Todos hemos oído alguna vez sobre los tepuyes, formaciones naturales representativas de nuestra Gran Sabana, e incluso hemos soñado con visitarlos y disfrutar de primera mano de su gran esplendor.
Pixar, el estudio cinematográfico responsable de películas como Toy Story e Intensamente, tampoco ha sido ajeno a los encantos de estos colosos naturales. Tal fue el caso de cuando produjo Up, la historia de Carl Fredricksen, un anciano solitario que traslada su casa hasta las míticas «Cataratas del Paraíso», con ayuda de millones de globos de helio.
A propósito del decimosexto aniversario de esta película, existe un dato que la relaciona directamente con nuestro país, pues los tepuyes fueron de gran inspiración para el equipo de Pixar, en su misión de retratar un sitio exótico y paradisíaco que pudiera estimular la imaginación del público.
Pete Docter fue el director principal de Up, y en su momento comentó que la idea provino de Ralph Eggleston, uno de sus colegas de Pixar, cuando este le mostró el documental «The Lost World: Venezuela’s Ancient Tepuis«, acerca de los tepuyes venezolanos. Las imágenes de dicho documental hicieron clic de inmediato en Docter.
«Se me erizaron los pelos y supe que este era el lugar donde debíamos ambientar la película», declaró el director. Seguidamente, armó un equipo de 12 exploradores que también trabajarían en la película, en busca de «la sensación de iluminación y texturas tridimensionales» que solo se pueden obtener de visitar el lugar en sí.
Un desafío turístico de grandes recompensas
El equipo de Pixar quería que Up se desarrollara en un ambiente «de otro mundo», pero que a la vez diera una sensación de realismo: «Sabíamos que teníamos que ir ahí, porque existe algo fundamentalmente diferente en experimentar un lugar, en contraste con verlo solamente en imágenes o películas», dijo Docter.
Ya en territorio sudamericano, les tomó tres días desplazarse hasta el monte Roraima, tanto en Jeep como en helicóptero. Luego, la escalada a pie hasta la cima del tepuy les tomó de seis a siete horas.
«Hacemos dibujos animados para vivir. No había manera de prepararnos para esta aventura», declaró Docter, refiriéndose a la desafiante escalada a través de superficies irregulares y una espesa vegetación, hasta caer la noche.
«Al ver nuestras tiendas, la mayoría nos sentamos y nos echamos a llorar. Estábamos tan felices de estar allí», dijo Ronnie Del Carmen, una de las supervisoras del filme.
El siguiente reto a afrontar fueron las irregulares lluvias que inundan la cima del Roraima, además de los mosquitos, escorpiones, ranas en miniatura, hormigas asesinas y serpientes venenosas que habitan allí.
Acabada su labor de documentación, un helicóptero los llevó al tepuy Kukenán, en Santa Elena de Uairén: un paraíso rocoso casi inexplorado, considerado el «lugar de los muertos» por el pueblo Pemón.
La audaz travesía rindió frutos cuando por fin obtuvieron material que jamás hubieran encontrado en ningún otro lugar, valiéndose tanto de cámaras como de lápiz y papel. Por ejemplo, en Up se pueden ver plantas de los géneros bonnetia y stegolepis, que son grandes tesoros botánicos de Sudamérica.
El Salto Ángel: la verdadera «Catarata del Paraíso»

Conocido en pemón como Kerepakupai vená, el Salto Ángel terminó convertido en otro protagonista del filme. Aunque los personajes se refieren a él como «Cataratas del Paraíso», su apariencia única denota la gran influencia que le brindó a los artistas de Up.
Se trata, por supuesto, de la caída de agua más alta del mundo, perteneciente al parque nacional Canaima, que es una reserva natural reconocida por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad.
Nuevamente, la exploración fue todo un desafío, pasando por resbaladizas rocas mojadas y un rocío constante de agua.
Aun tras ver esta imponente cascada en persona, el equipo se tomó pequeñas libertades creativas al llevarla al mundo de la fantasía, pues en Up es hasta tres veces más alta que en la vida real, donde su altura es de 9700 pies aproximadamente.
El resultado: un clásico instantáneo
Completada gracias a los últimos avances en animación digital de aquel entonces, Up tuvo su premier en el Festival de Cine de Cannes el 13 de mayo de 2009. En Venezuela tardó un poco más en llegar: el 5 de junio de 2009.
Se convirtió en la sexta película más taquillera de 2009, con una recaudación total de USD 735 millones (de los cuales, 7.2 millones provinieron del mercado venezolano)
Pixar ya había explorado el fondo del mar en Buscando a Nemo, el mundo de los monstruos que acechan desde el armario en Monsters, Inc., y con Up le demostró a las audiencias el paraíso legendario que es Venezuela.
«Cuando se decidió dónde ubicaríamos la historia, me sentí lleno de orgullo», dijo Esdras Varagnolo, director de iluminación de Up y único venezolano involucrado en la película, en entrevista con el medio BBC Mundo.
«No es muy frecuente que una producción de esta magnitud presente una cara tan poco conocida de mi país», subrayó Varagnolo.
Así, ha quedado para la posteridad, quizás como uno de los filmes de Pixar más emotivos, emocionantes y carismáticos, que aún garantiza una montaña rusa de aventuras a 16 años de su estreno.

Andrés Amundaray (Pasante)
Fuente de TenemosNoticias.com: elluchador.info
Publicado el: 2025-05-13 10:30:00
En la sección: Diario El Luchador