Maduro cierra la Oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos de la ONU y expulsa a sus funcionarios | elmundo.es

Ultimtum de 72 horas para Naciones Unidas en Caracas. La revolucin bolivariana orden este jueves el cierre inmediato de la oficina en Venezuela del Alto Comisionado de Derechos Humanos de la ONU como represalia por sus crticas al encarcelamiento que sufre la activista hispanovenezolana Roco San Miguel, relevante figura de la sociedad civil. La presidenta de la ONG Control Ciudadano para la Seguridad, la Defensa y la Fuerza Armada Nacional permanece recluida en el Helicoide, la siniestra crcel de la polica poltica de Nicols Maduro en la capital venezolana.

«Esta decisin es tomada debido al impropio papel que esta institucin ha desarrollado que, lejos de mostrarla como un ente imparcial, la ha llevado a convertirse en el bufete particular de los grupos golpistas y terroristas que permanente se confabulan contra el pas», comunic el canciller revolucionario, Yvn Gil, en lo que supone una escalada sin freno desde que el hijo de Chvez decretara la puesta en marcha de la «furia bolivariana» de cara a las elecciones presidenciales de este ao.

Los 13 funcionarios adscritos a la Oficina Tcnica de Asesora del Alto Comisionado en Venezuela disponen as de tres das para abandonar el pas petrolero «hasta tanto rectifiquen pblicamente ante la comunidad internacional su actitud colonialista, abusiva y violadora de la Carta de Naciones Unidas», demand Gil, quien asegur que su gobierno realizar una «revisin integral» durante 30 das de la cooperacin tcnica puesta en marcha con la ONU en 2019.

La detencin de San Miguel desencaden una oleada de censuras y crticas, a las que se uni el Alto Comisionado Volker Trk, quien exigi «su liberacin inmediata y respeto a su derecho a la defensa legal». Lo que ms irrit al Gobierno de Maduro fue que calificara como «desaparicin forzada» lo sucedido con la activista, que estuvo ms de 100 horas en paradero desconocido e incomunicada, que no cont con sus abogados ni antes ni durante su presentacin nocturna ante una tribunal antiterrorista y que adems sufri la captura de cinco familiares muy cercanos, incluida su hija Miranda, que como su madre tambin cuenta con doble nacionalidad y vive en Madrid.

Sobre la activista de derechos humanos pesa una acusacin de terrorismo, conspiracin y traicin a la patria por colaborar, supuestamente, en un presunto intento de magnicidio contra Maduro, uno de los cinco denunciados en las ltimas semanas desde el poder bolivariano.

Las organizaciones venezolanas reclamaban en las ltimas horas a la Oficina de la ONU que elevara su presin para que confirmara el estado fsico de San Miguel en su lugar de reclusin.

En contra de la oficina de la ONU en Caracas se ha sumado tambin la visita de Michael Fakhri, relator especial de la ONU sobre el derecho a la Alimentacin. El funcionario cont con el respaldo de la oficina en sus distintos itinerarios, dificultados por las habituales medidas bolivarianas. Sus conclusiones no gustaron nada al chavismo: los CLAP, bolsas de comida parecidas a la libreta cubana de racionamiento, eje fundamental del sistema de control social del gobierno, se ha convertido en una «limosna caritativa» de bajo valor nutricional y mala calidad dentro de un sistema de clientelismo en el que se la niega a crticos y opositores.

«Esta medida aumenta la desproteccin de las vctimas ante los abusos e intenta impedir el escrutinio de los rganos internacionales de proteccin ante las graves violaciones de derechos humanos», critic con dureza Provea, ONG tambin situada en el punto de mira del chavismo por su denuncias acerca de la desaparicin forzada de San Miguel.

«Este paso forma parte del mismo guion: radicalizarse contra algunos actores polticos por hacer contencin ante el lamentable episodio de San Miguel mientras hablas de garantas electorales e invitas a algunas de estas mismas organizaciones a ser observadoras del proceso. Cuando el chavismo ve su continuidad en el poder comprometida, por escenarios electorales o extra-electorales, suelen apretar sus arremetidas contra el espacio cvico del pas«, sintetiz para EL MUNDO el consultor poltico Luis Peche Arteaga.