientras otros carricitos
le gritaban y decían

“Cristóbal Colón
nació en un Cajón,
con una camisa
y con un pantalón”

Y Cristóbal los miraba
con algo de malestar,
pero nunca dijo nada,
se limitaba a escuchar

Con apenas ocho años
moriría su mamá,
y Cristóbal desde entonces
¡Viviría en soledad!

Primero vino a Valencia
donde estuvo poco tiempo,
trabajando de albañil
y con un morral de sueños

Luego se marcha a Caracas
y comienza a trabajar,
en un almacén de marca
…un algo quiere lograr

Va a la escuela de pintura
de nombre “Cristóbal Rojas”,
cursaría unos años,
y su talento se arroja

Se hace amigo de pintores,
cultiva la observación,
visita exposiciones,
se nutre su reflexión

Así cultiva en el tiempo
una sentida amistad,
fue con don Diego Barboza
¡Una amistad de verdad!

Una beca él recibe
para ir a estudiar arte,
la Biblioteca Nacional,
fue el empuje y el garante

Así que a Londres se marchó
junto con otros artistas,
en mil nueve del seis nueve,
una experiencia distinta

Pero la beca se acaba
y tiene que regresar,
solo fueron ocho meses
en esa tierra genial

Ya de regreso a Caracas
allí trabaja muy duró,
en galletera famosa,
y busca un mejor futuro

Pero en los años setenta
tomó una gran decisión,
dedicarse a la pintura,
con el alma y corazón

Así que estudia profundo
algunos grandes pintores,
sus trazos y pinceladas
¡Quiere ser de los mejores!

(Pablo Picasso, a Feliciano Carvallo, Armando Reverón, Jesús Soto, Cruz Diez, a su mentor Diego Barboza, entre otras grandes figuras de la plástica universal)

Al final de los setenta
a Valencia se regresa,
y en la Arturo Michelena,
estudia con entereza

(Allí ve clases con los maestros Eulalio Tovar y Tovar y con el maestro Braulio Salazar, entre otros)

Pero no se siente a gusto
y a Caracas se regresa,
el bullicio citadino,
realmente le interesa

Se sienta a pintar a diario
Plaza del Venezolano,
allí le dan sobrenombres
que el acepta con agrado

(El pintor de la plaza, o también el pintor del pueblo)

Es ahí por esos tiempos
que se acentúa un problema,
el alcohol lo desajusta,
transfigura su acuarela

Y al final de los ochenta
a Valencia nuevamente,
se regresa con sus sueños
¡Pincel, óleo y caballete!

Y aquellos pasillos viejos
Facultad de Educación,
le dan gran bienvenida
con una publicación

Antología Poética de la Federación de Centros Universitarios de la Universidad de Carabobo, titula “A Cristóbal Ruiz, dueño de estos pasillo”

Luego en el noventa y dos
nos hicimos muy amigos,
yo, pichón de cuentacuentos
él, maestro… suave trigo

Por esos tiempos expone
Facultad de Educación,
sala Aquiles Nazoa,
y le escribí esta canción

Do, Re, Mi Cristobal

Do Re Mí
Do Re Fa
Cristóbal cómo estás
Do Re Mi
Do Re Fa
Que nos vas a contar
de tu blanca barba
de tu caballete
y de tus pinturas
que son reflejo de lo que quieres
de tu hermosa Luna
vientre de tu vida
de aquellas andanzas
travesuras divertidas》

Luego de esa velada
Cristóbal seguía pintando,
por ahí en los pasillos
y anécdotas contando

Más tarde se mudaría
para el centro de Valencia,
la Facultad de Derecho,
siente mucha complacencia

Y allí en su bulevar
sigue trazando sus sueños,
y aquellos cuadriculados
se convierten en su sello

Estando en el bulevar
con juglares, trovadores
funda Zona de Descarga
¡Gran movimiento señores!

Allí, a diario se encontraba,
lienzo, paleta, pincel
y entre chanzas y recuerdos

varias frases dejó él!!!

“Somos una sociedad Bobalicona”

“Negro que no la pone entrando,
la pone saliendo”

Algunas curiosidades sobre Cristóbal Ruiz

¡Epa Poe! Era su salud, cuando estaba bueno y sano… muy refinado.
Pero si estaba ebrio, podías esperar cualquier sarta de insultos.

Nunca pudo terminar el bachillerato.

Sus estudios de pintura en la Cristóbal Rojas de Caracas, y en la Arturo Michelena de Valencia, los hizo bajo la modalidad de Clases libres de Pintura.

Cuando vino Nelson Mandela a Valencia a recibir su Doctorado honoris causa, de nuestra Universidad de Carabobo, acto realizado ahí en el Teatro Municipal de Valencia, Cristóbal estaba fuera del teatro pintando una sátira de denominada la Ultima Cena Negra. Es una pintura que hoy puede ser muy valorada… y yo estuve ahí con él.

A Cristóbal, cuando estaba ebrio, le gustaba hacer figuras del ballet clásico, y le salían muy bien.

Siempre comentaba que su segunda madre fue Simona pacheco, ahí en Urama

Aunque muchas veces decía que era de familia copeyana, militó en el Partido Comunista de Venezuela, y allí conoció a personajes como Ludovico Silva y al Cantor Alí Primera, entre otros personajes.

En la entrada de Urama por la carreta vieja San Felipe Morón se levantó un busto con el rostro de Cristóbal, quien fue distinguido como hijo Ilustre de Urama

El Señor José Tabares, dueño del bar la Guairita, lo hospedó una larga temporada en su residencia, donde Cristóbal en tiempos de lucidez, pudo pintar muchos de sus cuadros. En el bar la Guairita se pueden apreciar varías de sus pinturas.

Realizó algunas exposiciones en la sala Luis Guevara Moreno de la Biblioteca Pública Central Manuel Feo la Cruz de la ciudad de Valencia, tanto en individuales como colectivas.

Expuso en la Escuela de Teatro Ramón Zapata.

Expuso en el Ateneo Lula Beltránd de Naguanagua.

Cristóbal estuvo recluido en algunas casas de reposo de Hogares Crea, por problemas de alcohol.

También estuvo recluido en el Psiquiátrico de Bárbula.

Ilustró varias portadas de revista, entre ellas la revista Poesía de la Universidad de Carabobo.

Ganó premios de pintura en los Salones de la Casa de la Cultura de Guigue, así como en el Ateneo de Miranda estado Carabobo.

En el año 2004, se corrió el rumor que Cristóbal había fallecido, hecho que fue desmentido a los pocos días por el mismo Cristóbal (No estaba muerto estaba de parranda).

《Do Re Mi
Do Re Fa
Cristóbal dónde vas
Do Re Mi
Do Re Fa
A qué luna te irás
a pintar tus sueños
bien cuadriculados
con viejos pinceles
lienzos remendados
y ese ron clarito
que te mantiene siempre inspirado

Y aquella tú luna
va triste y llorando
se siente muy sola
te sigue esperando
pa´ que la retoques
como cuando eras solo un muchacho》

El pintor Cristóbal Ruiz,
murió muy extrañamente
para un cinco de febrero,
sin dictamen concluyente

(05 de febrero de 2005, sector El castaño del municipio Naguanagua)

Pero sigue estando ahí,
metido entre sus pinturas,
contando cada ocurrencia
de atrocidad y ternura

¡Luz eterna para ti Poe!

Don Pío Lara

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