El “silencio” del presidente de Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv), Nicolás Maduro, y de su jefe de negociaciones, Jorge Rodríguez, sobre la salida de cinco activistas de Vente Venezuela de la Embajada de Argentina en Caracas, arrojaron dudas sobre la versión del ministro del Interior y Justicia, Diosdado Cabello, que habló de un acuerdo con la oposición que facilitó el traslado de los refugiados a Estados Unidos.
A más de una semana del hecho, que la líder opositora María Corina Machado denominó “operación guacamaya” (rescate), Maduro y Rodríguez rompieron el silencio, pero no para avalar la negociación que asegura Cabello se dio, sino para “bromear” sobre el tema en palabras de Maduro o de evadirlo, en el caso del presidente de la Asamblea Nacional (AN).
A juicio de analistas consultados por Efecto Cocuyo las reacciones en el seno de la administración de Maduro sobre el hecho de la embajada argentina refuerzan la tesis no solo del rescate de los cinco miembros del equipo de Machado, sino de las fisuras internas en el chavismo, que ha dado paso a un “control de daños” para minimizar los efectos de una presunta vulneración del aparato estatal de seguridad e inteligencia que dirige Cabello.
«Mira, las guacayamas están con nosotros. La operación guacamaya ha sido un éxito, pero mira es que las guacamayas viven en Miraflores. Ya las guacayamas llegaron a Miraflores, que bellezas esas guacamayas», expresó Maduro en cadena nacional de radio y televisión, el pasado 15 de mayo, en tono de broma.
“Juegan aislados»
Pasó más de una semana para que Maduro siquiera hiciera alusión al tema y es la única ocasión hasta ahora. El fin de semana fue el turno de Jorge Rodríguez, pero no por voluntad propia. Durante una entrevista en el medio digital La Iguana TV, vinculado al chavismo, le preguntaron directamente sobre la salida de los cinco refugiados de la embajada argentina.
“No tengo la más remota idea de eso. No puedo hablar de algo que no sé”, respondió incómodo, ante la interrogante sobre si la deportación de la niña de dos años, separada de sus padres en EEUU, Maikelys Espinosa, se trató de un “intercambio” con las personas que estaban en la sede diplomática.
“Lo que se puede deducir, es que están jugando aislados entre ellos. Incluso la decisión de suspender la llegada de vuelos desde Colombia, la hace Cabello sin acompañamiento de Maduro. Pareciera que lo que están haciendo es jugar y disfrutar del poder y no precisamente en equipo”, señaló el politólogo Raniero Cassoni.
Un día después de la cadena de Maduro (el 16 de mayo), la administración chavista recibió un nuevo vuelo con migrantes deportados desde EEUU y que entre las personas estuviera la pequeña de dos años. A diferencia de otras oportunidades, Cabello no protagonizó el momento sino que apareció en escena Cilia Flores de Maduro, cargando en brazos a la niña y llevándola a Miraflores para el reencuentro con su madre y otros parientes.
En los medios del Estado se posicionó la versión sobre el “rescate” de la niña por parte de Maduro, aunque desde EEUU luego se aclaró que la niña fue enviada a Venezuela por una orden judicial.
En una especie de contraofensiva, Cabello anunció este lunes la detención de 38 personas, 21 venezolanos y 17 extranjeros (de Colombia, México y Ucrania), a quienes señaló de ser parte de un plan conspirativo que aseguró, buscaba sabotear el evento electoral previsto para este 25 de mayo.
Responsabilizó de estos planes a Machado, al ex preso político y comisario Iván Simonovis y al exoficial de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), Arturo José Gómez Morán, quien participó en 2019 en la toma del distribuidor Altamira en Caracas. Cabello advirtió sobre más detenciones en proceso.
Por si fuera poco, el número dos del chavismo informó sobre la prohibición de vuelos provenientes de Colombia, país al que señalan de ser el origen de la planificación de los supuestos planes conspirativos y de donde estarían llegando “coyotes” y “mercenarios”.
“Volverlo un tema secundario”
“Hay un ala del gobierno que le habla a su base de voto duro, y aún más en víspera de las elecciones del 25 de mayo, por lo tanto no pueden dejar espacio para la debilidad o la fragmentación. Cabello seguirá promoviendo la tesis para afectar directamente a la oposición y el liderazgo de María Corina Machado, la de la negociación, con respecto a la operación Guacamaya”, apuntó la politóloga Paola Molina Noguera.
Para la consultora en Comunicación Política aunque disperso en el tema de la salida de los refugiados de la embajada argentina, el chavismo trata de no mostrarse débil ni vulnerable ante la opinión pública y fuerzas extranjeras.
“Por ser un tema álgido en términos de control y seguridad para el gobierno, si se llegó a dar una operación de rescate sin conocimiento de todos los miembros, lo conveniente es mencionar el mínimo posible el tema, restarle importancia, para que se dilate rápidamente en el tiempo y no exista presión de brindar detalles o aclaraciones (…) asumir que se trató de una operación de rescate solo abonaría de manera positiva al capital político de Machado, ya que lograr una operación de esa magnitud desde la clandestinidad refuerza su liderazgo a lo interno y externo”, sostuvo.
A juicio de la politóloga, los esfuerzos del chavismo estarán dirigidos a reforzar en la agenda pública los temas de la conspiración, las detenciones, el evento electoral del 25 de mayo, además de las deportaciones, que son los que congregan, afirmó, a su base de apoyo, para dejar a la “operación guacamaya” como un tema secundario.
Después de más de un mes sin convocar a sesiones, la Asamblea Nacional volvió este lunes 19 de mayo al Palacio Legislativo solo para convertir en ley orgánica el plan de gobierno de Maduro y declararse reelecta para este 25 de mayo, en el caso del chavismo. La jefa de la fracción del Psuv, Tania Díaz, apoyó los anuncios de Cabello, pero nada se mencionó de lo sucedido en la embajada argentina.
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Fuente de TenemosNoticias.com: efectococuyo.com
Publicado el: 2025-05-21 10:45:00
En la sección: Política – Efecto Cocuyo